lunes, 8 de diciembre de 2025

Lecturas 8 de Diciembre de 2025

 

  • Primera Lectura

    Génesis 3:9-15, 20

    9
    El Señor Dios llamó al hombre y le dijo:
    —¿Dónde estás?
    10
    Éste contestó:
    —Oí tu voz en el jardín y tuve miedo porque estaba desnudo; por eso me oculté.
    11
    Dios le preguntó:
    —¿Quién te ha indicado que estabas desnudo? ¿Acaso has comido del árbol del que te prohibí comer?
    12
    El hombre contestó:
    —La mujer que me diste por compañera me dio del árbol y comí.
    13
    Entonces el Señor Dios dijo a la mujer:
    —¿Qué es lo que has hecho? La mujer respondió: —La serpiente me engañó y comí.
    14
    El Señor Dios dijo a la serpiente:
    —Por haber hecho eso, maldita seas entre todos los animales y todas las bestias del campo. Te arrastrarás sobre el vientre, y polvo comerás todos los días de tu vida.
    15
    Pondré enemistad entre ti y la mujer,
    entre tu linaje y el suyo; él te herirá en la cabeza, mientras tú le herirás en el talón.
    20El hombre llamó a su mujer Eva, porque ella habría de ser la madre de todos los vivientes.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 98:1-4

    1
    Salmo.
    Cantad al Señor un cántico nuevo porque ha hecho maravillas. Su diestra le ha salvado, su santo brazo.
    2
    El Señor ha dado a conocer su salvación;
    ha revelado su justicia a los ojos de las naciones.
    3
    Se acordó de su misericordia y fidelidad
    con la casa de Israel. Todos los confines de la tierra han visto la salvación de nuestro Dios.
    4
    Aclamad al Señor, la tierra entera;
    gritad, cantad, entonad salmos.

  • Segunda Lectura

    Efesios 1:3-6, 11-12

    3
    Bendito sea el Dios y Padre
    de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en Cristo con toda bendición espiritual en los cielos,
    4
    ya que en él nos eligió
    antes de la creación del mundo para que fuéramos santos y sin mancha en su presencia, por el amor;
    5
    nos predestinó a ser sus hijos adoptivos
    por Jesucristo conforme al beneplácito de su voluntad,
    6
    para alabanza y gloria de su gracia,
    con la cual nos hizo gratos en el Amado;
    11por quien también fuimos constituidos herederos, predestinados según el designio de quien realiza todo con arreglo al consejo de su voluntad,
    12para que nosotros, los que antes habíamos esperado en el Mesías, sirvamos para alabanza de su gloria.

  • Evangelio

    Lucas 1:26-38

    26En el sexto mes fue enviado el ángel Gabriel de parte de Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret,
    27a una virgen desposada con un varón de nombre José, de la casa de David. El nombre de la virgen era María.
    28
    Y entró donde ella estaba y le dijo:
    —Dios te salve, llena de gracia, el Señor es contigo.
    29Ella se turbó al oír estas palabras, y consideraba qué podía significar este saludo.
    30
    Y el ángel le dijo:
    —No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios:
    31concebirás en tu seno y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús.
    32Será grande y será llamado Hijo del Altísimo; el Señor Dios le dará el trono de David, su padre,
    33reinará eternamente sobre la casa de Jacob y su Reino no tendrá fin.
    34
    María le dijo al ángel:
    —¿De qué modo se hará esto, pues no conozco varón?
    35
    Respondió el ángel y le dijo:
    —El Espíritu Santo descenderá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso, el que nacerá Santo será llamado Hijo de Dios.
    36Y ahí tienes a Isabel, tu pariente, que en su ancianidad ha concebido también un hijo, y la que llamaban estéril está ya en el sexto mes,
    37porque para Dios no hay nada imposible.
    38
    Dijo entonces María:
    —He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra. Y el ángel se retiró de su presencia.

domingo, 7 de diciembre de 2025

Lecturas 7 de Diciembre de 2025

 

  • Primera Lectura

    Isaías 11:1-10

    1Saldrá un vástago de la cepa de Jesé, y de sus raíces florecerá un retoño.
    2
    Sobre él reposará el Espíritu del Señor,
    espíritu de sabiduría y de entendimiento, espíritu de consejo y de fortaleza, espíritu de ciencia y de temor del Señor.
    3
    Y lo inspirará con el temor del Señor.
    No juzgará según las apariencias, ni decidirá según los rumores;
    4
    sino que juzgará con justicia a los desvalidos,
    y decidirá con rectitud a favor de los pobres de la tierra. Golpeará al país con la vara de su boca, y matará al impío con el soplo de sus labios.
    5
    La justicia será el ceñidor de su cintura,
    y la fe, el cinturón de sus caderas.
    6
    Entonces el lobo convivirá con el cordero,
    el leopardo se tumbará con el cabrito, ternero y león joven engordarán juntos, y un niño pequeño los guiará.
    7
    La vaca pacerá con la osa,
    sus crías se recostarán juntas, y el león, como el buey, comerá paja.
    8
    El niño de pecho jugará junto al agujero del áspid
    y el destetado meterá su mano en la madriguera de la víbora.
    9
    Nadie hará mal ni causará daño
    en todo mi monte santo, porque la tierra estará llena del conocimiento del Señor, como las aguas que cubren el mar.
    10
    Aquel día, la raíz de Jesé
    se alzará como bandera para los pueblos, la buscarán las naciones, y su morada será gloriosa.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 72:1-2, 7-8, 12-13, 17

    1
    De Salomón.
    Dios mío, concede tu juicio al rey y tu justicia al hijo del rey.
    2
    Que gobierne a tu pueblo con justicia
    y a tus pobres con equidad.
    7
    Florezca en sus días la justicia,
    y haya paz abundante mientras perdure la luna.
    8
    Domine de mar a mar,
    desde el Río hasta los confines de la tierra.
    12
    Porque él librará al desvalido que clama
    y al pobre que no tiene amparo.
    13
    Tendrá piedad del débil y del desvalido
    y salvará la vida de los indigentes.
    17
    Su nombre subsistirá por siempre,
    su nombre se perpetuará mientras dure el sol. En él serán benditas todas las tribus de la tierra; todas las naciones lo proclamarán dichoso.

  • Segunda Lectura

    Romanos 15:4-9

    4Porque todas las cosas que ya están escritas fueron escritas para nuestra enseñanza, con el fin de que mantengamos la esperanza mediante la paciencia y la consolación de las Escrituras.
    5Que el Dios de la paciencia y de la consolación os dé un mismo sentir entre vosotros según Cristo Jesús,
    6para que unánimemente, con una sola voz, glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo.
    7Por esta razón acogeos unos a otros, como también Cristo os acogió a vosotros para gloria de Dios.
    8Digo, en efecto, que Cristo se hizo servidor de los que están circuncidados para mostrar la fidelidad de Dios, para ratificar las promesas hechas a los padres,
    9
    y para que los gentiles glorificaran a Dios por su misericordia, conforme está escrito:
    Por eso te alabaré a ti entre los gentiles, y cantaré en honor de tu nombre.

  • Evangelio

    Mateo 3:1-12

    1En aquellos días apareció Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea 
    2
    y diciendo:
    —Convertíos, porque está al llegar el Reino de los Cielos.
    3
    Éste es aquel de quien habló el profeta Isaías diciendo:
    Voz del que clama en el desierto: «Preparad el camino del Señor, haced rectas sus sendas».
    4Llevaba Juan una vestidura de pelo de camello con un ceñidor de cuero a la cintura, y su comida eran langostas y miel silvestre.
    5Entonces acudía a él Jerusalén, toda Judea y toda la comarca del Jordán, 
    6y eran bautizados por él en el río Jordán, confesando sus pecados.
    7
    Al ver que venían a su bautismo muchos fariseos y saduceos, les dijo:
    —Raza de víboras, ¿quién os enseñó a huir de la ira que va a venir?
    8Dad, por tanto, un fruto digno de penitencia,
    9y no os justifiquéis interiormente pensando: «Tenemos por padre a Abrahán». Porque os aseguro que Dios puede hacer surgir de estas piedras hijos de Abrahán.
    10Ya está el hacha puesta junto a la raíz de los árboles. Por tanto, todo árbol que no da buen fruto se corta y se arroja al fuego.
    11»Yo os bautizo con agua para la conversión, pero el que viene después de mí es más poderoso que yo, a quien no soy digno de llevarle las sandalias. Él os bautizará en el Espíritu Santo y en fuego.
    12Él tiene en su mano el bieldo y limpiará su era, y recogerá su trigo en el granero; en cambio, quemará la paja con un fuego que no se apaga.