sábado, 11 de junio de 2016

Evangelio 12 de Junio de 2016

Color: Verde

Santos:

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    II Samuel 12:7-10, 13
    7 Entonces Natán dijo a David: «Tú eres ese hombre. Así dice Yahveh Dios de Israel: Yo te he ungido rey de Israel y te he librado de las manos de Saúl.
    8 Te he dado la casa de tu señor y he puesto en tu seno las mujeres de tu señor; te he dado la casa de Israel y de Judá; y si es poco, te añadiré todavía otras cosas.
    9 ¿Por qué has menospreciado a Yahveh haciendo lo malo a sus ojos, matando a espada a Urías el hitita, tomando a su mujer por mujer tuya y matándole por la espada de los ammonitas?
    10 Pues bien, nunca se apartará la espada de tu casa, ya que me has despreciado y has tomado la mujer de Urías el hitita para mujer tuya.
    13 David dijo a Natán: «He pecado contra Yahveh.» Respondió Natán a David: «También Yahveh perdona tu pecado; no morirás.
  • Salmo responsorial

    Salmo 32:1-2, 5, 7, 11
    1 De David. Poema. ¡Dichoso el que es perdonado de su culpa, y le queda cubierto su pecado!
    2 Dichoso el hombre a quien Yahveh no le cuenta el delito, y en cuyo espíritu no hay fraude.
    5 Mi pecado te reconocí, y no oculté mi culpa; dije: «Me confesaré a Yahveh de mis rebeldías.» Y tú absolviste mi culpa, perdonaste mi pecado.
    7 Tú eres un cobijo para mí, de la angustia me guardas, estás en torno a mí para salvarme.
    11 ¡Alegraos en Yahveh, oh justos, exultad, gritad de gozo, todos los de recto corazón!
  • Segunda lectura

    Gálatas 2:16, 19-21
    16 conscientes de que el hombre no se justifica por las obras de la ley sino sólo por la fe en Jesucristo, también nosotros hemos creído en Cristo Jesús a fin de conseguir la justificación por la fe en Cristo, y no por las obras de la ley, pues por las obras de la ley nadie será justificado.
    19 En efecto, yo por la ley he muerto a la ley, a fin de vivir para Dios: con Cristo estoy crucificado:
    20 y no vivo yo, sino que es Cristo quien vive en mí; la vida que vivo al presente en la carne, la vivo en la fe del Hijo de Dios que me amó y se entregó a sí mismo por mí.
    21 No tengo por inútil la gracia de Dios, pues si por la ley se obtuviera la justificación, entonces hubiese muerto Cristo en vano.
  • Evangelio

    Lucas 7:36--8:3
    36 Un fariseo le rogó que comiera con él, y, entrando en la casa del fariseo, se puso a la mesa.
    37 Había en la ciudad una mujer pecadora pública, quien al saber que estaba comiendo en casa del fariseo, llevó un frasco de alabastro de perfume,
    38 y poniéndose detrás, a los pies de él, comenzó a llorar, y con sus lágrimas le mojaba los pies y con los cabellos de su cabeza se los secaba; besaba sus pies y los ungía con el perfume.
    39 Al verlo el fariseo que le había invitado, se decía para sí: «Si éste fuera profeta, sabría quién y qué clase de mujer es la que le está tocando, pues es una pecadora.»
    40 Jesús le respondió: «Simón, tengo algo que decirte.» El dijo: «Di, maestro.»
    41 Un acreedor tenía dos deudores: uno debía quinientos denarios y el otro cincuenta.
    42 Como no tenían para pagarle, perdonó a los dos. ¿Quién de ellos le amará más?»
    43 Respondió Simón: «Supongo que aquel a quien perdonó más.» El le dijo: «Has juzgado bien»,
    44 y volviéndose hacia la mujer, dijo a Simón: «¿Ves a esta mujer? Entré en tu casa y no me diste agua para los pies. Ella, en cambio, ha mojado mis pies con lágrimas, y los ha secado con sus cabellos.
    45 No me diste el beso. Ella, desde que entró, no ha dejado de besarme los pies.
    46 No ungiste mi cabeza con aceite. Ella ha ungido mis pies con perfume.
    47 Por eso te digo que quedan perdonados sus muchos pecados, porque ha mostrado mucho amor. A quien poco se le perdona, poco amor muestra.»
    48 Y le dijo a ella: «Tus pecados quedan perdonados.»
    49 Los comensales empezaron a decirse para sí: «¿Quién es éste que hasta perdona los pecados?»
    50 Pero él dijo a la mujer: «Tu fe te ha salvado. Vete en paz.»
    1 Y sucedió a continuación que iba por ciudades y pueblos, proclamando y anunciando la Buena Nueva del Reino de Dios; le acompañaban los Doce,
    2 y algunas mujeres que habían sido curadas de espíritus malignos y enfermedades: María, llamada Magdalena, de la que habían salido siete demonios,
    3 Juana, mujer de Cusa, un administrador de Herodes, Susana y otras muchas que les servían con sus bienes.

    O también:
    Lucas 7:36-50
    36 Un fariseo le rogó que comiera con él, y, entrando en la casa del fariseo, se puso a la mesa.
    37 Había en la ciudad una mujer pecadora pública, quien al saber que estaba comiendo en casa del fariseo, llevó un frasco de alabastro de perfume,
    38 y poniéndose detrás, a los pies de él, comenzó a llorar, y con sus lágrimas le mojaba los pies y con los cabellos de su cabeza se los secaba; besaba sus pies y los ungía con el perfume.
    39 Al verlo el fariseo que le había invitado, se decía para sí: «Si éste fuera profeta, sabría quién y qué clase de mujer es la que le está tocando, pues es una pecadora.»
    40 Jesús le respondió: «Simón, tengo algo que decirte.» El dijo: «Di, maestro.»
    41 Un acreedor tenía dos deudores: uno debía quinientos denarios y el otro cincuenta.
    42 Como no tenían para pagarle, perdonó a los dos. ¿Quién de ellos le amará más?»
    43 Respondió Simón: «Supongo que aquel a quien perdonó más.» El le dijo: «Has juzgado bien»,
    44 y volviéndose hacia la mujer, dijo a Simón: «¿Ves a esta mujer? Entré en tu casa y no me diste agua para los pies. Ella, en cambio, ha mojado mis pies con lágrimas, y los ha secado con sus cabellos.
    45 No me diste el beso. Ella, desde que entró, no ha dejado de besarme los pies.
    46 No ungiste mi cabeza con aceite. Ella ha ungido mis pies con perfume.
    47 Por eso te digo que quedan perdonados sus muchos pecados, porque ha mostrado mucho amor. A quien poco se le perdona, poco amor muestra.»
    48 Y le dijo a ella: «Tus pecados quedan perdonados.»
    49 Los comensales empezaron a decirse para sí: «¿Quién es éste que hasta perdona los pecados?»
    50 Pero él dijo a la mujer: «Tu fe te ha salvado. Vete en paz.»

Evangelio 11 de junio de 2016

Color: Rojo

Santos:

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    Hechos 11:21-26; 13:1-3
    21 La mano del Señor estaba con ellos, y un crecido número recibió la fe y se convirtió al Señor.
    22 La noticia de esto llegó a oídos de la Iglesia de Jerusalén y enviaron a Bernabé a Antioquía.
    23 Cuando llegó y vio la gracia de Dios se alegró y exhortaba a todos a permanecer, con corazón firme, unidos al Señor,
    24 porque era un hombre bueno, lleno de Espíritu Santo y de fe. Y una considerable multitud se agregó al Señor.
    25 Partió para Tarso en busca de Saulo,
    26 y en cuanto le encontró, le llevó a Antioquía. Estuvieron juntos durante un año entero en la Iglesia y adoctrinaron a una gran muchedumbre. En Antioquía fue donde, por primera vez, los discípulos recibieron el nombre de «cristianos».
    1 Había en la Iglesia fundada en Antioquía profetas y maestros: Bernabé, Simeón llamado Níger, Lucio el cirenense, Manahén, hermano de leche del tetrarca Herodes, y Saulo.
    2 Mientras estaban celebrando el culto del Señor y ayunando, dijo el Espíritu Santo: «Separadme ya a Bernabé y a Saulo para la obra a la que los he llamado.»
    3 Entonces, después de haber ayunado y orado, les impusieron las manos y les enviaron.
  • Salmo responsorial

    Salmo 98:1-6
    1 Salmo. Cantad a Yahveh un canto nuevo, porque ha hecho maravillas; victoria le ha dado su diestra y su brazo santo.
    2 Yahveh ha dado a conocer su salvación, a los ojos de las naciones ha revelado su justicia;
    3 se ha acordado de su amor y su lealtad para con la casa de Israel. Todos los confines de la tierra han visto la salvación de nuestro Dios.
    4 ¡Aclamad a Yahveh, toda la tierra, estallad, gritad de gozo y salmodiad!
    5 Salmodiad para Yahveh con la cítara, con la cítara y al son de la salmodia;
    6 con las trompetas y al son del cuerno aclamad ante la faz del rey Yahveh.
  • Evangelio

    Mateo 10:7-13
    7 Id proclamando que el Reino de los Cielos está cerca.
    8 Curad enfermos, resucitad muertos, purificad leprosos, expulsad demonios. Gratis lo recibisteis; dadlo gratis.
    9 No os procuréis oro, ni plata, ni calderilla en vuestras fajas;
    10 ni alforja para el camino, ni dos túnicas, ni sandalias, ni bastón; porque el obrero merece su sustento.
    11 «En la ciudad o pueblo en que entréis, informaos de quién hay en él digno, y quedaos allí hasta que salgáis.
    12 Al entrar en la casa, saludadla.
    13 Si la casa es digna, llegue a ella vuestra paz; mas si no es digna, vuestra paz se vuelva a vosotros.

Evangelio meditado

No juréis en modo alguno
Tiempo Ordinario


Tiempo Ordinario. Él conoce nuestro corazón mejor que nosotros mismos.


Por: Juan Jesús Riveros | Fuente: Catholic.net 



Del santo Evangelio según san Mateo 5, 33-37
Habéis oído también que se dijo a los antepasados: No perjurarás, sino que cumplirás al Señor tus juramentos. Pues yo digo que no juréis en modo alguno: ni por el Cielo, porque es el trono de Dios, ni por la Tierra, porque es el escabel de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran rey. Ni tampoco jures por tu cabeza, porque ni a uno solo de tus cabellos puedes hacerlo blanco o negro. Sea vuestro lenguaje: "Sí, sí"; "no, no": que lo que pasa de aquí viene del Maligno.

Oración introductoria
El Papa Francisco nos dice: «Estar con Jesús exige salir de nosotros mismos, de un modo de vivir cansino y rutinario». Señor, en esta oración te pido tu gracia para salir de mí mismo y escucharte. Te he fallado, pero te adoro y confío en tu misericordia. Quiero estar contigo, así como Tú quieres estar conmigo.

Petición
Dame la gracia de dar siempre un testimonio coherente de mi fe.

Meditación del Papa Benedicto XVI
El Espíritu Santo es la certeza de que Dios llevará a cumplimiento su plan de salvación, cuando conduzca "a Cristo por cabeza, lo que está en los cielos y lo que está en la tierra". San Juan Crisóstomo comenta sobre este punto: "Dios nos escogió por la fe y ha marcado en nosotros el sello de la herencia de la gloria futura". Tenemos que aceptar que el camino de nuestra redención es también nuestro camino, porque Dios quiere criaturas libres, que digan libremente que sí; pero es sobre todo y primero, Su camino. Estamos en sus manos y ahora es nuestra libertad el ir en el camino abierto por Él. Vamos por este camino de la redención, junto con Cristo, y sentimos que la redención se realiza. La visión que nos presenta san Pablo en esta gran oración de bendición, nos ha llevado a contemplar la acción de las tres Personas de la Santísima Trinidad: el Padre que nos ha elegido antes de la fundación del mundo, ha pensado en nosotros y nos ha creado; el Hijo que nos ha redimido por su sangre, y la promesa del Espíritu Santo, prenda de nuestra redención y de la gloria futura. (Benedicto XVI, 20 de junio de 2012).

Reflexión

"No perjurarás", el Señor no necesita nuestros juramentos para saber que vamos a cumplir. Él prefiere que nos esforcemos hasta lograr nuestro propósito, no importando las veces que caigamos. Él conoce mejor que nosotros mismos nuestro corazón, sabe que somos débiles, sabe que caeremos, pero también sabe que nos volveremos a levantar si lo que hacemos lo estamos haciendo por Él.

También Él nos invita a confiarnos plenamente a su amor. No podemos cambiar nada de nuestro cuerpo, pero Él todo lo puede; en él todo dolor físico cambia, cobra todo su valor, ya no sufriremos sin sentido, ahora podemos unir nuestro sufrimiento al de Cristo en la cruz. ¿Por qué Dios no nos quita el sufrimiento? Tal vez porque nos ama tanto que quiere asociarnos más a su propio sufrimiento. Nosotros sufriendo tan pequeñitas cosas, en comparación con lo que Él sufrió por nosotros, le ayudamos a salvar a tantos hombres que no lo conocen o se han alejado de Él.

Diálogo con Cristo
Jesucristo, ¡venga tu Reino! Ésta es la aspiración de mi existencia. Que tu Reino se establezca y se realice en mi persona. Me conoces mejor de lo que yo me conozco, por eso necesito que seas el Rey de mi vida y me digas quién soy yo y qué tengo que hacer para cumplir tu voluntad.

Propósito
Si hoy tengo un problema, pediré a Dios que me ayude, en vez de tratar de solucionar todo con mi propio esfuerzo.

viernes, 10 de junio de 2016

Evangelio 10 de Junio de 2016

Color: Verde

Santos:

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    I Reyes 19:9, 11-16
    9 Allí entró en la cueva, y pasó en ella la noche. Le fue dirigida la palabra de Yahveh, que le dijo: «¿Qué haces aquí Elías?»
    11 Le dijo: «Sal y ponte en el monte ante Yahveh.» Y he aquí que Yahveh pasaba. Hubo un huracán tan violento que hendía las montañas y quebrantaba las rocas ante Yahveh; pero no estaba Yahveh en el huracán. Después del huracán, un temblor de tierra; pero no estaba Yahveh en el temblor.
    12 Después del temblor, fuego, pero no estaba Yahveh en el fuego. Después del fuego, el susurro de una brisa suave.
    13 Al oírlo Elías, cubrió su rostro con el manto, salió y se puso a la entrada de la cueva. Le fue dirigida una voz que le dijo: «¿Qué haces aquí, Elías?»
    14 El respondió: «Ardo en celo por Yahveh, Dios Sebaot, porque los israelitas han abandonado tu alianza, han derribado tus altares y han pasado a espada a tus profetas; quedo yo solo y buscam mi vida para quitármela.»
    15 Yahveh le dijo: «Anda, vuelve por tu camino hacia el desierto de Damasco. Vete y unge a Jazael como rey de Aram.
    16 Ungirás a Jehú, hijo de Nimsí, como rey de Israel, y a Eliseo, hijo de Safat, de Abel Mejolá, le ungirás como profeta en tu lugar.
  • Salmo responsorial

    Salmo 27:7-9, 13-14
    7 Escucha, Yahveh, mi voz que clama, ¡tenme piedad, respóndeme!
    8 Dice de ti mi corazón: «Busca su rostro.» Sí, Yahveh, tu rostro busco:
    9 No me ocultes tu rostro. No rechaces con cólera a tu siervo; tú eres mi auxilio. No me abandones, no me dejes, Dios de mi salvación.
    13 ¡Ay, si estuviera seguro de ver la bondad de Yahveh en la tierra de los vivos!
    14 Espera en Yahveh, ten valor y firme corazón, espera en Yahveh.
  • Evangelio

    Mateo 5:27-32
    27 «Habéis oído que se dijo: No cometerás adulterio.
    28 Pues yo os digo: Todo el que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón.
    29 Si, pues, tu ojo derecho te es ocasión de pecado, sácatelo y arrójalo de ti; más te conviene que se pierda uno de tus miembros, que no que todo tu cuerpo sea arrojado a la gehenna.
    30 Y si tu mano derecha te es ocasión de pecado, córtatela y arrójala de ti; más te conviene que se pierda uno de tus miembros, que no que todo tu cuerpo vaya a la gehenna.
    31 «También se dijo: El que repudie a su mujer, que le dé acta de divorcio.
    32 Pues yo os digo: Todo el que repudia a su mujer, excepto el caso de fornicación, la hace ser adúltera; y el que se case con una repudiada, comete adulterio.

Evangelio meditado

Nada sea ocasión de pecado
Tiempo Ordinario


Tiempo Ordinaio. Cristo no quiere el mal de nuestro cuerpo, quiere el bien del alma.


Por: Juan Jesús Riveros | Fuente: Catholic.net 



Del santo Evangelio según san Mateo 5, 27-32
«Habéis oído que se dijo: No cometerás adulterio. Pues yo os digo: Todo el que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón. Si, pues, tu ojo derecho te es ocasión de pecado, sácatelo y arrójalo de ti; más te conviene que se pierda uno de tus miembros, que no que todo tu cuerpo sea arrojado a la gehenna. Y si tu mano derecha te es ocasión de pecado, córtatela y arrójala de ti; más te conviene que se pierda uno de tus miembros, que no que todo tu cuerpo vaya a la gehenna. «También se dijo: El que repudie a su mujer, que le dé acta de divorcio. Pues yo os digo: Todo el que repudia a su mujer, excepto el caso de fornicación, la hace ser adúltera; y el que se case con una repudiada, comete adulterio.

Oración introductoria
Jesucristo, no dejes que me escandalice por la radicalidad de tu Palabra, que es la verdad. En este momento de oración quiero arrancar todo que pueda ser ocasión de distracción. Sé que el tesoro de la oración no es fácil y que Tú sólo se lo entregas a quien se esfuerza. Ayúdame a perseverar en mi lucha y a dialogar contigo sinceramente, de corazón a Corazón.

Petición
Señor, quiero escuchar en mi corazón lo que Tú me quieras decir hoy.

Meditación del Papa Benedicto XVI
Es importante recordar que "el amor de los esposos exige, por su misma naturaleza, la unidad y la indisolubilidad de la comunidad de personas que abarca la vida entera de los esposos". De hecho, Jesús dijo claramente: "Lo que Dios unió, no lo separe el hombre" y añadió: "Quien repudie a su mujer y se case con otra, comete adulterio contra aquella; y si ella repudia a su marido y se casa con otro, comete adulterio". Con toda la comprensión que la Iglesia puede sentir ante tales situaciones, no existen casados de segunda unión, como los hay de primera; esa es una situación irregular y peligrosa, que es necesario resolver con fidelidad a Cristo, encontrando con la ayuda de un sacerdote un camino posible para poner a salvo a cuantos están implicados en ella.
Para ayudar a las familias, os exhorto a proponerles con convicción las virtudes de la Sagrada Familia: la oración, piedra angular de todo hogar fiel a su identidad y a su misión; la laboriosidad, eje de todo matrimonio maduro y responsable; y el silencio, fundamento de toda actividad libre y eficaz. (Benedicto XVI, 25 de septiembre de 2009).

Reflexión
En la vida de San Antonio de Padua se cuenta un hecho que sucedió a raíz de este evangelio: un joven que le dio un puntapié a su madre oyendo hablar al santo sobre este pasaje evangélico se desesperó y se cortó el pie. La madre del muchacho acudió desesperada al predicador, éste vino y puso el pie en su lugar, y el joven milagrosamente fue curado.

Este evangelio no es para tomarlo al pie de la letra en lo que respecta a la integridad física, debemos tomarlo al pie de la letra en lo que atañe al bien espiritual.

Cristo es muy sabio al darnos estos consejos, porque no quiere el mal de nuestro cuerpo, quiere el bien del alma. Así como es doloroso cortarse un miembro sin anestesia, así más dolor causa al alma el perder un miembro por utilizarlo en el pecado.

Cuando hay verdadero amor de un hombre por una mujer, de una mujer por un hombre, de los enamorados entre sí, de los adolescentes a la vida,... de todos a Dios, no se puede mirar a una mujer deseándola.

Todos somos hijos del Padre Eterno, y como hijos de un mismo Padre debemos mirar no lo que llevamos encima, sino más bien lo que hay en el corazón del hombre: un pequeño reflejo del fuego del amor de Dios.

Diálogo con Cristo
Jesucristo, quiero configurar todo mi ser al programa de vida que propone tu Palabra. Te prometo no escatimar esfuerzos por conocer las implicaciones morales del Evangelio para conformar con ellas todo mi obrar, y desterrar de mi vida todo lo que pueda ser un obstáculo para crecer en mi amor a Ti y a los demás.

Propósito
Adoptar la bondad en mis pensamientos y deseos, y negar la entrada a cualquier pensamiento que me pueda apartar de Cristo.

jueves, 9 de junio de 2016

Evangelio 9 de Junio de 2016

Color: Verde

Santos:

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    I Reyes 18:41-46
    41 Dijo Elías a Ajab: «Sube, come y bebe, porque ya se oye el rumor de la lluvia.»
    42 Subió Ajab a comer y beber, mientras que Elías subía a la cima del Carmelo, y se encorvó hacia la tierra poniendo su rostro entre las rodillas.
    43 Dijo a su criado : «Sube y mira hacia el mar.» Subió, miró y dijo: «No hay nada.» El dijo: «Vuelve.» Y esto siete veces.
    44 A la séptima vez dijo: «Hay una nube como la palma de un hombre, que sube del mar.» Entonces dijo: «Sube a decir a Ajab: Unce el carro y baja, no te detenga la lluvia.»
    45 Poco a poco se fue oscureciendo el cielo por las nubes y el viento y se produjo gran lluvia. Ajab montó en su carro y se fue a Yizreel.
    46 La mano de Yahveh vino sobre Elías que, ciñéndose la cintura, corrió delante de Ajab hasta la entrada de Yizreel.
  • Salmo responsorial

    Salmo 65:10-13
    10 Tú visitas la tierra y la haces rebosar, de riquezas la colmas. El río de Dios va lleno de agua, tú preparas los trigales. Así es como la preparas:
    11 riegas sus surcos, allanas sus glebas, con lluvias la ablandas, bendices sus renuevos.
    12 Tú coronas el año con tu benignidad, de tus rodadas cunde la grosura;
    13 destilan los pastos del desierto, las colinas se ciñen de alegría;
  • Evangelio

    Mateo 5:20-26
    20 «Porque os digo que, si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el Reino de los Cielos.
    21 «Habéis oído que se dijo a los antepasados: No matarás; y aquel que mate será reo ante el tribunal.
    22 Pues yo os digo: Todo aquel que se encolerice contra su hermano, será reo ante el tribunal; pero el que llame a su hermano "imbécil", será reo ante el Sanedrín; y el que le llame "renegado", será reo de la gehenna de fuego.
    23 Si, pues, al presentar tu ofrenda en el altar te acuerdas entonces de que un hermano tuyo tiene algo contra ti,
    24 deja tu ofrenda allí, delante del altar, y vete primero a reconciliarte con tu hermano; luego vuelves y presentas tu ofrenda.
    25 Ponte enseguida a buenas con tu adversario mientras vas con él por el camino; no sea que tu adversario te entregue al juez y el juez al guardia, y te metan en la cárcel.
    26 Yo te aseguro: no saldrás de allí hasta que no hayas pagado el último céntimo.

Evangelio meditado

Primero reconciliate con tu hermano
Tiempo Ordinario


Tiempo Ordinario. Pedir a Dios la gracia de saber perdonar y no juzgar.


Por: Buenaventura Acero | Fuente: Catholic.net 




Del santo Evangelio según san Mateo 5, 20-26 
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: Les aseguro que si su justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, ciertamente no entrarán ustedes en el Reino de los cielos. Han oído ustedes que se dijo a los antiguos: "No matarás y el que mate será llevado ante el tribunal." Pero yo les digo: Todo el que se enoje con su hermano, será llevado también ante el tribunal; el que insulte a su hermano, será llevado ante el tribunal supremo, y el que lo desprecie, será llevado al fuego del lugar de castigo. Por lo tanto, si cuando vas a poner tu ofrenda sobre el altar, te acuerdas allí mismo de que tu hermano tiene alguna queja contra ti, deja tu ofrenda junto al altar y ve primero a reconciliarte con tu hermano, y vuelve luego a presentar tu ofrenda. Arréglate pronto con tu adversario, mientras vas con él por el camino; no sea que te entregue al juez, el juez al policía y te metan a la cárcel. Te aseguro que no saldrás de allí hasta que hayas pagado el último centavo. 

Oración introductoria
Señor, gracias por recordarme que no quieres ofrecimientos ni una oración alejada de la realidad mi vida. Limpia mi corazón de todo resentimiento y amargura, de todo rencor o envidia, con tu gracia podré ser un instrumento de tu paz.

Petición
Señor, concédeme disculpar de inmediato, con un gesto bondadoso, todas las ofensas y pequeñas molestias del día.

Meditación del Papa Francisco
En las tablas de la ley está la ley hacia Dios y la ley hacia el prójimo y las dos van juntas. Yo no puedo decir: ‘Pero, no, yo cumplo los tres primeros mandamientos… y los otros más o menos’. No, si tú no haces estos, esos no puedes hacerlos y si tú haces eso, debes hacer esto. Están unidos: el amor a Dios y el amor al prójimo son una unidad y si tú quieres hacer penitencia, real no formal, debes hacerla delante de Dios y también con tu hermano, con el prójimo.
Y como dice el apóstol Santiago, puedes tener mucha fe pero si no haces obras, no sirve de nada. Uno puede ir a misa todos los domingos y comulgar, y se puede preguntar: ¿cómo es tu relación con tus trabajadores? ¿Les pagas en negro? ¿Les pagas el salario justo? ¿También pagas la contribución para la pensión? ¿Para asegurar la salud?
Esos hombres y mujeres de fe que dividen las tablas de la ley: ‘sí, sí, yo hago esto’ - ‘¿pero tú das limosna?’ - ‘sí, sí, siempre envío el cheque a la Iglesia’ - ‘Ah, muy bien. Pero a tu Iglesia, en tu casa, con los que dependen de ti -ya sean hijos, abuelos, trabajadores- ¿eres generoso, eres justo?’ Tú no puedes hacer ofrendas a la Iglesia sobre los hombros de la injusticia que haces con tus trabajadores. Esto es un pecado gravísimo: es usar a Dios para cubrir la injusticia. (Cf Homilía de S.S. Francisco, 20 de febrero de 2015, en Santa Marta).

Reflexión
Jesús habla de la realidad dándole un nuevo sentido, iluminándola con el espíritu de la Ley. Para ejemplificar el amor al prójimo, habla de la historia del buen samaritano y concluye, ahora "ve y haz tú lo mismo". Y cuando baja a los detalles de la vida cotidiana sabe que la mayoría de sus oyentes podrían ser protagonistas en sus ejemplos...

Si es verdad que el amor es el primer mandamiento ¿cómo se pone en práctica? Jesús nos ilustra con tres casos.

Constituyen el primer grado, lo que hay que evitar. El insulto, la enemistad y la querella contra el prójimo no serán propias de un cristiano. Pero más allá del precepto negativo "no matarás"... se nos abre el horizonte ilimitado del amor al prójimo.

El primer paso es evitar esas tres actitudes, pero Jesús no se detendrá en ellas mas que como un mero paso intermedio, él va más allá. Por tanto es un buen momento para hacer nosotros también nuestro propio examen de conciencia. Para preguntarnos, a la luz de la fe, ¿qué hay de todo esto en mi corazón? Saber perdonar, no guardar rencores e imitar con ello a Jesucristo es exigente, pero al mismo tiempo liberador.

La gracia de Dios nos impulsa a ello, es una obra propia del Espíritu Santo, si le dejamos actuar en nuestra alma.

Propósito
Si estoy distanciado de alguna persona, dar el primer paso para la reconciliación.

Diálogo con Cristo
Lo que cultivo en mi corazón, bueno o malo, va floreciendo y eventualmente se manifiesta en mis acciones. Gracias, Jesucristo, Tú me has enseñado a amar y a buscar la santidad. Me has dado la fe, la esperanza y la caridad para sostenerme y orientarme hacia la fuente de tu gracia, para poder vivir el amor diariamente. María, madre de la misericordia, ayúdame a cultivar un corazón semejante al tuyo

miércoles, 8 de junio de 2016

Evangelio 8 de Junio de 2016

Color: Verde

Santos:

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    I Reyes 18:20-39
    20 Ajab envió a todos los israelitas y reunió a los profetas en el monte Carmelo.
    21 Elías se acercó a todo el pueblo y dijo: «¿Hasta cuándo vais a estar cojeando con los dos pies? Si Yahveh es Dios, seguidle; si Baal, seguid a éste.» Pero el pueblo no le respondió nada.
    22 Dijo Elías al pueblo: «He quedado yo solo como profeta de Yahveh, mientras que los profetas de Baal son 450.
    23 Que se nos den dos novillos; que elijan un novillo para ellos, que los despedacen y lo pongan sobre la leña, pero que no pongan fuego. Yo prepararé el otro novillo y lo pondré sobre la leña, pero no pondré fuego.
    24 Invocaréis el nombre de vuestro dios; yo invocaré el nombre de Yahveh. Y el dios que responda por el fuego, ése es Dios.» Todo el pueblo respondió: «¡Está bien!»
    25 Elías dijo a los profetas de Baal: «Elegíos un novillo y comenzad vosotros primero, pues sois más numerosos. Invocad el nombre de vuestro dios, pero no pongáis fuego.»
    26 Tomaron el novillo que les dieron, lo prepararon e invocaron el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía, diciendo: «¡Baal, respóndenos!» Pero no hubo voz ni respuesta. Danzaban cojeando junto al altar que habían hecho.
    27 Llegado el mediodía, Elías se burlaba de ellos y decía: «¡Gritad más alto, porque es un dios; tendrá algún negocio, le habrá ocurrido algo, estará en camino; tal vez esté dormido y se despertará!»
    28 Gritaron más alto, sajándose, según su costumbre, con cuchillos y lancetas hasta chorrear la sangre sobre ellos.
    29 Cuando pasó el mediodía, se pusieron en trance hasta la hora de hacer la ofrenda, pero no hubo voz, ni quien escuchara ni quien respondiera.
    30 Entonces Elías dijo a todo el pueblo: «Acercaos a mí.» Todo el pueblo se acercó a él. Reparó el altar de Yahveh que había sido demolido.
    31 Tomó Elías doce piedras según el número de las tribus de los hijos de Jacob, al que fue dirigida la palabra de Yahveh diciendo: «Israel será tu nombre.»
    32 Erigió con las piedras un altar al nombre de Yahveh, e hizo alrededor del altar una zanja que contenía como unas dos arrobas de sembrado.
    33 Dispuso leña, despedazó el novillo y lo puso sobre la leña.
    34 Después dijo: «Llenad de agua cuatro tinajas y derramadla sobre el holocausto y sobre la leña.» Lo hicieron así. Dijo: «Repetid» y repitieron. Dijo: «Hacedlo por tercera vez.» Y por tercera vez lo hicieron.
    35 El agua corrió alrededor del altar, y hasta la zanja se llenó de agua.
    36 A la hora en que se presenta la ofrenda, se acercó el profeta Elías y dijo: «Yahveh, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, que se sepa hoy que tú eres Dios en Israel y que yo soy tu servidor y que por orden tuya he ejecutado toda estas cosas.
    37 Respóndeme, Yahveh, respóndeme, y que todo este pueblo sepa que tú, Yahveh, eres Dios que conviertes sus corazones.»
    38 Cayó el fuego de Yahveh que devoró el holocausto y la leña, y lamió el agua de las zanjas.
    39 Todo el pueblo lo vió y cayeron sobre su rostro y dijeron: «¡Yahveh es Dios, Yahveh es Dios!»
  • Salmo responsorial

    Salmo 16:1-2, 4-5, 8, 11
    1 media voz. De David. Guárdame, oh Dios, en ti está mi refugio.
    2 Yo digo a Yahveh: «Tú eres mi Señor. mi bien, nada hay fuera de ti»;
    4 Sus ídolos abundan, tras ellos van corriendo. Mas yo jamás derramaré sus libámenes de sangre, jamás tomaré sus nombres en mis labios.
    5 Yahveh, la parte de mi herencia y de mi copa, tú mi suerte aseguras;
    8 pongo a Yahveh ante mí sin cesar; porque él está a mi diestra, no vacilo.
    11 Me enseñarás el caminó de la vida, hartura de goces, delante de tu rostro, a tu derecha, delicias para siempre.
  • Evangelio

    Mateo 5:17-19
    17 «No penséis que he venido a abolir la Ley y los Profetas. No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento.
    18 Sí, os lo aseguro: el cielo y la tierra pasarán antes que pase una i o una tilde de la Ley sin que todo suceda.
    19 Por tanto, el que traspase uno de estos mandamientos más pequeños y así lo enseñe a los hombres, será el más pequeño en el Reino de los Cielos; en cambio, el que los observe y los enseñe, ése será grande en el Reino de los Cielos.

Las Cruzadas fueron legítimas y la Inquisición no fue sangrienta

Rodney Stark: no defiendo a la Iglesia, sino la Historia


La verdad histórica es la que es, se tenga o no se tenga fe: Rodney Stark la defiende.


Por: Carl E. Olson | Fuente: Catholic World Report / ReL 



Rodney Stark ha escrito unos cuarenta libros sobre una amplia variedad de temas, incluyendo un cierto número sobre la historia del cristianismo, el monoteismo, el cristianismo en China y las raíces de la modernidad. Tras empezar como reportero en un periódico y pasar un cierto tiempo en el ejército, Stark obtuvo el doctorado por la Universidad de Berkeley (California), en la que trabajó como investigador en el Survey Research Center y en el Center for the Study of Law and Society. Más tarde fue profesor de Sociología y Religión Comparada en la Universidad de Washington. Desde 2004 trabaja en la Baylor University. Stark ha sido presidente de la Society for the Scientific Study of Religion y de la Association for the Sociology of Religion, y ha recibido numerosos premios nacionales e internacionales por su eminente trabajo. Educado como luterano, se ha identificado como agnóstico pero recientemente se autodenomina "cristiano independiente". 

Su obra más reciente es "Bearing False Witness: Debunking Centuries of Anti-Catholic History[Levantando falso testimonio. Desmontando siglos de Historia anticatólica](Templeton Press, 2016), en la que aborda diez mitos predominantes en la historia de la Iglesia. Stark ha respondido a algunas preguntas planteadas por Carl E. Olson, editor de Catholic World Report.
 
-Usted empieza su libro informando sobre su educación como protestante americano y analizando a las "eminencias intolerantes". ¿Qué es una "eminencia intolerante"? ¿Y cómo han influido en el modo como es actualmente considerada y percibida la Iglesia católica por muchos estadounidenses?
-Con eminencias intolerantes me refiero a esos estudiosos e intelectuales ilustres, claramente antagonistas de la Iglesia católica, que han difundido falsas afirmaciones históricas.

-¿Cómo ha identificado y seleccionado los diez mitos anticatólicos que usted ridiculiza en el libro? ¿Hasta qué punto estos mitos forman parte de la cultura general (aunque a veces vaga) protestante? ¿Y hasta qué punto son difundidos por una élite cultural más secular?
-La mayor parte de estos mitos anticatólicos los he encontrado cuando escribía sobre distintos periodos y acontecimientos históricos; descubrí que estos "hechos" tan conocidos eran falsos, por lo que me sentí obligado a profundizarlos. Estos mitos no están limitados a la generalidad de la cultura protestante; de hecho, muchos católicos, incluso algunos muy conocidos, los han apoyado. Demasiado a menudo, y durante mucho tiempo, los historiadores en general han concedido título de verdad a estos mitos. Desde luego, los "secularistas", sobre todo ex-católicos como Karen Armstrong, adoran estos mitos.

-El primer capítulo trata de los "pecados del anti-semitismo" y es tal vez el tema más divisorio y controvertido de todos los que usted afronta. ¿Cómo ha cambiado su propia opinión sobre este tema y por qué? ¿Por qué cree que sigue habiendo la amplia creencia o impresión de que la Iglesia católica es inherentemente antisemita?
-Cuando empecé mis investigaciones "todos", incluidos católicos de primera línea, creían que la Iglesia era una de las fuentes principales del antisemitismo. Fue más tarde, cuando trabajaba con material sobre las persecuciones medievales a los judíos, cuando descubrí el papel eficaz que tuvo la Iglesia para oponerse y suprimir dichas persecuciones. Esta verdad es narrada por cronistas judíos medievales y, por lo tanto, sin duda alguna es cierta. ¿Por qué tantos "intelectuales", muchos de los cuales son ex-católicos, siguen aceptando la idea de que el Papa Pío XII fue "el Papa de Hitler" cuando claramente es una mentira despiadada? Sólo puede ser por odio a la Iglesia. Recuerde que son judíos famosos los que defienden al Papa.
 
-¿Por qué varios historiadores, como Gibbon, han presentado a los antiguos paganos como benévolos o tolerantes hacia el cristianismo? ¿Cuál era la verdadera relación entre el cristianismo y el paganismo en los primeros siglos de la historia de la Iglesia?
-En esos días, el modo seguro para atacar la religión era dejar que los lectores asumieran que era sólo un ataque al catolicismo, por lo que eso fue lo que hicieron Edward Gibbon y sus contemporáneos. Sorprende que cuando los paganos ya no fueron capaces de perseguir a los cristianos, fueron ignorados por la Iglesia y los emperadores y desaparecieron lentamente.

-¿Cómo se desarrolló el mito de los "Años Oscuros"? ¿Cuáles son los principales problemas con este mito?
-Voltaire y sus compañeros crearon la ficción de los Años Oscuros para poder reivindicar que fueron ellos los que hicieron emerger la Ilustración. Como cualquier historiador competente (e incluso ahora las enciclopedias) defiende, no hubo tales Años Oscuros. Al contrario, fue durante esos siglos cuando Europa hizo el gran salto cultural y tecnológico que la situó a la cabeza del resto del mundo.

-¿Qué relación hay entre el mito de los Años Oscuros y el mito de la Ilustración? ¿Cuán racional y científica era, efectivamente, la Ilustración?
-Los "filósofos" de la denominada "Ilustración" no tuvieron ningún papel en el desarrollo de la ciencia, pues los grandes progresos científicos de la época se deben en su mayoría a hombre muy religiosos, muchos de ellos pertenecientes al clero católico.

-Las Cruzadas y la Inquisición siguen siendo presentadas como una época y unos acontecimientos que son el resultado de la barbarie cristiana y que supusieron el asesinato de millones de personas. ¿Por qué estos mitos son tan populares y están tan extendidos, incluso después de que estudiosos se hayan dedicado durante décadas a corregir y aclarar lo que realmente sucedió (o no sucedió)? 
-Puedo asegurar que las Cruzadas fueron guerras legítimas de defensa y que la Inquisición no fue sangrienta. Pero no puedo explicar por qué la gran cantidad de investigaciones llevadas a cabo para apoyar estas correcciones no han tenido impacto entre los intelectualoides.
 
-Al tratar el tema de la "Modernidad Protestante", usted declara rotundamente que la tesis de Max Weber según la cual fue el protestantismo lo que dio lugar al nacimiento del capitalismo y la modernidad es "una sandez". ¿Cuál es el principal problema con la tesis de Weber?
-El problema es sencillamente que el capitalismo se desarrolló y prosperó en Europa muchos siglos antes de la llegada de la Reforma.  

-Usted afirma categóricamente que como estudioso con un pasado protestante y que trabaja en una universidad baptista no escribe su libro "en defensa de la Iglesia", sino "en defensa de la historia". ¿Por qué es importante esto? Y, por último, ¿piensa usted que actualmente la mayoría de los norteamericanos dan más credibilidad a la historia que a la Iglesia? 
-Pienso que será difícil para las eminencias intolerantes acusarme de querer hacerle la pelota al catolicismo intentando tapar los pecados de la Iglesia. El único interés personal que tengo es que la historia debe ser relatada con honestidad. Respecto a su última pregunta: no creo que la "mayoría de los americanos" llegue a saber que este libro se ha escrito. Lo único que puedo esperar, tal vez, es que influya sobre los intelectuales y los escritores de libros de texto.
Artículo originalmente publicado en Catholic World Report
Traducido por Helena Faccia Serrano (diócesis de Alcalá de Henares)

martes, 7 de junio de 2016

Evangelio 7 de Junio de 2016

Color: Verde

Santos:

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    I Reyes 17:7-16
    7 Al cabo de los días se secó el torrente, porque no había lluvia en el país.
    8 Le fue dirigida la palabra de Yahveh a Elías diciendo:
    9 «Levántate y vete a Sarepta de Sidón y quédate allí, pues he ordenado a una mujer viuda de allí que te dé de comer.»
    10 Se levantó y se fue a Sarepta. Cuando entraba por la puerta de la ciudad había allí una mujer viuda que recogía leña. La llamó Elías y dijo: «Tráeme, por favor, un poco de agua para mí en tu jarro para que pueda beber.»
    11 Cuando ella iba a traérsela, le gritó: «Tráeme, por favor, un bocado de pan en tu mano.»
    12 Ella dijo: «Vive Yahveh tu Dios, no tengo nada de pan cocido: sólo tengo un puñado de harina en la tinaja y un poco de aceite en la orza. Estoy recogiendo dos palos, entraré y lo prepararé para mí y para mi hijo, lo comeremos y moriremos.»
    13 Pero Elías le dijo: «No temas. Entra y haz como has dicho, pero primero haz una torta pequeña para mí y tráemela, y luego la harás para ti y para tu hijo.
    14 Porque así habla Yahveh, Dios de Israel: No se acabará la harina en la tinaja, no se agotará el aceite en la orza hasta el día en que Yahveh conceda la lluvia sobre la haz de la tierra.
    15 Ella se fue e hizo según la palabra de Elías, y comieron ella, él y su hijo.
    16 No se acabó la harina en la tinaja ni se agotó el aceite en la orza, según la palabra que Yahveh había dicho por boca de Elías.
  • Salmo responsorial

    Salmo 4:2-5, 7-8
    2 Cuando clamo, respóndeme, oh Dios mi justiciero, en la angustia tú me abres salida; tenme piedad, escucha mi oración.
    3 Vosotros, hombres, ¿hasta cuándo seréis torpes de corazón, amando vanidad, rebuscando mentira?
    4 ¡Sabed que Yahveh mima a su amigo, Yahveh escucha cuando yo le invoco.
    5 Temblad, y no pequéis; hablad con vuestro corazón en el lecho ¡y silencio!
    7 Muchos dicen: «¿Quién nos hará ver la dicha?» ¡Alza sobre nosotros la luz de tu rostro! Yahveh,
    8 tú has dado a mi corazón más alegría que cuando abundan ellos de trigo y vino nuevo.
  • Evangelio

    Mateo 5:13-16
    13 «Vosotros sois la sal de la tierra. Mas si la sal se desvirtúa, ¿con qué se la salará? Ya no sirve para nada más que para ser tirada afuera y pisoteada por los hombres.
    14 «Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad situada en la cima de un monte.
    15 Ni tampoco se enciende una lámpara y la ponen debajo del celemín, sino sobre el candelero, para que alumbre a todos los que están en la casa.
    16 Brille así vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.