sábado, 5 de noviembre de 2022

Lecturas 6 de Octubre de 2022

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    II Macabeos 7:1-2, 9-14

    1Sucedió también que siete hermanos apresados junto con su madre, eran forzados por el rey, flagelados con azotes y nervios de buey, a probar carne de puerco (prohibida por la Ley).2Uno de ellos, hablando en nombre de los demás, decía así: «¿Qué quieres preguntar y saber de nosotros? Estamos dispuestos a morir antes que violar las leyes de nuestros padres.»9Al llegar a su último suspiro dijo: «Tú, criminal, nos privas de la vida presente, pero el Rey del mundo a nosotros que morimos por sus leyes, nos resucitará a una vida eterna.»10Después de éste, fue castigado el tercero; en cuanto se lo pidieron, presentó la lengua, tendió decidido las manos11(y dijo con valentía: «Por don del Cielo poseo estos miembros, por sus leyes los desdeño y de El espero recibirlos de nuevo).»12Hasta el punto de que el rey y sus acompañantes estaban sorprendidos del ánimo de aquel muchacho que en nada tenía los dolores.13Llegado éste a su tránsito, maltrataron de igual modo con suplicios al cuarto.14Cerca ya del fin decía así: «Es preferible morir a manos de hombres con la esperanza que Dios otorga de ser resucitados de nuevo por él; para ti, en cambio, no habrá resurrección a la vida.»

  • Salmo Responsorial

    Salmo 17:1, 5-6, 8, 15

    1Oración. De David. Escucha, Yahveh, la justicia, atiende a mi clamor, presta oído a mi plegaria, que no es de labios engañosos.5ajustando mis pasos; por tus veredas no vacilan mis pies.6Yo te llamo, que tú, oh Dios, me respondes, tiende hacia mí tu oído, escucha mis palabras,8Guárdame como la pupila de los ojos, escóndeme a la sombra de tus alas15Mas yo, en la justicia, contemplaré tu rostro, al despertar me hartaré de tu imagen.

  • Segunda Lectura

    II Tesalonicenses 2:16--3:5

    216Que el mismo Señor nuestro Jesucristo y Dios, nuestro Padre, que nos ha amado y que nos ha dado gratuitamente una consolación eterna y una esperanza dichosa,17consuele vuestros corazones y los afiance en toda obra y palabra buena.31Finalmente, hermanos, orad por nosotros para que la Palabra del Señor siga propagándose y adquiriendo gloria, como entre vosotros,2y para que nos veamos libres de los hombres perversos y malignos; porque la fe no es de todos.3Fiel es el Señor; él os afianzará y os guardará del Maligno.4En cuanto a vosotros tenemos plena confianza en el Señor de que cumplís y cumpliréis cuanto os mandamos.5Que el Señor guíe vuestros corazones hacia el amor de Dios y la tenacidad de Cristo.

  • Evangelio

    Lucas 20:27-38

    27Acercándose algunos de los saduceos, esos que sostienen que no hay resurrección, le preguntaron:28«Maestro, Moisés nos dejó escrito que si muere el hermano de alguno, que estaba casado y no tenía hijos, que su hermano tome a la mujer para dar descendencia a su hermano.29Eran siete hermanos; habiendo tomado mujer el primero, murió sin hijos;30y la tomó el segundo,31luego el tercero; del mismo modo los siete murieron también sin dejar hijos.32Finalmente, también murió la mujer.33Esta, pues, ¿de cuál de ellos será mujer en la resurrección? Porque los siete la tuvieron por mujer.»34Jesús les dijo: «Los hijos de este mundo toman mujer o marido;35pero los que alcancen a ser dignos de tener parte en aquel mundo y en la resurrección de entre los muertos, ni ellos tomarán mujer ni ellas marido,36ni pueden ya morir, porque son como ángeles, y son hijos de Dios, siendo hijos de la resurrección.37Y que los muertos resucitan lo ha indicado también Moisés en lo de la zarza, cuando llama al Señor el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob.38No es un Dios de muertos, sino de vivos, porque para él todos viven.»

Lecturas 5 de Octubre de 2022

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Sabiduría 3:1-9

    1En cambio, las almas de los justos están en las manos de Dios y no les alcanzará tormento alguno.2A los ojos de los insensatos pareció que habían muerto; se tuvo por quebranto su salida,3y su partida de entre nosotros por completa destrucción; pero ellos están en la paz.4Aunque, a juicio de los hombres, hayan sufrido castigos, su esperanza estaba llena de inmortalidad;5por una corta corrección recibirán largos beneficios. pues Dios los sometió a prueba y los halló dignos de sí;6como oro en el crisol los probó y como holocausto los aceptó.7El día de su visita resplandecerán, y como chispas en rastrojo correrán.8Juzgarán a las naciones y dominarán a los pueblos y sobre ellos el Señor reinará eternamente.9Los que en él confían entenderán la verdad y los que son fieles permanecerán junto a él en el amor, porque la gracia y la misericordia son para sus santos y su visita para sus elegidos.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 23:1-6

    1Salmo. De David. Yahveh es mi pastor, nada me falta.2Por prados de fresca hierba me apacienta. Hacia las aguas de reposo me conduce,3y conforta mi alma; me guía por senderos de justicia, en gracia de su nombre.4Aunque pase por valle tenebroso, ningún mal temeré, porque tú vas conmigo; tu vara y tu cayado, ellos me sosiegan.5Tú preparas ante mí una mesa frente a mis adversarios; unges con óleo mi cabeza, rebosante está mi copa.6Sí, dicha y gracia me acompañarán todos los días de mi vida; mi morada será la casa de Yahveh a lo largo de los días.

  • Evangelio

    Juan 6:37-40

    37Todo lo que me dé el Padre vendrá a mí, y al que venga a mí no lo echaré fuera;38porque he bajado del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me ha enviado.39Y esta es la voluntad del que me ha enviado; que no pierda nada de lo que él me ha dado, sino que lo resucite el último día.40Porque esta es la voluntad de mi Padre: que todo el que vea al Hijo y crea en él, tenga vida eterna y que yo le resucite el último día.»

jueves, 3 de noviembre de 2022

Lecturas 3 de Octubre de 2022

 

Lecturas del día:

Primera Opción

  • Primera Lectura

    Filipenses 3:3-8

    3Pues los verdaderos circuncisos somos nosotros, los que damos culto según el Espíritu de Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús sin poner nuestra confianza en la carne,4aunque yo tengo motivos para confiar también en la carne. Si algún otro cree poder confiar en la carne, más yo.5Circuncidado el octavo día; del linaje de Israel; de la tribu de Benjamín; hebreo e hijo de hebreos; en cuanto a la Ley, fariseo;6en cuanto al celo, perseguidor de la Iglesia; en cuanto a la justicia de la Ley, intachable.7Pero lo que era para mí ganancia, lo he juzgado una pérdida a causa de Cristo.8Y más aún: juzgo que todo es pérdida ante la sublimidad del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por quien perdí todas las cosas, y las tengo por basura para ganar a Cristo,

  • Salmo Responsorial

    Salmo 105:2-7

    2¡Cantadle, salmodiad para él, sus maravillas todas recitad;3gloriaos en su santo nombre, se alegre el corazón de los que buscan a Yahveh!4¡Buscad a Yahveh y su fuerza, id tras su rostro sin descanso,5recordad las maravillas que él ha hecho, sus prodigios y los juicios de su boca!6Raza de Abraham, su servidor, hijos de Jacob, su elegido:7él, Yahveh, es nuestro Dios, por toda la tierra sus juicios.

  • Evangelio

    Lucas 15:1-10

    1Todos los publicanos y los pecadores se acercaban a él para oírle,2y los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: «Este acoge a los pecadores y come con ellos.»3Entonces les dijo esta parábola.4«¿Quién de vosotros que tiene cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las 99 en el desierto, y va a buscar la que se perdió hasta que la encuentra?5Y cuando la encuentra, la pone contento sobre sus hombros;6y llegando a casa, convoca a los amigos y vecinos, y les dice: "Alegraos conmigo, porque he hallado la oveja que se me había perdido."7Os digo que, de igual modo, habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta que por 99 justos que no tengan necesidad de conversión.8«O, ¿qué mujer que tiene diez dracmas, si pierde una, no enciende una lámpara y barre la casa y busca cuidadosamente hasta que la encuentra?9Y cuando la encuentra, convoca a las amigas y vecinas, y dice: "Alegraos conmigo, porque he hallado la dracma que había perdido."10Del mismo modo, os digo, se produce alegría ante los ángeles de Dios por un solo pecador que se convierta.»

Segunda Opción

  • Primera Lectura

    Filipenses 4:4-9

    4Estad siempre alegres en el Señor; os lo repito, estad alegres.5Que vuestra mesura sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca.6No os inquietéis por cosa alguna; antes bien, en toda ocasión, presentad a Dios vuestras peticiones, mediante la oración y la súplica, acompañadas de la acción de gracias.7Y la paz de Dios, que supera todo conocimiento, custodiará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.8Por lo demás, hermanos, todo cuanto hay de verdadero, de noble, de justo, de puro, de amable, de honorable, todo cuanto sea virtud y cosa digna de elogio, todo eso tenedlo en cuenta.9Todo cuanto habéis aprendido y recibido y oído y visto en mí, ponedlo por obra y el Dios de la paz estará con vosotros.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 131:1-3

    1Canción de las subidas. De David. No está inflado, Yahveh, mi corazón, ni mis ojos subidos. No he tomado un camino de grandezas ni de prodigios que me vienen anchos.2No, mantengo mi alma en paz y silencio como niño destetado en el regazo de su madre. ¡Como niño destetado está mi alma en mí!3¡Espera, Israel, en Yahveh desde ahora y por siempre!

  • Evangelio

    Mateo 22:34-40

    34Mas los fariseos, al enterarse de que había tapado la boca a los saduceos, se reunieron en grupo,35y uno de ellos le preguntó con ánimo de ponerle a prueba:36«Maestro, ¿cuál es el mandamiento mayor de la Ley?»37El le dijo: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente.38Este es el mayor y el primer mandamiento.39El segundo es semejante a éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.40De estos dos mandamientos penden toda la Ley y los Profetas.»

miércoles, 2 de noviembre de 2022

Lecturas 2 de Noviembre de 2022

 

Lecturas del día:

Primera Opción

  • Primera Lectura

    Sabiduría 3:1-9

    1En cambio, las almas de los justos están en las manos de Dios y no les alcanzará tormento alguno.2A los ojos de los insensatos pareció que habían muerto; se tuvo por quebranto su salida,3y su partida de entre nosotros por completa destrucción; pero ellos están en la paz.4Aunque, a juicio de los hombres, hayan sufrido castigos, su esperanza estaba llena de inmortalidad;5por una corta corrección recibirán largos beneficios. pues Dios los sometió a prueba y los halló dignos de sí;6como oro en el crisol los probó y como holocausto los aceptó.7El día de su visita resplandecerán, y como chispas en rastrojo correrán.8Juzgarán a las naciones y dominarán a los pueblos y sobre ellos el Señor reinará eternamente.9Los que en él confían entenderán la verdad y los que son fieles permanecerán junto a él en el amor, porque la gracia y la misericordia son para sus santos y su visita para sus elegidos.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 27:1, 4, 7-9, 13-14

    1Yahveh es mi luz y mi salvación, ¿a quién he de temer? Yahveh, el refugio de mi vida, ¿por quién he de temblar?4Una cosa he pedido a Yahveh, una cosa estoy buscando: morar en la Casa de Yahveh, todos los días de mi vida, para gustar la dulzura de Yahveh y cuidar de su Templo.7Escucha, Yahveh, mi voz que clama, ¡tenme piedad, respóndeme!8Dice de ti mi corazón: «Busca su rostro.» Sí, Yahveh, tu rostro busco:9No me ocultes tu rostro. No rechaces con cólera a tu siervo; tú eres mi auxilio. No me abandones, no me dejes, Dios de mi salvación.13¡Ay, si estuviera seguro de ver la bondad de Yahveh en la tierra de los vivos!14Espera en Yahveh, ten valor y firme corazón, espera en Yahveh.

  • Segunda Lectura

    Romanos 5:5-11

    5y la esperanza no falla, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos ha sido dado.6En efecto, cuando todavía estábamos sin fuerzas, en el tiempo señalado, Cristo murió por los impíos; -7en verdad, apenas habrá quien muera por un justo; por un hombre de bien tal vez se atrevería uno a morir -;8mas la prueba de que Dios nos ama es que Cristo, siendo nosotros todavía pecadores, murió por nosotros.9¡Con cuánta más razón, pues, justificados ahora por su sangre, seremos por él salvos de la cólera!10Si cuando éramos enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, ¡con cuánta más razón, estando ya reconciliados, seremos salvos por su vida!11Y no solamente eso, sino que también nos gloriamos en Dios, por nuestro Señor Jesucristo, por quien hemos obtenido ahora la reconciliación.

  • Evangelio

    Juan 11:17-27

    17Cuando llegó Jesús, se encontró con que Lázaro llevaba ya cuatro días en el sepulcro.18Betania estaba cerca de Jerusalén como a unos quince estadios,19y muchos judíos habían venido a casa de Marta y María para consolarlas por su hermano.20Cuando Marta supo que había venido Jesús, le salió al encuentro, mientras María permanecía en casa.21Dijo Marta a Jesús: «Señor, si hubieras estado aquí, no habría muerto mi hermano.22Pero aun ahora yo sé que cuanto pidas a Dios, Dios te lo concederá.»23Le dice Jesús: «Tu hermano resucitará.»24Le respondió Marta: «Ya sé que resucitará en la resurrección, el último día.»25Jesús le respondió: «Yo soy la resurrección El que cree en mí, aunque muera, vivirá;26y todo el que vive y cree en mí, no morirá jamás. ¿Crees esto?»27Le dice ella: «Sí, Señor, yo creo que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, el que iba a venir al mundo.»

Segunda Opción

  • Primera Lectura

    Sabiduría 3:1-9

    1En cambio, las almas de los justos están en las manos de Dios y no les alcanzará tormento alguno.2A los ojos de los insensatos pareció que habían muerto; se tuvo por quebranto su salida,3y su partida de entre nosotros por completa destrucción; pero ellos están en la paz.4Aunque, a juicio de los hombres, hayan sufrido castigos, su esperanza estaba llena de inmortalidad;5por una corta corrección recibirán largos beneficios. pues Dios los sometió a prueba y los halló dignos de sí;6como oro en el crisol los probó y como holocausto los aceptó.7El día de su visita resplandecerán, y como chispas en rastrojo correrán.8Juzgarán a las naciones y dominarán a los pueblos y sobre ellos el Señor reinará eternamente.9Los que en él confían entenderán la verdad y los que son fieles permanecerán junto a él en el amor, porque la gracia y la misericordia son para sus santos y su visita para sus elegidos.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 23:1-6

    1Salmo. De David. Yahveh es mi pastor, nada me falta.2Por prados de fresca hierba me apacienta. Hacia las aguas de reposo me conduce,3y conforta mi alma; me guía por senderos de justicia, en gracia de su nombre.4Aunque pase por valle tenebroso, ningún mal temeré, porque tú vas conmigo; tu vara y tu cayado, ellos me sosiegan.5Tú preparas ante mí una mesa frente a mis adversarios; unges con óleo mi cabeza, rebosante está mi copa.6Sí, dicha y gracia me acompañarán todos los días de mi vida; mi morada será la casa de Yahveh a lo largo de los días.

  • Segunda Lectura

    Romanos 5:5-11

    5y la esperanza no falla, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos ha sido dado.6En efecto, cuando todavía estábamos sin fuerzas, en el tiempo señalado, Cristo murió por los impíos; -7en verdad, apenas habrá quien muera por un justo; por un hombre de bien tal vez se atrevería uno a morir -;8mas la prueba de que Dios nos ama es que Cristo, siendo nosotros todavía pecadores, murió por nosotros.9¡Con cuánta más razón, pues, justificados ahora por su sangre, seremos por él salvos de la cólera!10Si cuando éramos enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, ¡con cuánta más razón, estando ya reconciliados, seremos salvos por su vida!11Y no solamente eso, sino que también nos gloriamos en Dios, por nuestro Señor Jesucristo, por quien hemos obtenido ahora la reconciliación.

  • Evangelio

    Juan 11:17-27

    17Cuando llegó Jesús, se encontró con que Lázaro llevaba ya cuatro días en el sepulcro.18Betania estaba cerca de Jerusalén como a unos quince estadios,19y muchos judíos habían venido a casa de Marta y María para consolarlas por su hermano.20Cuando Marta supo que había venido Jesús, le salió al encuentro, mientras María permanecía en casa.21Dijo Marta a Jesús: «Señor, si hubieras estado aquí, no habría muerto mi hermano.22Pero aun ahora yo sé que cuanto pidas a Dios, Dios te lo concederá.»23Le dice Jesús: «Tu hermano resucitará.»24Le respondió Marta: «Ya sé que resucitará en la resurrección, el último día.»25Jesús le respondió: «Yo soy la resurrección El que cree en mí, aunque muera, vivirá;26y todo el que vive y cree en mí, no morirá jamás. ¿Crees esto?»27Le dice ella: «Sí, Señor, yo creo que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, el que iba a venir al mundo.»

martes, 1 de noviembre de 2022

Lecturas 2 de Octubre de 2022

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Apocalipsis 7:2-4, 9-14

    2Luego vi a otro Angel que subía del Oriente y tenía el sello de Dios vivo; y gritó con fuerte voz a los cuatro Angeles a quienes se había encomendado causar daño a la tierra y al mar:3«No causéis daño ni a la tierra ni al mar ni a los árboles, hasta que marquemos con el sello la frente de los siervos de nuestro Dios.»4Y oí el número de los marcados con el sello: 144.000 sellados, de todas las tribus de los hijos de Israel.9Después miré y había una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de toda nación, razas, pueblos y lenguas, de pie delante del trono y el Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos.10Y gritan con fuerte voz: «La salvación es de nuestro Dios, que está sentado en el trono, y del Cordero.»11Y todos los Angeles que estaban en pie alrededor del trono de los Ancianos y de los cuatro Vivientes, se postraron delante del trono, rostro en tierra, y adoraron a Dios12diciendo: «Amén. Alabanza, gloria, sabiduría, acción de gracias, honor, poder y fuerza, a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén.»13Uno de los Ancianos tomó la palabra y me dijo: «Esos que están vestidos con vestiduras blancas ¿quiénes son y de dónde han venido?»14Yo le respondí: «Señor mío, tú lo sabrás.» Me respondió: «Esos son los que vienen de la gran tribulación; han lavado sus vestiduras y las han blanqueado con la sangre del Cordero.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 24:1-6

    1Salmo. De David. De Yahveh es la tierra y cuanto hay en ella, el orbe y los que en él habitan;2que él lo fundó sobre los mares, él lo asentó sobre los ríos.3¿Quién subirá al monte de Yahveh?, ¿quién podrá estar en su recinto santo?4El de manos limpias y puro corazón, el que a la vanidad no lleva su alma, ni con engaño jura.5El logrará la bendición de Yahveh, la justicia del Dios de su salvación.6Tal es la raza de los que le buscan, los que van tras tu rostro, oh Dios de Jacob.

  • Segunda Lectura

    I Juan 3:1-3

    1Mirad qué amor nos ha tenido el Padre para llamarnos hijos de Dios, pues ¡lo somos!. El mundo no nos conoce porque no le conoció a él.2Queridos, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que seremos. Sabemos que, cuando se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal cual es.3Todo el que tiene esta esperanza en él se purifica a sí mismo, como él es puro.

  • Evangelio

    Mateo 5:1-12

    1Viendo la muchedumbre, subió al monte, se sentó, y sus discípulos se le acercaron.2Y tomando la palabra, les enseñaba diciendo:3«Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos.4Bienaventurados los mansos , porque ellos posseerán en herencia la tierra.5Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.6Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados.7Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.8Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.9Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios.10Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos.11Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa.12Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en los cielos; pues de la misma manera persiguieron a los profetas anteriores a vosotros

lunes, 31 de octubre de 2022

Lecturas 31 de Octubre de 2022

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Filipenses 2:1-4

    1Así, pues, os conjuro en virtud de toda exhortación en Cristo, de toda persuasión de amor, de toda comunión en el Espíritu, de toda entrañable compasión,2que colméis mi alegría, siendo todos del mismo sentir, con un mismo amor, un mismo espíritu, unos mismos sentimientos.3Nada hagáis por rivalidad, ni por vanagloria, sino con humildad, considerando cada cual a los demás como superiores a sí mismo,4buscando cada cual no su propio interés sino el de los demás.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 131:1-3

    1Canción de las subidas. De David. No está inflado, Yahveh, mi corazón, ni mis ojos subidos. No he tomado un camino de grandezas ni de prodigios que me vienen anchos.2No, mantengo mi alma en paz y silencio como niño destetado en el regazo de su madre. ¡Como niño destetado está mi alma en mí!3¡Espera, Israel, en Yahveh desde ahora y por siempre!

  • Evangelio

    Lucas 14:12-14

    12Dijo también al que le había invitado: «Cuando des una comida o una cena, no llames a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a tus vecinos ricos; no sea que ellos te inviten a su vez, y tengas ya tu recompensa.13Cuando des un banquete, llama a los pobres, a los lisiados, a los cojos, a los ciegos;14y serás dichoso, porque no te pueden corresponder, pues se te recompensará en la resurrección de los justos.»

domingo, 30 de octubre de 2022

Lecturas 30 de Octubre de 2022

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Sabiduría 11:22--12:2

    1122Como lo que basta a inclinar una balanza, es el mundo entero en tu presencia, como la gota de rocío que a la mañana baja sobre la tierra.23Te compadeces de todos porque todo lo puedes y disimulas los pecados de los hombres para que se arrepientan.24Amas a todos los seres y nada de lo que hiciste aborreces, pues, si algo odiases, no lo habrías hecho.25Y ¿cómo habría permanecido algo si no hubieses querido? ¿Cómo se habría conservado lo que no hubieses llamado?26Mas tú con todas las cosas eres indulgente, porque son tuyas, Señor que amas la vida,121pues tu espíritu incorruptible está en todas ellas.2Por eso mismo gradualmente castigas a los que caen; les amonestas recordándoles en qué pecan para que, apartándose del mal, crean en ti, Señor.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 145:1-2, 8-11, 13-14

    1Himno. De David. Yo te ensalzo, oh Rey Dios mío, y bendigo tu nombre para siempre jamás;2todos los días te bendeciré, por siempre jamás alabaré tu nombre;8Clemente y compasivo es Yahveh, tardo a la cólera y grande en amor;9bueno es Yahveh para con todos, y sus ternuras sobre todas sus obras.10Te darán gracias, Yahveh, todas tus obras y tus amigos te bendecirán;11dirán la gloria de tu reino, de tus proezas hablarán,13Tu reino, un reino por los siglos todos, tu dominio, por todas las edades. Yahveh es fiel en todas sus palabras, en todas sus obras amoroso;14Yahveh sostiene a todos los que caen, a todos los encorvados endereza.

  • Segunda Lectura

    II Tesalonicenses 1:11--2:2

    111Con este objeto rogamos en todo tiempo por vosotros: que nuestro Dios os haga dignos de la vocación y lleve a término con su poder todo vuestro deseo de hacer el bien y la actividad de la fe,12para que así el nombre de nuestro Señor Jesús sea glorificado en vosotros, y vosotros en él, según la gracia de nuestro Dios y del Señor Jesucristo.21Por lo que respecta a la Venida de nuestro Señor Jesucristo y a nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos,2que no os dejéis alterar tan fácilmente en vuestro ánimo, ni os alarméis por alguna manifestación del Espíritu, por algunas palabras o por alguna carta presentada como nuestra, que os haga suponer que está inminente el Día del Señor.

  • Evangelio

    Lucas 19:1-10

    1Habiendo entrado en Jericó, atravesaba la ciudad.2Había un hombre llamado Zaqueo, que era jefe de publicanos, y rico.3Trataba de ver quién era Jesús, pero no podía a causa de la gente, porque era de pequeña estatura.4Se adelantó corriendo y se subió a un sicómoro para verle, pues iba a pasar por allí.5Y cuando Jesús llegó a aquel sitio, alzando la vista, le dijo: «Zaqueo, baja pronto; porque conviene que hoy me quede yo en tu casa.»6Se apresuró a bajar y le recibió con alegría.7Al verlo, todos murmuraban diciendo: «Ha ido a hospedarse a casa de un hombre pecador.»8Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: «Daré, Señor, la mitad de mis bienes a los pobres; y si en algo defraudé a alguien, le devolveré el cuádruplo.»9Jesús le dijo: «Hoy ha llegado la salvación a esta casa, porque también éste es hijo de Abraham,10pues el Hijo del hombre ha venido a buscar y salvar lo que estaba perdido.»