sábado, 4 de junio de 2022

Lecturas 4 de Junio de 2022

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Hechos 28:16-20, 30-31

    16Cuando entramos en Roma se le permitió a Pablo permanecer en casa particular con un soldado que le custodiara.17Tres días después convocó a los principales judíos. Una vez reunidos, les dijo: «Hermanos, yo, sin haber hecho nada contra el pueblo ni contra las costumbres de los padres, fui apresado en Jerusalén y entregado en manos de los romanos,18que, después de haberme interrogado, querían dejarme en libertad porque no había en mí ningún motivo de muerte.19Pero como los judíos se oponían, me vi forzado a apelar al César, sin pretender con eso acusar a los de mi nación.20Por este motivo os llamé para veros y hablaros, pues precisamente por la esperanza de Israel llevo yo estas cadenas.»30Pablo permaneció dos años enteros en una casa que había alquilado y recibía a todos los que acudían a él;31predicaba el Reino de Dios y enseñaba lo referente al Señor Jesucristo con toda valentía, sin estorbo alguno.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 11:4, 5, 7

    4Yahveh en su Templo santo, Yahveh, su trono está en los cielos; ven sus ojos el mundo, sus párpados exploran a los hijos de Adán.5Yahveh explora al justo y al impío; su alma odia a quien ama la violencia.7Que es justo Yahveh y lo justo ama, los rectos contemplarán su rostro.

  • Evangelio

    Juan 21:20-25

    20Pedro se vuelve y ve siguiéndoles detrás, al discípulo a quién Jesús amaba, que además durante la cena se había recostado en su pecho y le había dicho: «Señor, ¿quién es el que te va a entregar?»21Viéndole Pedro, dice a Jesús: «Señor, y éste, ¿qué?»22Jesús le respondió: «Si quiero que se quede hasta que yo venga, ¿qué te importa? Tú, sígueme.»23Corrió, pues, entre los hermanos la voz de que este discípulo no moriría. Pero Jesús no había dicho a Pedro: « No morirá», sino: «Si quiero que se quede hasta que yo venga.»24Este es el discípulo que da testimonio de estas cosas y que las ha escrito, y nosotros sabemos que su testimonio es verdadero.25Hay además otras muchas cosas que hizo Jesús. Si se escribieran una por una, pienso que ni todo el mundo bastaría para contener los libros que se escribieran.

viernes, 3 de junio de 2022

Lecturas 3 de Junio de 2022

 

Lecturas del día:

Primera Opción

  • Primera Lectura

    Hechos 25:13-21

    13Pasados algunos días, el rey Agripa y Berenice vinieron a Cesarea y fueron a saludar a Festo.14Como pasaran allí bastantes días, Festo expuso al rey el caso de Pablo: «Hay aquí un hombre, le dijo, que Félix dejó prisionero.15Estando yo en Jerusalén presentaron contra él acusación los sumos sacerdotes y los ancianos de los judíos, pidiendo contra él sentencia condenatoria.16Yo les respondí que no es costumbre de los romanos entregar a un hombre antes de que el acusado tenga ante sí a los acusadores y se le dé la posibilidad de defenderse de la acusación.17Ellos vinieron aquí juntamente conmigo, y sin dilación me senté al día siguiente en el tribunal y mandé traer al hombre.18Los acusadores comparecieron ante él, pero no presentaron ninguna acusación de los crímenes que yo sospechaba;19solamente tenían contra él unas discusiones sobre su propia religión y sobre un tal Jesús, ya muerto, de quien Pablo afirma que vive.20Yo estaba perplejo sobre estas cuestiones y le propuse si quería ir a Jerusalén y ser allí juzgado de estas cosas.21Pero como Pablo interpuso apelación de que su caso se reservase a la decisión del Augusto, mandé que se le custodiara hasta remitirle al César.»

  • Salmo Responsorial

    Salmo 103:1-2, 11-12, 19-20

    1De David. Bendice a Yahveh, alma mía, del fondo de mi ser, su santo nombre,2bendice a Yahveh, alma mía, no olvides sus muchos beneficios.11Como se alzan los cielos por encima de la tierra, así de grande es su amor para quienes le temen;12tan lejos como está el oriente del ocaso aleja él de nosotros nuestras rebeldías.19Yahveh en los cielos asentó su trono, y su soberanía en todo señorea.20Bendecid a Yahveh, ángeles suyos, héroes potentes, ejecutores de sus órdenes, en cuanto oís la voz de su palabra.

  • Evangelio

    Juan 21:15-19

    15Después de haber comido, dice Jesús a Simón Pedro: «Simón de Juan, ¿me amas más que éstos?» Le dice él: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero.» Le dice Jesús: «Apacienta mis corderos.»16Vuelve a decirle por segunda vez: «Simón de Juan, ¿me amas?» Le dice él: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero.» Le dice Jesús: «Apacienta mis ovejas.»17Le dice por tercera vez: «Simón de Juan, ¿me quieres?» Se entristeció Pedro de que le preguntase por tercera vez: «¿Me quieres?» y le dijo: «Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te quiero.» Le dice Jesús: «Apacienta mis ovejas.18«En verdad, en verdad te digo: cuando eras joven, tú mismo te ceñías, e ibas adonde querías; pero cuando llegues a viejo, extenderás tus manos y otro te ceñirá y te llevará adonde tú no quieras.»19Con esto indicaba la clase de muerte con que iba a glorificar a Dios. Dicho esto, añadió: «Sígueme.»

Segunda Opción

  • Primera Lectura

    II Macabeos 7:1-2, 9-14

    1Sucedió también que siete hermanos apresados junto con su madre, eran forzados por el rey, flagelados con azotes y nervios de buey, a probar carne de puerco (prohibida por la Ley).2Uno de ellos, hablando en nombre de los demás, decía así: «¿Qué quieres preguntar y saber de nosotros? Estamos dispuestos a morir antes que violar las leyes de nuestros padres.»9Al llegar a su último suspiro dijo: «Tú, criminal, nos privas de la vida presente, pero el Rey del mundo a nosotros que morimos por sus leyes, nos resucitará a una vida eterna.»10Después de éste, fue castigado el tercero; en cuanto se lo pidieron, presentó la lengua, tendió decidido las manos11(y dijo con valentía: «Por don del Cielo poseo estos miembros, por sus leyes los desdeño y de El espero recibirlos de nuevo).»12Hasta el punto de que el rey y sus acompañantes estaban sorprendidos del ánimo de aquel muchacho que en nada tenía los dolores.13Llegado éste a su tránsito, maltrataron de igual modo con suplicios al cuarto.14Cerca ya del fin decía así: «Es preferible morir a manos de hombres con la esperanza que Dios otorga de ser resucitados de nuevo por él; para ti, en cambio, no habrá resurrección a la vida.»

  • Salmo Responsorial

    Salmo 124:2-5, 7-8

    2si Yahveh no hubiera estado por nosotros, cuando contra nosotros se alzaron los hombres,3vivos entonces nos habrían tragado en el fuego de su cólera.4Entonces las aguas nos habrían anegado, habría pasado sobre nosotros un torrente,5habrían pasado entonces sobre nuestra alma aguas voraginosas.7Nuestra alma como un pájaro escapó del lazo de los cazadores. El lazo se rompió y nosotros escapamos;8nuestro socorro en el nombre de Yahveh, que hizo el cielo y la tierra.

  • Evangelio

    Mateo 5:1-12

    1Viendo la muchedumbre, subió al monte, se sentó, y sus discípulos se le acercaron.2Y tomando la palabra, les enseñaba diciendo:3«Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos.4Bienaventurados los mansos , porque ellos posseerán en herencia la tierra.5Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.6Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados.7Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.8Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.9Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios.10Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos.11Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa.12Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en los cielos; pues de la misma manera persiguieron a los profetas anteriores a vosotros.

jueves, 2 de junio de 2022

Lecturas 2 de Junio de 2022

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Hechos 22:30; 23:6-11

    2230Al día siguiente, queriendo averiguar con certeza de qué le acusaban los judíos, le sacó de la cárcel y mandó que se reunieran los sumos sacerdotes y todo el Sanedrín; hizo bajar a Pablo y le puso ante ellos.236Pablo, dándose cuenta de que una parte eran saduceos y la otra fariseos, gritó en medio del Sanedrín: «Hermanos, yo soy fariseo, hijo de fariseos; por esperar la resurrección de los muertos se me juzga.»7Al decir él esto, se produjo un altercado entre fariseos y saduceos y la asamblea se dividió.8Porque los saduceos dicen que no hay resurrección, ni ángel, ni espíritu; mientras que los fariseos profesan todo eso.9Se levantó, pues, un gran griterío. Se pusieron en pie algunos escribas del partido de los fariseos y se oponían diciendo: «Nosotros no hallamos nada malo en este hombre. ¿Y si acaso le habló algún espíritu o un ángel?»10Como el altercado iba creciendo, temió el tribuno que Pablo fuese despedazado por ellos y mandó a la tropa que bajase, que le arrancase de entre ellos y le llevase al cuartel.11A la noche siguiente se le apareció el Señor y le dijo: «¡Animo!, pues como has dado testimonio de mí en Jerusalén, así debes darlo también en Roma.»

  • Salmo Responsorial

    Salmo 16:1-2, 5, 7-11

    1media voz. De David. Guárdame, oh Dios, en ti está mi refugio.2Yo digo a Yahveh: «Tú eres mi Señor. mi bien, nada hay fuera de ti»;5Yahveh, la parte de mi herencia y de mi copa, tú mi suerte aseguras;7Bendigo a Yahveh que me aconseja; aun de noche mi conciencia me instruye;8pongo a Yahveh ante mí sin cesar; porque él está a mi diestra, no vacilo.9Por eso se me alegra el corazón, mis entrañas retozan, y hasta mi carne en seguro descansa;10pues no has de abandonar mi alma al seol, ni dejarás a tu amigo ver la fosa.11Me enseñarás el caminó de la vida, hartura de goces, delante de tu rostro, a tu derecha, delicias para siempre.

  • Evangelio

    Juan 17:20-26

    20No ruego sólo por éstos, sino también por aquellos que, por medio de su palabra, creerán en mí,21para que todos sean uno. Como tú, Padre, en mí y yo en ti, que ellos también sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado.22Yo les he dado la gloria que tú me diste, para que sean uno como nosotros somos uno:23yo en ellos y tú en mí, para que sean perfectamente uno, y el mundo conozca que tú me has enviado y que los has amado a ellos como me has amado a mí.24Padre, los que tú me has dado, quiero que donde yo esté estén también conmigo, para que contemplan mi gloria, la que ma has dado, porque me has amado antes de la creación del mundo.25Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero yo te he conocido y éstos han conocido que tú me has enviado.26Yo les he dado a conocer tu Nombre y se lo seguiré dando a conocer, para que el amor con que tú me has amado esté en ellos y yo en ellos.»

miércoles, 1 de junio de 2022

Lecturas 1 de Junio de 2022

 

Lecturas del día:

Primera Opción

  • Primera Lectura

    Hechos 20:28-38

    28«Tened cuidado de vosotros y de toda la grey, en medio de la cual os ha puesto el Espíritu Santo como vigilantes para pastorear la Iglesia de Dios, que él se adquirió con la sangre de su propio hijo.29«Yo sé que, después de mi partida, se introducirán entre vosotros lobos crueles que no perdonarán al rebaño;30y también que de entre vosotros mismos se levantarán hombres que hablarán cosas perversas, para arrastrar a los discípulos detrás de sí.31Por tanto, vigilad y acordaos que durante tres años no he cesado de amonestaros día y noche con lágrimas a cada uno de vosotros.32«Ahora os encomiendo a Dios y a la Palabra de su gracia, que tiene poder para construir el edificio y daros la herencia con todos los santificados.33«Yo de nadie codicié plata, oro o vestidos.34Vosotros sabéis que estas manos proveyeron a mis necesidades y a las de mis compañeros.35En todo os he enseñado que es así, trabajando, como se debe socorrer a los débiles y que hay que tener presentes las palabras del Señor Jesús, que dijo: Mayor felicidad hay en dar que en recibir.»36Dicho esto se puso de rodillas y oro con todos ellos.37Rompieron entonces todos a llorar y arrojándose al cuello de Pablo, le besaban,38afligidos sobre todo por lo que había dicho: que ya no volverían a ver su rostro. Y fueron acompañandole hasta la nave.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 68:29-30, 33-36

    29¡Manda, Dios mío, según tu poder, el poder, oh Dios, que por nosotros desplegaste,30desde tu Templo en lo alto de Jerusalén, donde vienen los reyes a ofrecerte presentes!33¡Cantad a Dios, reinos de la tierra, salmodiad para el Señor,34para el que cabalga los cielos, los antiguos cielos: ved que lanza él su voz, su voz potente!35Reconoced el poderío de Dios. Sobre Israel su exaltación, su poder en las nubes:36¡temible es Dios desde su santuario! El, el Dios de Israel, es quien da poder y fuerza al pueblo. ¡Bendito sea Dios!

  • Evangelio

    Juan 17:11-19

    11Yo ya no estoy en el mundo, pero ellos sí están en el mundo, y yo voy a ti. Padre santo, cuida en tu nombre a los que me has dado, para que sean uno como nosotros.12Cuando estaba yo con ellos, yo cuidaba en tu nombre a los que me habías dado. He velado por ellos y ninguno se ha perdido, salvo el hijo de perdición, para que se cumpliera la Escritura.13Pero ahora voy a ti, y digo estas cosas en el mundo para que tengan en sí mismos mi alegría colmada.14Yo les he dado tu Palabra, y el mundo los ha odiado, porque no son del mundo, como yo no soy del mundo.15No te pido que los retires del mundo, sino que los guardes del Maligno.16Ellos no son del mundo, como yo no soy del mundo.17Santifícalos en la verdad: tu Palabra es verdad.18Como tú me has enviado al mundo, yo también los he enviado al mundo.19Y por ellos me santifico a mí mismo, para que ellos también sean santificados en la verdad.

Segunda Opción

  • Primera Lectura

    I Corintios 1:18-25

    18Pues la predicación de la cruz es una necedad para los que se pierden; mas para los que se salvan - para nosotros - es fuerza de Dios.19Porque dice la Escritura: Destruiré la sabiduría de los sabios, e inutilizaré la inteligencia de los inteligentes.20¿Dónde está el sabio? ¿Dónde el docto? ¿Dónde el sofista de este mundo? ¿Acaso no entondeció Dios la sabiduría del mundo?21De hecho, como el mundo mediante su propia sabiduría no conoció a Dios en su divina sabiduría, quiso Dios salvar a los creyentes mediante la necedad de la predicación.22Así, mientras los judíos piden señales y los griegos buscan sabiduría,23nosotros predicamos a un Cristo crucificado: escándalo para los judíos, necedad para los gentiles;24mas para los llamados, lo mismo judíos que griegos, un Cristo, fuerza de Dios y sabiduría de Dios.25Porque la necedad divina es más sabia que la sabiduría de los hombres, y la debilidad divina, más fuerte que la fuerza de los hombres.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 34:2-9

    2Bendeciré a Yahveh en todo tiempo, sin cesar en mi boca su alabanza;3en Yahveh mi alma se gloría, ¡óiganlo los humildes y se alegren!4Engrandeced conmigo a Yahveh, ensalcemos su nombre todos juntos.5He buscado a Yahveh, y me ha respondido: me ha librado de todos mis temores.6Los que miran hacia él, refulgirán: no habrá sonrojo en su semblante.7Cuando el pobre grita, Yahveh oye, y le salva de todas sus angustias.8Acampa el ángel de Yahveh en torno a los que le temen y los libra.9Gustad y ved qué bueno es Yahveh, dichoso el hombre que se cobija en él.

  • Evangelio

    Mateo 5:13-19

    13«Vosotros sois la sal de la tierra. Mas si la sal se desvirtúa, ¿con qué se la salará? Ya no sirve para nada más que para ser tirada afuera y pisoteada por los hombres.14«Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad situada en la cima de un monte.15Ni tampoco se enciende una lámpara y la ponen debajo del celemín, sino sobre el candelero, para que alumbre a todos los que están en la casa.16Brille así vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.17«No penséis que he venido a abolir la Ley y los Profetas. No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento.18Sí, os lo aseguro: el cielo y la tierra pasarán antes que pase una i o una tilde de la Ley sin que todo suceda.19Por tanto, el que traspase uno de estos mandamientos más pequeños y así lo enseñe a los hombres, será el más pequeño en el Reino de los Cielos; en cambio, el que los observe y los enseñe, ése será grande en el Reino de los Cielos.

martes, 31 de mayo de 2022

Lecturas 31 de Mayo de 2022

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Sofonías 3:14-18

    14¡Lanza gritos de gozo, hija de Sión, lanza clamores, Israel, alégrate y exulta de todo corazón, hija de Jerusalén!15Ha retirado Yahveh las sentencias contra ti, ha alejado a tu enemigo. ¡Yahveh, Rey de Israel, está en medio de ti, no temerás ya ningún mal!16Aquel día se dirá a Jerusalén: ¡No tengas miedo, Sión, no desmayen tus manos!17Yahveh tu Dios está en medio de ti, ¡un poderoso salvador! El exulta de gozo por ti, te renueva por su amor; danza por ti con gritos de júbilo,18como en los días de fiesta. Yo quitaré de tu lado la desgracia, el oprobio que pesa sobre ti.

    O también:

    Romanos 12:9-16

    9Vuestra caridad sea sin fingimiento; detestando el mal, adhiriéndoos al bien;10amándoos cordialmente los unos a los otros; estimando en más cada uno a los otros;11con un celo sin negligencia; con esp1ritu fervoroso; sirviendo al Señor;12con la alegría de la esperanza; constantes en la tribulación; perseverantes en la oración;13compartiendo las necesitades de los santos; practicando la hospitalidad.14Bendecid a los que os persiguen, no maldigáis.15Alegraos con los que se alegran; llorad con los que lloran.16Tened un mismo sentir los unos para con los otros; sin complaceros en la altivez; atraídos más bien por lo humilde; no os complazcáis en vuestra propia sabiduria.

  • Salmo Responsorial

    Isaías 12:2-6

    2He aquí a Dios mi Salvador: estoy seguro y sin miedo, pues Yahveh es mi fuerza y mi canción, él es mi salvación,»3Sacaréis agua con gozo de los hontanares de salvación.»4y diréis aquel día: «Dad gracias a Yahveh, aclamad su nombre, divulgad entre los pueblos sus hazañas, pregonad que es sublime su nombre.5Cantad a Yahveh, porque ha hecho algo sublime, que es digno de saberse en toda la tierra.6Dad gritos de gozo y de júbilo, moradores de Sión, que grande es en medio de ti el Santo de Israel.»

  • Evangelio

    Lucas 1:39-56

    39En aquellos días, se levantó María y se fue con prontitud a la región montañosa, a una ciudad de Judá;40entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel.41Y sucedió que, en cuanto oyó Isabel el saludo de María, saltó de gozo el niño en su seno, e Isabel quedó llena de Espíritu Santo;42y exclamando con gran voz, dijo: «Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu seno;43y ¿de dónde a mí que la madre de mi Señor venga a mí?44Porque, apenas llegó a mis oídos la voz de tu saludo, saltó de gozo el niño en mi seno.45¡Feliz la que ha creído que se cumplirían las cosas que le fueron dichas de parte del Señor!»46Y dijo María: «Engrandece mi alma al Señor47y mi espíritu se alegra en Dios mi salvador48porque ha puesto los ojos en la humildad de su esclava, por eso desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada,49porque ha hecho en mi favor maravillas el Poderoso, Santo es su nombre50y su misericordia alcanza de generación en generación a los que le temen.51Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los que son soberbios en su propio corazón.52Derribó a los potentados de sus tronos y exaltó a los humildes.53A los hambrientos colmó de bienes y despidió a los ricos sin nada.54Acogió a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia55- como había anunciado a nuestros padres - en favor de Abraham y de su linaje por los siglos.»56María permanceció con ella unos tres meses, y se volvió a su casa.

lunes, 30 de mayo de 2022

Lecturas 30 de Mayo de 2022

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Hechos 19:1-8

    1Mientras Apolo estaba en Corinto, Pablo atravesó las regiones altas y llegó a Efeso donde encontró algunos discípulos;2les preguntó: «¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando abrazasteis la fe?» Ellos contestaron: «Pero si nosotros no hemos oído decir siquiera que exista el Espíritu Santo.»3El replicó: «¿Pues qué bautismo habéis recibido?» - «El bautismo de Juan», respondieron.4Pablo añadió: «Juan bautizó con un bautismo de conversión, diciendo al pueblo que creyesen en el que había de venir después de él, o sea en Jesús.»5Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús.6Y, habiéndoles Pablo impuesto las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo y se pusieron a hablar en lenguas y a profetizar.7Eran en total unos doce hombres.8Entró en la sinagoga y durante tres meses hablaba con valentía, discutiendo acerca del Reino de Dios e intentando convencerles.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 68:2-7

    2¡Alcese Dios, sus enemigos se dispersen, huyan ante su faz los que le odian!3Cual se disipa el humo, los disipas; como la cera se derrite al fuego, perecen los impíos ante Dios.4Mas los justos se alegran y exultan ante la faz de Dios, y saltan de alegría.5Cantad a Dios, salmodiad a su nombre, abrid paso al que cabalga en las nubes, alegraos en Yahveh, exultad ante su rostro.6Padre de los huérfanos y tutor de las viudas es Dios en su santa morada;7Dios da a los desvalidos el cobijo de una casa, abre a los cautivos la puerta de la dicha, mas los rebeldes quedan en un suelo ardiente.

  • Evangelio

    Juan 16:29-33

    29Le dicen sus discípulos: «Ahora sí que hablas claro, y no dices ninguna parábola.30Sabemos ahora que lo sabes todo y no necesitas que nadie te pregunte. Por esto creemos que has salido de Dios.»31Jesús les respondió: «¿Ahora creéis?32Mirad que llega la hora (y ha llegado ya) en que os dispersaréis cada uno por vuestro lado y me dejaréis solo. Pero no estoy solo, porque el Padre está conmigo.33Os he dicho estas cosas para que tengáis paz en mí. En el mundo tendréis tribulación. Pero ¡ánimo!: yo he vencido al mundo.»

domingo, 29 de mayo de 2022

Lecturas 29 de Mayo de 2022

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Hechos 1:1-11

    1El primer libro lo escribí, Teófilo, sobre todo lo que Jesús hizo y enseñó desde un principio2hasta el día en que, después de haber dado instrucciones por medio del Espíritu Santo a los apóstoles que había elegido, fue llevado al cielo.3A estos mismos, después de su pasión, se les presentó dándoles muchas pruebas de que vivía, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles acerca de lo referente al Reino de Dios.4Mientras estaba comiendo con ellos, les mandó que no se ausentasen de Jerusalén, sino que aguardasen la Promesa del Padre, «que oísteis de mí:5Que Juan bautizó con agua, pero vosotros seréis bautizados en el Espíritu Santo dentro de pocos días».6Los que estaban reunidos le preguntaron: «Señor, ¿es en este momento cuando vas a restablecer el Reino de Israel?»7El les contestó: «A vosotros no os toca conocer el tiempo y el momento que ha fijado el Padre con su autoridad,8sino que recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre vosotros, y seréis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra.»9Y dicho esto, fue levantado en presencia de ellos, y una nube le ocultó a sus ojos.10Estando ellos mirando fijamente al cielo mientras se iba, se les aparecieron dos hombres vestidos de blanco11que les dijeron: «Galileos, ¿qué hacéis ahí mirando al cielo? Este que os ha sido llevado, este mismo Jesús, vendrá así tal como le habéis visto subir al cielo.»

  • Salmo Responsorial

    Salmo 47:2-3, 6-9

    2¡Pueblos todos, batid palmas, aclamad a Dios con gritos de alegría!3Porque Yahveh, el Altísimo, es terrible, Rey grande sobre la tierra toda.6Sube Dios entre aclamaciones, Yahveh al clangor de la trompeta:7¡salmodiad para nuestro Dios, salmodiad, salmodiad para nuestro Rey, salmodiad!8Que de toda la tierra él es el rey: ¡salmodiad a Dios con destreza!9Reina Dios sobre las naciones, Dios, sentado en su sagrado trono.

  • Segunda Lectura

    Efesios 1:17-23

    17para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, os conceda espíritu de sabiduría y de revelación para conocerle perfectamente;18iluminando los ojos de vuestro corazón para que conozcáis cuál es la esperanza a que habéis sido llamados por él; cuál la riqueza de la gloria otorgada por él en herencia a los santos,19y cuál la soberana grandeza de su poder para con nosotros, los creyentes, conforme a la eficacia de su fuerza poderosa,20que desplegó en Cristo, resucitándole de entre los muertos y sentándole a su diestra en los cielos,21por encima de todo Principado, Potestad, Virtud, Dominación y de todo cuanto tiene nombre no sólo en este mundo sino también en el venidero.22Bajo sus pies sometió todas la cosas y le constituyó Cabeza suprema de la Iglesia,23que es su Cuerpo, la Plenitud del que lo llena todo en todo.

    O también:

    Hebreos 9:24-28; 10:19-23

    924Pues no penetró Cristo en un santuario hecho por mano de hombre, en una reproducción del verdadero, sino en el mismo cielo, para presentarse ahora ante el acatamiento de Dios en favor nuestro,25y no para ofrecerse a sí mismo repetidas veces al modo como el Sumo Sacerdote entra cada año en el santuario con sangre ajena.26Para ello habría tenido que sufrir muchas veces desde la creación del mundo. Sino que se ha manifestado ahora una sola vez, en la plenitud de los tiempos, para la destrucción del pecado mediante su sacrificio.27Y del mismo modo que está establecido que los hombres mueran una sola vez, y luego el juicio,28así también Cristo, después de haberse ofrecido una sola vez para quitar los pecados de la multitud, se aparecerá por segunda vez sin relación ya con el pecado a los que le esperan para su salvación.1019Teniendo, pues, hermanos, plena seguridad para entrar en el santuario en virtud de la sangre de Jesús,20por este camino nuevo y vivo, inaugurado por él para nosotros, a través del velo, es decir, de su propia carne,21y con un Sumo Sacerdote al frente de la casa de Dios,22acerquémonos con sincero corazón , en plenitud de fe, purificados los corazones de conciencia mala y lavados los cuerpos con agua pura.23Mantengamos firme la confesión de la esperanza, pues fiel es el autor de la Promesa.

  • Evangelio

    Lucas 24:46-53

    46y les dijo: «Así está escrito que el Cristo padeciera y resucitara de entre los muertos al tercer día47y se predicara en su nombre la conversión para perdón de los pecados a todas las naciones, empezando desde Jerusalén.48Vosotros sois testigos de estas cosas.49«Mirad, y voy a enviar sobre vosotros la Promesa de mi Padre. Por vuestra parte permaneced en la ciudad hasta que seáis revestidos de poder desde lo alto.»50Los sacó hasta cerca de Betania y, alzando sus manos, los bendijo.51Y sucedió que, mientras los bendecía, se separó de ellos y fue llevado al cielo.52Ellos, después de postrarse ante él, se volvieron a Jerusalén con gran gozo,53y estaban siempre en el Templo bendiciendo a Dios.