sábado, 7 de septiembre de 2024

Lecturas 7 de Septiembre de 2024

 

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    I Corintios 4:6-15

    6En esto, hermanos, me he puesto como ejemplo a mí y a Apolo, en orden a vosotros; para que aprendáis de nosotros aquello de «No propasarse de lo que está escrito» y para que nadie se engría en favor de uno contra otro.7Pues ¿quién es el que te distingue? ¿Qué tienes que no lo hayas recibido? Y si lo has recibido, ¿a qué gloriarte cual si no lo hubieras recibido?8¡Ya estáis hartos! ¡Ya sois ricos! ¡Os habéis hecho reyes sin nosotros! ¡Y ojalá reinaseis, para que también nosotros reináramos con vosotros!9Porque pienso que a nosotros, los apóstoles, Dios nos ha asignado el último lugar, como condenados a muerte, puestos a modo de espectáculo para el mundo, los ángeles y los hombres.10Nosotros, necios por seguir a Cristo; vosotros, sabios en Cristo. Débiles nosotros; mas vosotros, fuertes. Vosotros llenos de gloria; mas nosotros, despreciados.11Hasta el presente, pasamos hambre, sed, desnudez. Somos abofeteados, y andamos errantes.12Nos fatigamos trabajando con nuestras manos. Si nos insultan, bendecimos. Si nos persiguen, lo soportamos.13Si nos difaman, respondemos con bondad. Hemos venido a ser, hasta ahora, como la basura del mundo y el desecho de todos.14No os escribo estas cosas para avergonzaros, sino más bien para amonestaros como a hijos míos queridos.15Pues aunque hayáis tenido 10.000 pedagogos en Cristo, no habéis tenido muchos padres. He sido yo quien, por el Evangelio, os engendré en Cristo Jesús.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 145:17-21

    17Yahveh es justo en todos sus caminos, en todas sus obras amoroso;18cerca está Yahveh de los que le invocan, de todos los que le invocan con verdad.19El cumple el deseo de los que le temen, escucha su clamor y los libera;20guarda Yahveh a cuantos le aman, a todos los impíos extermina.21¡La alabanza de Yahveh diga mi boca, y toda carne bendiga su nombre sacrosanto, para siempre jamás!

  • Evangelio

    Lucas 6:1-5

    1Sucedió que cruzaba en sábado por unos sembrados; sus discípulos arrancaban y comían espigas desgranándolas con las manos.2Algunos de los fariseos dijeron: «¿Por qué hacéis lo que no es lícito en sábado?»3Y Jesús les respondió: «¿Ni siquiera habéis leído lo que hizo David, cuando sintió hambre él y los que le acompañaban,4cómo entró en la Casa de Dios, y tomando los panes de la presencia, que no es lícito comer sino sólo a los sacerdotes, comió él y dio a los que le acompañaban?»5Y les dijo: «El Hijo del hombre es señor del sábado.»

viernes, 6 de septiembre de 2024

Lecturas 6 de Septiembre de 2024

 

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    I Corintios 4:1-5

    1Por tanto, que nos tengan los hombres por servidores de Cristo y administradores de los misterios de Dios.2Ahora bien, lo que en fin de cuentas se exige de los administradores es que sean fieles.3Aunque a mí lo que menos me importa es ser juzgado por vosotros o por un tribunal humano. ¡Ni siquiera me juzgo a mí mismo!4Cierto que mi conciencia nada me reprocha; mas no por eso quedo justificado. Mi juez es el Señor.5Así que, no juzguéis nada antes de tiempo hasta que venga el Señor. El iluminará los secretos de las tinieblas y pondrá de manifiesto los designios de los corazones. Entonces recibirá cada cual del Señor la alabanza que le corresponda.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 37:3-6, 27-28, 39-40

    3Ten confianza en Yahveh y obra el bien, vive en la tierra y crece en paz,4ten tus delicias en Yahveh, y te dará lo que pida tu corazón.5Pon tu suerte en Yahveh, confía en él, que él obrará;6hará brillar como la luz tu justicia, y tu derecho igual que el mediodía.27Apártate del mal y obra el bien, tendrás para siempre una morada;28porque Yahveh ama lo que es justo y no abandona a sus amigos. Los malvados serán por siempre exterminados, la estirpe de los impíos cercenada;39La salvación de los justos viene de Yahveh, él su refugio en tiempo de angustia;40Yahveh los ayuda y los libera, de los impíos él los libra, los salva porque a él se acogen.

  • Evangelio

    Lucas 5:33-39

    33Ellos le dijeron: «Los discípulos de Juan ayunan frecuentemente y recitan oraciones, igual que los de los fariseos, pero los tuyos comen y beben.»34Jesús les dijo: «¿Podéis acaso hacer ayunar a los invitados a la boda mientras el novio está con ellos?35Días vendrán en que les será arrebatado el novio; entonces ayunarán en aquellos días.»36Les dijo también una parábola: «Nadie rompe un vestido nuevo para echar un remiendo a uno viejo; de otro modo, desgarraría el nuevo, y al viejo no le iría el remiendo del nuevo.37«Nadie echa tampoco vino nuevo en pellejos viejos; de otro modo, el vino nuevo reventaría los pellejos, el vino se derramaría, y los pellejos se echarían a perder;38sino que el vino nuevo debe echarse en pellejos nuevos.39Nadie, después de beber el vino añejo, quiere del nuevo porque dice: «El añejo es el bueno.»

jueves, 5 de septiembre de 2024

Lecturas 5 de Septiembre de 2024

 

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    I Corintios 3:18-23

    18¡Nadie se engañe! Si alguno entre vosotros se cree sabio según este mundo, hágase necio, para llegar a ser sabio;19pues la sabiduría de este mundo es necedad a los ojos de Dios. En efecto, dice la Escritura: El que prende a los sabios en su propia astucia.20Y también: El Señor conoce cuán vanos son los pensamientos de los sabios.21Así que, no se gloríe nadie en los hombres, pues todo es vuestro:22ya sea Pablo, Apolo, Cefas, el mundo, la vida, la muerte, el presente, el futuro, todo es vuestro;23y vosotros, de Cristo y Cristo de Dios.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 24:1-6

    1Salmo. De David. De Yahveh es la tierra y cuanto hay en ella, el orbe y los que en él habitan;2que él lo fundó sobre los mares, él lo asentó sobre los ríos.3¿Quién subirá al monte de Yahveh?, ¿quién podrá estar en su recinto santo?4El de manos limpias y puro corazón, el que a la vanidad no lleva su alma, ni con engaño jura.5El logrará la bendición de Yahveh, la justicia del Dios de su salvación.6Tal es la raza de los que le buscan, los que van tras tu rostro, oh Dios de Jacob.

  • Evangelio

    Lucas 5:1-11

    1Estaba él a la orilla del lago Genesaret y la gente se agolpaba sobre él para oír la Palabra de Dios,2cuando vio dos barcas que estaban a la orilla del lago. Los pescadores habían bajado de ellas, y lavaban las redes.3Subiendo a una de las barcas, que era de Simón, le rogó que se alejara un poco de tierra; y, sentándose, enseñaba desde la barca a la muchedumbre.4Cuando acabó de hablar, dijo a Simón: «Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pescar.»5Simón le respondió: «Maestro, hemos estado bregando toda la noche y no hemos pescado nada; pero, en tu palabra, echaré las redes.»6Y, haciéndolo así, pescaron gran cantidad de peces, de modo que las redes amenazaban romperse.7Hicieron señas a los compañeros de la otra barca para que vinieran en su ayuda. Vinieron, pues, y llenaron tanto las dos barcas que casi se hundían.8Al verlo Simón Pedro, cayó a las rodillas de Jesús, diciendo: «Aléjate de mí, Señor, que soy un hombre pecador.»9Pues el asombro se había apoderado de él y de cuantos con él estaban, a causa de los peces que habían pescado.10Y lo mismo de Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón. Jesús dijo a Simón: «No temas. Desde ahora serás pescador de hombres.»11Llevaron a tierra las barcas y, dejándolo todo, le siguieron.

miércoles, 4 de septiembre de 2024

Lecturas 4 de Septiembre de 2024

 

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    I Corintios 3:1-9

    1Yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo.2Os di a beber leche y no alimento sólido, pues todavía no lo podíais soportar. Ni aun lo soportáis al presente;3pues todavía sois carnales. Porque, mientras haya entre vosotros envidia y discordia ¿no es verdad que sois carnales y vivís a lo humano?4Cuando dice uno «Yo soy de Pablo», y otro «Yo soy de Apolo», ¿no procedéis al modo humano?5¿Qué es, pues Apolo? ¿Qué es Pablo?... ¡Servidores, por medio de los cuales habéis creído!, y cada uno según lo que el Señor le dio.6Yo planté, Apolo regó; mas fue Dios quien dio el crecimiento.7De modo que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios que hace crecer.8Y el que planta y el que riega son una misma cosa; si bien cada cual recibirá el salario según su propio trabajo,9ya que somos colaboradores de Dios y vosotros, campo de Dios, edificación de Dios.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 33:12-15, 20-21

    12¡Feliz la nación cuyo Dios es Yahveh, el pueblo que se escogió por heredad!13Yahveh mira de lo alto de los cielos, ve a todos los hijos de Adán;14desde el lugar de su morada observa a todos los habitantes de la tierra,15él, que forma el corazón de cada uno, y repara en todas sus acciones.20Nuestra alma en Yahveh espera, él es nuestro socorro y nuestro escudo;21en él se alegra nuestro corazón, y en su santo nombre confiamos.

  • Evangelio

    Lucas 4:38-44

    38Saliendo de la sinagoga, entró en la casa de Simón. La suegra de Simón estaba con mucha fiebre, y le rogaron por ella.39Inclinándose sobre ella, conminó a la fiebre, y la fiebre la dejó; ella, levantándose al punto, se puso a servirles.40A la puesta del sol, todos cuantos tenían enfermos de diversas dolencias se los llevaban; y, poniendo él las manos sobre cada uno de ellos, los curaba.41Salían también demonios de muchos, gritando y diciendo: «Tú eres el Hijo de Dios.» Pero él, conminaba y no les permitía hablar, porque sabían que él era el Cristo.42Al hacerse de día, salió y se fue a un lugar solitario. La gente le andaba buscando y, llegando donde él, trataban de retenerle para que no les dejara.43Pero él les dijo: «También a otras ciudades tengo que anunciar la Buena Nueva del Reino de Dios, porque a esto he sido enviado.»44E iba predicando por las sinagogas de Judea.

martes, 3 de septiembre de 2024

Lecturas 3 de Septiembre de 2024

 

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    I Corintios 2:10-16

    10Porque a nosotros nos lo reveló Dios por medio del Espíritu; y el Espíritu todo lo sondea, hasta las profundidades de Dios.11En efecto, ¿qué hombre conoce lo íntimo del hombre sino el espíritu del hombre que está en él? Del mismo modo, nadie conoce lo íntimo de Dios, sino el Espíritu de Dios.12Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que viene de Dios, para conocer las gracias que Dios nos ha otorgado,13de las cuales también hablamos, no con palabras aprendidas de sabiduría humana, sino aprendidas del Espíritu, expresando realidades espirituales.14El hombre naturalmente no capta las cosas del Espíritu de Dios; son necedad para él. Y no las puede conocer pues sólo espiritualmente pueden ser juzgadas.15En cambio, el hombre de espíritu lo juzga todo; y a él nadie puede juzgarle.16Porque ¿quién conoció la mente del Señor para instruirle? Pero nosotros tenemos la mente de Cristo.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 145:8-14

    8Clemente y compasivo es Yahveh, tardo a la cólera y grande en amor;9bueno es Yahveh para con todos, y sus ternuras sobre todas sus obras.10Te darán gracias, Yahveh, todas tus obras y tus amigos te bendecirán;11dirán la gloria de tu reino, de tus proezas hablarán,12para mostrar a los hijos de Adán tus proezas, el esplendor y la gloria de tu reino.13Tu reino, un reino por los siglos todos, tu dominio, por todas las edades. Yahveh es fiel en todas sus palabras, en todas sus obras amoroso;14Yahveh sostiene a todos los que caen, a todos los encorvados endereza.

  • Evangelio

    Lucas 4:31-37

    31Bajó a Cafarnaúm, ciudad de Galilea, y los sábados les enseñaba.32Quedaban asombrados de su doctrina, porque hablaba con autoridad.33Había en la sinagoga un hombre que tenía el espíritu de un demonio inmundo, y se puso a gritar a grandes voces:34«¡Ah! ¿Qué tenemos nosotros contigo, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Sé quién eres tú: el Santo de Dios.»35Jesús entonces le conminó diciendo: «Cállate, y sal de él.» Y el demonio, arrojándole en medio, salió de él sin hacerle ningún daño.36Quedaron todos pasmados, y se decían unos a otros: «¡Qué palabra ésta! Manda con autoridad y poder a los espíritus inmundos y salen.»37Y su fama se extendió por todos los lugares de la región.

  • Primera Lectura

    II Corintios 4:1-2, 5-7

    1Por esto, misericordiosamente investidos de este ministerio, no desfallecemos.2Antes bien, hemos repudiado el silencio vergonzoso no procediendo con astucia, ni falseando la Palabra de Dios; al contrario, mediante la manifestación de la verdad nos recomendamos a nosotros mismos a toda conciencia humana delante de Dios.5No nos predicamos a nosotros mismos, sino a Cristo Jesús como Señor, y a nosotros como siervos vuestros por Jesús.6Pues el mismo Dios que dijo: "De las tinieblas brille la luz," ha hecho brillar la luz en nuestros corazones, para irradiar el conocimiento de la gloria de Dios que está en la faz de Cristo.7Pero llevamos este tesoro en recipientes de barro para que aparezca que una fuerza tan extraordinaria es de Dios y no de nosotros.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 96:1-3, 7-8, 10

    1¡Cantad a Yahveh un canto nuevo, cantad a Yahveh, toda la tierra,2cantad a Yahveh, su nombre bendecid! Anunciad su salvación día tras día,3contad su gloria a las naciones, a todos los pueblos sus maravillas.7Rendid a Yahveh, familias de los pueblos, rendid a Yahveh gloria y poder,8rendid a Yahveh la gloria de su nombre. Traed ofrendas y en sus atrios entrad,10Decid entre las gentes: «¡Yahveh es rey!» El orbe está seguro, no vacila; él gobierna a los pueblos rectamente.

  • Evangelio

    Lucas 22:24-30

    24Entre ellos hubo también un altercado sobre quién de ellos parecía ser el mayor.25El les dijo: «Los reyes de las naciones las dominan como señores absolutos, y los que ejercen el poder sobre ellas se hacen llamar Bienhechores;26pero no así vosotros, sino que el mayor entre vosotros sea como el más joven y el que gobierna como el que sirve.27Porque, ¿quién es mayor, el que está a la mesa o el que sirve? ¿No es el que está a la mesa? Pues yo estoy en medio de vosotros como el que sirve.28«Vosotros sois los que habéis perseverado conmigo en mis pruebas;29yo, por mi parte, dispongo un Reino para vosotros, como mi Padre lo dispuso para mí,30para que comáis y bebáis a mi mesa en mi Reino y os sentéis sobre tronos para juzgar a las doce tribus de Israel.

lunes, 2 de septiembre de 2024

Lecturas 2 de Septiembre de 2024

 

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    Génesis 2:4-9, 15

    4Esos fueron los orígenes de los cielos y la tierra, cuando fueron creados. El día en que hizo Yahveh Dios la tierra y los cielos,5no había aún en la tierra arbusto alguno del campo, y ninguna hierba del campo había germinado todavía, pues Yahveh Dios no había hecho llover sobre la tierra, ni había hombre que labrara el suelo.6Pero un manantial brotaba de la tierra, y regaba toda la superficie del suelo.7Entonces Yahveh Dios formó al hombre con polvo del suelo, e insufló en sus narices aliento de vida, y resultó el hombre un ser viviente.8Luego plantó Yahveh Dios un jardín en Edén, al oriente, donde colocó al hombre que había formado.9Yahveh Dios hizo brotar del suelo toda clase de árboles deleitosos a la vista y buenos para comer, y en medio del jardín, el árbol de la vida y el árbol de la ciencia del bien y del mal.15Tomó, pues, Yahveh Dios al hombre y le dejó en al jardín de Edén, para que lo labrase y cuidase.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 90:2-5, 12-14, 16

    2Antes que los montes fuesen engendrados, antes que naciesen tierra y orbe, desde siempre hasta siempre tú eres Dios.3Tú al polvo reduces a los hombres, diciendo: «¡Tornad, hijos de Adán!»4Porque mil años a tus ojos son como el ayer, que ya pasó, como una vigilia de la noche.5Tú los sumerges en un sueño, a la mañana serán como hierba que brota;12¡Enseñanos a contar nuestros días, para que entre la sabiduría en nuestro corazón!13¡Vuelve, Yahveh! ¿Hasta cuándo? Ten piedad de tus siervos.14Sácianos de tu amor a la mañana, que exultemos y cantemos toda nuestra vida.16¡Que se vea tu obra con tus siervos, y tu esplendor sobre sus hijos!

  • Evangelio

    Mateo 6:31-34

    31No andéis, pues, preocupados diciendo: ¿Qué vamos a comer?, ¿qué vamos a beber?, ¿con qué vamos a vestirnos?32Que por todas esas cosas se afanan los gentiles; pues ya sabe vuestro Padre celestial que tenéis necesidad de todo eso.33Buscad primero su Reino y su justicia, y todas esas cosas se os darán por añadidura.34Así que no os preocupéis del mañana: el mañana se preocupará de sí mismo. Cada día tiene bastante con su propio mal.

  • Primera Lectura

    I Corintios 2:1-5

    1Pues yo, hermanos, cuando fui a vosotros, no fui con el prestigio de la palabra o de la sabiduría a anunciaros el misterio de Dios,2pues no quise saber entre vosotros sino a Jesucristo, y éste crucificado.3Y me presenté ante vosotros débil, tímido y tembloroso.4Y mi palabra y mi predicación no tuvieron nada de los persuasivos discursos de la sabiduría, sino que fueron una demostración del Espíritu y del poder5para que vuestra fe se fundase, no en sabiduría de hombres, sino en el poder de Dios.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 119:97-102

    97¡Oh, cuánto amo tu ley! Todo el día es ella mi meditación.98Más sabio me haces que mis enemigos por tu mandamiento, que por siempre es mío.99Tengo más prudencia que todos mis maestros, porque mi meditación son tus dictámenes.100Poseo más cordura que los viejos, porque guardo tus ordenanzas.101Retraigo mis pasos de toda mala senda para guardar tu palabra.102De tus juicios no me aparto, porque me instruyes tú.

  • Evangelio

    Lucas 4:16-30

    16Vino a Nazará, donde se había criado y, según su costumbre, entró en la sinagoga el día de sábado, y se levantó para hacer la lectura.17Le entregaron el volumen del profeta Isaías y desenrollando el volumen, halló el pasaje donde estaba escrito:18El Espíritu del Señor sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los pobres la Buena Nueva, me ha enviado a proclamar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos19y proclamar un año de gracia del Señor.20Enrollando el volumen lo devolvió al ministro, y se sentó. En la sinagoga todos los ojos estaban fijos en él.21Comenzó, pues, a decirles: «Esta Escritura, que acabáis de oír, se ha cumplido hoy.»22Y todos daban testimonio de él y estaban admirados de las palabras llenas de gracia que salían de su boca. Y decían: «¿No es éste el hijo de José?»23El les dijo: «Seguramente me vais a decir el refrán: Médico, cúrate a ti mismo. Todo lo que hemos oído que ha sucedido en Cafarnaúm, hazlo también aquí en tu patria.»24Y añadió: «En verdad os digo que ningún profeta es bien recibido en su patria.»25«Os digo de verdad: Muchas viudas había en Israel en los días de Elías, cuando se cerró el cielo por tres años y seis meses, y hubo gran hambre en todo el país;26y a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda de Sarepta de Sidón.27Y muchos leprosos había en Israel en tiempos del profeta Eliseo, y ninguno de ellos fue purificado sino Naamán, el sirio.»28Oyendo estas cosas, todos los de la sinagoga se llenaron de ira;29y, levantándose, le arrojaron fuera de la ciudad, y le llevaron a una altura escarpada del monte sobre el cual estaba edificada su ciudad, para despeñarle.30Pero él, pasando por medio de ellos, se marchó.

domingo, 1 de septiembre de 2024

Lecturas 1 de Septiembre de 2024

 

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    Deuteronomio 4:1-2, 6-8

    1Y ahora, Israel, escucha los preceptos y las normas que yo os enseño para que las pongáis en práctica, a fin de que viváis y entréis a tomar posesión de la tierra que os da Yahveh, Dios de vuestros padres.2No añadireís nada a lo que yo os mando, ni quitaréis nada; para así guardar los mandamientos de Yahveh vuestro Dios que yo os prescribo.6Guardadlos y practicadlos, porque ellos son vuestra sabiduría y vuestra inteligencia a los ojos de los pueblos que, cuando tengan noticia de todos estos preceptos, dirán: «Cierto que esta gran nación es un pueblo sabio e inteligente.»7Y, en efecto, ¿hay alguna nación tan grande que tenga los dioses tan cerca como lo está Yahveh nuestro Dios siempre que le invocamos?8Y ¿cuál es la gran nación cuyos preceptos y normas sean tan justos como toda esta Ley que yo os expongo hoy?

  • Salmo Responsorial

    Salmo 15:2-5

    2El que ando sin tacha, y obra la justicia; que dice la verdad de corazón,3y no calumnia con su lengua; que no daña a su hermano, ni hace agravio a su prójimo;4con menosprecio mira al réprobo, mas honra a los que temen a Yahveh; que jura en su perjuicio y no retracta,5no presta a usura su dinero, ni acepta soborno en daño de inocente. Quien obra así jamás vacilará.

  • Segunda Lectura

    Santiago 1:17-18, 21-22, 27

    17toda dádiva buena y todo don perfecto viene de lo alto, desciende del Padre de las luces, en quien no hay cambio ni sombra de rotación.18Nos engendró por su propia voluntad, con Palabra de verdad, para que fuésemos como las primicias de sus criaturas.21Por eso, desechad toda inmundicia y abundancia de mal y recibid con docilidad la Palabra sembrada en vosotros, que es capaz de salvar vuestras almas.22Poned por obra la Palabra y no os contentéis sólo con oírla, engañándoos a vosotros mismos.27La religión pura e intachable ante Dios Padre es ésta: visitar a los huérfanos y a las viudas en su tribulación y conservarse incontaminado del mundo.

  • Evangelio

    Marcos 7:1-8, 14-15, 21-23

    1Se reúnen junto a él los fariseos, así como algunos escribas venidos de Jerusalén.2Y al ver que algunos de sus discípulos comían con manos impuras, es decir no lavadas,3- es que los fariseos y todos los judíos no comen sin haberse lavado las manos hasta el codo, aferrados a la tradición de los antiguos,4y al volver de la plaza, si no se bañan, no comen; y hay otras muchas cosas que observan por tradición, como la purificación de copas, jarros y bandejas -.5Por ello, los fariseos y los escribas le preguntan: «¿Por qué tus discípulos no viven conforme a la tradición de los antepasados, sino que comen con manos impuras?»6El les dijo: «Bien profetizó Isaías de vosotros, hipócritas, según está escrito: Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí.7En vano me rinden culto, ya que enseñan doctrinas que son preceptos de hombres.8Dejando el precepto de Dios, os aferráis a la tradición de los hombres.»14Llamó otra vez a la gente y les dijo: «Oídme todos y entended.15Nada hay fuera del hombre que, entrando en él, pueda contaminarle; sino lo que sale del hombre, eso es lo que contamina al hombre.21Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen las intenciones malas: fornicaciones, robos, asesinatos,22adulterios, avaricias, maldades, fraude, libertinaje, envidia, injuria, insolencia, insensatez.23Todas estas perversidades salen de dentro y contaminan al hombre.»