sábado, 3 de agosto de 2019

Lecturas 3 de Agosto de 2019

  • Primera lectura

    Levítico 25:1, 8-17
    1 Habló Yahveh a Moisés en el monte Sinaí diciendo:
    8 Contarás siete semanas de años, siete veces siete años; de modo que el tiempo de las siete semanas de años vendrá a sumar cuarenta y nueve años.
    9 Entonces en el mes séptimo, el diez del mes, harás resonar clamor de trompetas; en el día de la Expiación haréis resonar el cuerno por toda vuestra tierra.
    10 Declararéis santo el año cincuenta, y proclamaréis en la tierra liberación para todos sus habitantes. Será para vosotros un jubileo; cada uno recobrará su propiedad, y cada cual regresará a su familia.
    11 Este año cincuenta será para vosotros un jubileo: no sembraréis, ni segaréis los rebrotes, ni vendimiaréis la viña que ha quedado sin podar,
    12 porque es el jubileo, que será sagrado para vosotros. Comeréis lo que el campo dé de sí.
    13 En este año jubilar recobraréis cada uno vuestra propiedad.
    14 Si vendéis algo a vuestro prójimo o le compráis algo, ved que nadie dañe a su hermano.
    15 Comprarás a tu prójimo atendiendo el número de años que siguen al jubileo; u según el número de los años de cosecha, él te fijará el precio de venta:
    16 a mayor número de años, mayor precio cobrarás; cuantos menos años queden, tanto menor será su precio, porque lo que él te vende es el número de cosechas.
    17 Ninguno de vosotros dañe a su prójimo, antes bien teme a tu Dios; pues yo soy Yahveh vuestro Dios.
  • Salmo responsorial

    Salmo 67:2-3, 5, 7-8
    2 ¡Dios nos tenga piedad y nos bendiga, su rostro haga brillar sobre nosotros!
    3 Para que se conozcan en la tierra tus caminos, tu salvación entre todas las naciones.
    5 Alégrense y exulten las gentes, pues tú juzgaz al mundo con justicia, con equidad juzgas a los pueblos, y a las gentes en la tierra gobiernas.
    7 La tierra ha dado su cosecha: Dios, nuestro Dios, nos bendice.
    8 ¡Dios nos bendiga, y teman ante él todos los confines de la tierra!
  • Evangelio

    Mateo 14:1-12
    1 En aquel tiempo se enteró el tetrarca Herodes de la fama de Jesús,
    2 y dijo a sus criados: «Ese es Juan el Bautista; él ha resucitado de entre los muertos, y por eso actúan en él fuerzas milagrosas.»
    3 Es que Herodes había prendido a Juan, le había encadenado y puesto en la cárcel, por causa de Herodías, la mujer de su hermano Filipo.
    4 Porque Juan le decía: «No te es lícito tenerla.»
    5 Y aunque quería matarle, temió a la gente, porque le tenían por profeta.
    6 Mas llegado el cumpleaños de Herodes, la hija de Herodías danzó en medio de todos gustando tanto a Herodes,
    7 que éste le prometió bajo juramento darle lo que pidiese.
    8 Ella, instigada por su madre, «dame aquí, dijo, en una bandeja, la cabeza de Juan el Bautista».
    9 Entristecióse el rey, pero, a causa del juramento y de los comensales, ordenó que se le diese,
    10 y envió a decapitar a Juan en la cárcel.
    11 Su cabeza fue traída en una bandeja y entregada a la muchacha, la cual se la llevó a su madre.
    12 Llegando después sus discípulos, recogieron el cadáver y lo sepultaron; y fueron a informar a Jesús.

viernes, 2 de agosto de 2019

Lecturas 2 de Agosto de 2019

  • Primera lectura

    Eclesiástico 24:1-4, 16, 22-24
    1 La sabiduría hace su propio elogio, en medio de su pueblo, se gloría.
    2 En la asamblea del Altísimo abre su boca, delante de su poder se gloría.
    3 «Yo salí de la boca del Altísimo, y cubrí como niebla la tierra.
    4 Yo levanté mi tienda en las alturas, y mi trono era una columna de nube.
    16 Cual terebinto he alargado mis ramas, y mis ramas son ramas de gloria y de gracia.
    22 Quien me obedece a mí, no queda avergonzado, los que en mí se ejercitan, no llegan a pecar.»
    23 Todo esto es el libro de la alianza del Dios Altísimo, la Ley que nos prescribió Moisés como herencia para las asambleas de Jacob;
  • Salmo responsorial

    Salmo 34:5, 7, 9-10, 18-19
    5 He buscado a Yahveh, y me ha respondido: me ha librado de todos mis temores.
    7 Cuando el pobre grita, Yahveh oye, y le salva de todas sus angustias.
    9 Gustad y ved qué bueno es Yahveh, dichoso el hombre que se cobija en él.
    10 Temed a Yahveh vosotros, santos suyos, que a quienes le temen no les falta nada.
    18 Cuando gritan aquéllos, Yahveh oye, y los libra de todas sus angustias;
    19 Yahveh está cerca de los que tienen roto el corazón. él salva a los espíritus hundidos.
  • Segunda lectura

    Gálatas 4:3-7
    3 De igual manera, también nosotros, cuando éramos menores de edad, vivíamos como esclavos bajo los elementos del mundo.
    4 Pero, al llegar la plenitud de los tiempos, envió Dios a su Hijo, nacido de mujer, nacido bajo la ley,
    5 para rescatar a los que se hallaban bajo la ley, y para que recibiéramos la filiación adoptiva.
    6 La prueba de que sois hijos es que Dios ha enviado a nuestros corazones el Espíritu de su Hijo que clama: ¡Abbá, Padre!
    7 De modo que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero por voluntad de Dios.
  • Evangelio

    Lucas 1:26-33
    26 Al sexto mes fue enviado por Dios el ángel Gabriel a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret,
    27 a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María.
    28 Y entrando, le dijo: «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.»
    29 Ella se conturbó por estas palabras, y discurría qué significaría aquel saludo.
    30 El ángel le dijo: «No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios;
    31 vas a concebir en el seno y vas a dar a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús.
    32 El será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre;
    33 reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin.»

jueves, 1 de agosto de 2019

Lecturas 1 de Agosto de 2019

  • Primera lectura

    Éxodo 40:16-21, 34-38
    16 Moisés hizo todo conforme a lo que Yahveh le había mandado. Así lo hizo.
    17 En el primer mes del año segundo, el día primero del mes, fue alzada la Morada.
    18 Moisés alzó la Morada, asentó las basas, colocó sus tableros, metió sus travesaños y erigió sus postes.
    19 Después desplegó la Tienda por encima de la Morada y puso además por encima el toldo de la Tienda, como Yahveh había mandado a Moisés.
    20 Luego tomó el Testimonio y lo puso en el arca; puso al arca los varales y sobre ella colocó el propiciatorio en la parte superior.
    21 LLevó entonces el arca a la Morada, colgó el velo de protección y cubrió así el arca del Testimonio, como Yahveh había mandado a Moisés.
    34 La Nube cubrió entonces la Tienda del Encuentro y la gloria de Yahveh llenó la Morada.
    35 Moisés no podía entrar en la Tienda del Encuentro, pues la Nube moraba sobre ella y la gloria de Yahveh llenaba la Morada.
    36 En todas las marchas, cuando la Nube se elevaba de encima de la Morada, los israelitas levantaban el campamento.
    37 Pero si la Nube no se elevaba, ellos no levantaban el campamento, en espera del día en que se elevara.
    38 Porque durante el día la Nube de Yahveh estaba sobre la Morada y durante la noche había fuego a la vista de toda la casa de Israel. Así sucedía en todas sus marchas.
  • Salmo responsorial

    Salmo 84:3-6, 8, 11
    3 Anhela mi alma y languidece tras de los atrios de Yahveh, mi corazón y mi carne gritan de alegría hacia el Dios vivo.
    4 Hasta el pajarillo ha encontrado una casa, y para sí la golondrina un nido donde poner a sus polluelos: ¡Tus altares, oh Yahveh Sebaot, rey mío y Dios mío!
    5 Dichosos los que moran en tu casa, te alaban por siempre.
    6 Dichosos los hombres cuya fuerza está en ti, y las subidas en su corazón.
    8 De altura en altura marchan, y Dios se les muestra en Sión.
    11 Vale más un día en tus atrios que mil en mis mansiones, estar en el umbral de la Casa de mi Dios que habitar en las tiendas de impiedad.
  • Evangelio

    Mateo 13:47-53
    47 «También es semejante el Reino de los Cielos a una red que se echa en el mar y recoge peces de todas clases;
    48 y cuando está llena, la sacan a la orilla, se sientan, y recogen en cestos los buenos y tiran los malos.
    49 Así sucederá al fin del mundo: saldrán los ángeles, separarán a los malos de entre los justos
    50 y los echarán en el horno de fuego; allí será el llanto y el rechinar de dientes.
    51 «¿Habéis entendido todo esto?» Dícenle: «Sí.»
    52 Y él les dijo: «Así, todo escriba que se ha hecho discípulo del Reino de los Cielos es semejante al dueño de una casa que saca de sus arcas lo nuevo y lo viejo.»
    53 Y sucedió que, cuando acabó Jesús estas parábolas, partió de allí.

miércoles, 31 de julio de 2019

Lecturas 31 de Julio de 2019

  • Primera lectura

    I Corintios 10:31--11:1
    31 Por tanto, ya comáis, ya bebáis o hagáis cualquier otra cosa, hacedlo todo para gloria de Dios.
    32 No deis escándalo ni a judíos ni a griegos ni a la Iglesia de Dios;
    33 lo mismo que yo, que me esfuerzo por agradar a todos en todo, sin procurar mi propio interés, sino el de la mayoría, para que se salven.
    1 Sed mis imitadores, como lo soy de Cristo.
  • Salmo responsorial

    Salmo 34:2-11
    2 Bendeciré a Yahveh en todo tiempo, sin cesar en mi boca su alabanza;
    3 en Yahveh mi alma se gloría, ¡óiganlo los humildes y se alegren!
    4 Engrandeced conmigo a Yahveh, ensalcemos su nombre todos juntos.
    5 He buscado a Yahveh, y me ha respondido: me ha librado de todos mis temores.
    6 Los que miran hacia él, refulgirán: no habrá sonrojo en su semblante.
    7 Cuando el pobre grita, Yahveh oye, y le salva de todas sus angustias.
    8 Acampa el ángel de Yahveh en torno a los que le temen y los libra.
    9 Gustad y ved qué bueno es Yahveh, dichoso el hombre que se cobija en él.
    10 Temed a Yahveh vosotros, santos suyos, que a quienes le temen no les falta nada.
    11 Los ricos quedan pobres y hambrientos, mas los que buscan a Yahveh de ningún bien carecen.
  • Evangelio

    Lucas 14:25-33
    25 Caminaba con él mucha gente, y volviéndose les dijo:
    26 «Si alguno viene donde mí y no odia a su padre, a su madre, a su mujer, a sus hijos, a sus hermanos, a sus hermanas y hasta su propia vida, no puede ser discípulo mío.
    27 El que no lleve su cruz y venga en pos de mí, no puede ser discípulo mío.
    28 «Porque ¿quién de vosotros, que quiere edificar una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, y ver si tiene para acabarla?
    29 No sea que, habiendo puesto los cimientos y no pudiendo terminar, todos los que lo vean se pongan a burlarse de él, diciendo:
    30 "Este comenzó a edificar y no pudo terminar."
    31 O ¿qué rey, que sale a enfrentarse contra otro rey, no se sienta antes y delibera si con 10.000 puede salir al paso del que viene contra él con 20.000?
    32 Y si no, cuando está todavía lejos, envía una embajada para pedir condiciones de paz.
    33 Pues, de igual manera, cualquiera de vosotros que no renuncie a todos sus bienes, no puede ser discípulo mío.

martes, 30 de julio de 2019

Lecturas 30 de Julio de 2019

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    Éxodo 33:7-11; 34:5-9, 28
    7 Tomó Moisés la Tienda y la plantó para él a cierta distancia fuera del campamento; la llamó Tienda del Encuentro. De modo que todo el que tenía que consultar a Yahveh salía hacia la Tienda del Encuentro, que estaba fuera del campamento.
    8 Cuando salía Moisés hacia la Tienda, todo el pueblo se levantaba y se quedaba de pie a la puerta de su tienda, siguiendo con la vista a Moisés hasta que entraba en la Tienda.
    9 Y una vez entrado Moisés en la tienda, bajaba la columna de nube y se detenía a la puerta de la Tienda, mientras Yahveh hablaba con Moisés.
    10 Todo el pueblo veía la columna de nube detenida a la puerta de la Tienda y se levantaba el pueblo, y cada cual se postraba junto a la puerta de su tienda.
    11 Yahveh hablaba con Moisés cara a cara, como habla un hombre con su amigo. Luego volvía Moisés al campamento, pero su ayudante, el joven Josué, hijo de Nun, no se apartaba del interior de la Tienda.
    5 Descendió Yahveh en forma de nube y se puso allí junto a él. Moisés invocó el nombre de Yahveh.
    6 Yahveh pasó por delante de él y exclamó: «Yahveh, Yahveh, Dios misericordioso y clemente, tardo a la cólera y rico en amor y fidelidad,
    7 que mantiene su amor por millares, que perdona la iniquidad, la rebeldía y el pecado, pero no los deja impunes; que castiga la iniquidad de los padres en los hijos y en los hijos de los hijos hasta la tercera y cuarta generación.»
    8 Al instante, Moisés cayó en tierra de rodillas y se postró,
    9 diciendo: «Si en verdad he hallado gracia a tus ojos, oh Señor, dígnese mi Señor venir en medio de nosotros, aunque sea un pueblo de dura cerviz; perdona nuestra iniquidad y nuestro pecado, y recíbenos por herencia tuya.»
    28 Moisés estuvo allí con Yahveh cuarenta días y cuarenta noches, sin comer pan ni beber agua. Y escribió en las tablas las palabras de la alianza, las diez palabras.
  • Salmo responsorial

    Salmo 103:6-13
    6 Yahveh, el que hace obras de justicia, y otorga el derecho a todos los oprimidos,
    7 manifestó sus caminos a Moisés, a los hijos de Israel sus hazañas.
    8 Clemente y compasivo es Yahveh, tardo a la cólera y lleno de amor;
    9 no se querella eternamente ni para siempre guarda su rencor;
    10 no nos trata según nuestros pecados ni nos paga conforme a nuestras culpas.
    11 Como se alzan los cielos por encima de la tierra, así de grande es su amor para quienes le temen;
    12 tan lejos como está el oriente del ocaso aleja él de nosotros nuestras rebeldías.
    13 Cual la ternura de un padre para con sus hijos, así de tierno es Yahveh para quienes le temen;
  • Evangelio

    Mateo 13:36-43
    36 Entonces despidió a la multitud y se fue a casa. Y se le acercaron sus discípulos diciendo: «Explícanos la parábola de la cizaña del campo.»
    37 El respondió: «El que siembra la buena semilla es el Hijo del hombre;
    38 el campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del Reino; la cizaña son los hijos del Maligno;
    39 el enemigo que la sembró es el Diablo; la siega es el fin del mundo, y los segadores son los ángeles.
    40 De la misma manera, pues, que se recoge la cizaña y se la quema en el fuego, así será al fin del mundo.
    41 El Hijo del hombre enviará a sus ángeles, que recogerán de su Reino todos los escándalos y a los obradores de iniquidad,
    42 y los arrojarán en el horno de fuego; allí será el llanto y el rechinar de dientes.
    43 Entonces los justos brillarán como el sol en el Reino de su Padre. El que tenga oídos, que oiga.

lunes, 29 de julio de 2019

Lecturas 29 de Julio de 2019


Lecturas del día:

    Primera opción

  • Primera lectura

    Éxodo 32:15-24, 30-34
    15 Volvióse Moisés y bajó del monte, con las dos tablas del Testimonio en su mano, tablas escritas por ambos lados; por una y otra cara estaban escritas.
    16 Las tablas eran obra de Dios, y la escritura, grabada sobre las mismas, era escritura de Dios.
    17 Cuando Josué oyó la voz del pueblo que gritaba, dijo a Moisés: «Gritos de guerra en el campamento.»
    18 Respondió Moisés: «No son gritos de victoria, ni alarido de derrota. Cantos a coro es lo que oigo.»
    19 Cuando Moisés llegó cerca del campamento y vio el becerro y las danzas, ardió en ira, arrojó de su mano las tablas y las hizo añicos al pie del monte.
    20 Luego tomó el becerro que habían hecho, lo quemó y lo molió hasta redurcirlo a polvo, que esparció en el agua, y se lo dio a beber a los israelitas.
    21 Y dijo Moisés a Aarón: «¿Qué te hizo este pueblo para que hayas traído sobre él tan gran pecado?»
    22 Aarón respondió: «No se encienda la ira de mi señor. Tú mismo sabes que este pueblo es inclinado al mal.
    23 Me dijeron: "Haznos un dios que vaya delante de nosotros, ya que no sabemos qué le ha sucedido a Moisés, el hombre que nos sacó de la tierra de Egipto."
    24 Yo les contesté: "El que tenga oro despréndase." Ellos se lo quitaron y me lo dieron; yo lo eché al fuego y salió este becerro.»
    30 Al día siguiente dijo Moisés al pueblo: «Habéis cometido un gran pecado. Yo voy a subir ahora donde Yahveh; acaso pueda obtener la expiación de vuestro pecado.»
    31 Volvió Moisés donde Yahveh y dijo: «¡Ay! Este pueblo ha cometido un gran pecado al hacerse un dios de oro.
    32 Con todo, si te dignas perdonar su pecado..., y si no, bórrame del libro que has escrito.»
    33 Yahveh respondió a Moisés: Al que peque contra mí, le borraré yo de mi libro.
    34 Ahora ve y conduce al pueblo adonde te he dicho. He aquí que mi ángel irá delante de ti, mas en el día de mi visita los castigaré yo por su pecado.»
  • Salmo responsorial

    Salmo 106:19-23
    19 En Horeb se fabricaron un becerro, se postraron ante un metal fundido,
    20 y cambiaron su gloria por la imagen de un buey que come heno.
    21 Olvidaban a Dios que les salvaba, al autor de cosas grandes en Egipto,
    22 de prodigios en el país de Cam, de portentos en el mar de Suf.
    23 Hablaba ya de exterminarlos, si no es porque Moisés, su elegido, se mantuvo en la brecha en su presencia, para apartar su furor de destruirlos.
  • Evangelio

    Juan 11:19-27
    19 y muchos judíos habían venido a casa de Marta y María para consolarlas por su hermano.
    20 Cuando Marta supo que había venido Jesús, le salió al encuentro, mientras María permanecía en casa.
    21 Dijo Marta a Jesús: «Señor, si hubieras estado aquí, no habría muerto mi hermano.
    22 Pero aun ahora yo sé que cuanto pidas a Dios, Dios te lo concederá.»
    23 Le dice Jesús: «Tu hermano resucitará.»
    24 Le respondió Marta: «Ya sé que resucitará en la resurrección, el último día.»
    25 Jesús le respondió: «Yo soy la resurrección El que cree en mí, aunque muera, vivirá;
    26 y todo el que vive y cree en mí, no morirá jamás. ¿Crees esto?»
    27 Le dice ella: «Sí, Señor, yo creo que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, el que iba a venir al mundo.»