sábado, 12 de abril de 2014

Evangelio 12 de Abril de 2014

  • Primera Lectura: Ezequiel 37,21-28
    "Los haré un solo pueblo"
    Así dice el Señor: "Yo voy a recoger a los israelitas por las naciones adonde marcharon, voy a congregarlos de todas partes y los voy a repatriar. Los haré un solo pueblo en su país, en los montes de Israel, y un solo rey reinará sobre todos ellos. No volverán a ser dos naciones ni a desmembrarse en dos monarquías. No volverán a contaminarse con sus ídolos y fetiches y con todos sus crímenes. Los libraré de sus pecados y prevaricaciones, los purificaré: ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios. Mi siervo David será su rey, el único pastor de todos ellos. Caminarán según mis mandatos y cumplirán mis preceptos, poniéndolos por obra.
    Habitarán en la tierra que le di a mi siervo Jacob, en la que habitaron vuestros padres; allí vivirán para siempre, ellos y sus hijos y sus nietos; y mi siervo David será su príncipe para siempre. Haré con ellos una alianza de paz, alianza eterna pactaré con ellos. Los estableceré, los multiplicaré y pondré entre ellos mi santuario para siempre; tendré mi morada junto a ellos, yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Y sabrán las naciones que yo soy el Señor que consagra a Israel, cuando esté entre ellos mi santuario para siempre."
  • Salmo Responsorial: 31
    "El Señor nos guardará como un pastor a su rebaño."
    Escuchad, pueblos, la palabra del Señor, / anunciadla en las islas remotas: / "El que dispersó a Israel lo reunirá, / lo guardará como un pastor a su rebaño." R.
    Porque el Señor redimió a Jacob, / lo rescató de una mano más fuerte. / Vendrán con aclamaciones a la altura de Sión, / afluirán hacia los bienes del Señor. R.
    Entonces se alegrará la doncella en la danza, / gozarán los jóvenes y los viejos; / convertiré su tristeza en gozo, / los alegraré y aliviaré sus penas. R.
  • Evangelio: Juan 11,45-57
    "Para reunir a los hijos de Dios dispersos"
    En aquel tiempo, muchos judíos que habían venido a casa de María, al ver lo que había hecho Jesús, creyeron en él. Pero algunos acudieron a los fariseos y les contaron lo que había hecho Jesús. Los sumos sacerdotes y los fariseos convocaron el Sanedrín y dijeron: "¿Qué hacemos? Este hombre hace muchos signos. Si lo dejamos seguir, todos creerán en él, y vendrán los romanos y nos destruirán el lugar santo y la nación." Uno de ellos, Caifás, que era sumo sacerdote aquel año, les dijo: "Vosotros no entendéis ni palabra; no comprendéis que os conviene que uno muera por el pueblo, y que no perezca la nación entera." Esto no lo dijo por propio impulso, sino que, por ser sumo sacerdote aquel año, habló proféticamente, anunciando que Jesús iba a morir por la nación; y no sólo por la nación, sino también para reunir a los hijos de Dios dispersos.
    Y aquel día decidieron darle muerte. Por eso Jesús ya no andaba públicamente con los judíos, sino que se retiró a la región vecina al desierto, a una ciudad llamada Efraín, y pasaba allí el tiempo con los discípulos. Se acercaba la Pascua de los judíos, y muchos de aquella región subían a Jerusalén, antes de la Pascua, para purificarse. Buscaban a Jesús y, estando en el templo, se preguntaban: "¿Qué os parece? ¿No vendrá a la fiesta?" Los sumos sacerdotes y fariseos habían mandado que el que se enterase de dónde estaba les avisara para prenderlo.

El Papa Francisco reafirma derecho de los niños a tener padre y madre

Foto ACI Prensa
Foto ACI Prensa
VATICANO, 11 Abr. 14 / 11:28 am (ACI).- El Papa Francisco dijo hoy es que necesario reafirmar el derecho que tiene todo niño a crecer en unafamilia y a tener papá y mamá, que sean capaces de crear un ambiente idóneo para su desarrollo y madurez afectiva.
Así lo indicó al recibir a una delegación de la Oficina Internacional Católica de la Infancia (BICE), instituida tras la intervención del Papa Pío XII en defensa de los niños al terminar la Segunda Guerra Mundial.
En su discurso, el Santo Padre resaltó que “en nuestros días es importante llevar adelante los proyectos contra el trabajo esclavo, contra el reclutamiento de niños soldados y cualquier tipo de violencia sobre los menores”.
“Dicho en positivo –continuó– es preciso reafirmar el derecho de los niños a crecer en una familia, con un padre y una madre capaces de crear un ambiente idóneo para su desarrollo y su madurez afectiva. Seguir madurando en relación, en confrontación, con lo que es la masculinidad y la feminidad de un padre y una madre, y así armando su madurez afectiva''.
''Esto comporta al mismo tiempo apoyar el derecho de los padres a la educación moral y religiosa de sus hijos. Y en este punto quisiera manifestar mi rechazo a todo tipo de experimentación educativa con los chicos. Con los niños y jóvenes no se puede experimentar. No son cobayas de laboratorio”.
El Santo Padre resaltó asimismo que “los horrores de la manipulación educativa que hemos vivido en las grandes dictaduras genocidas del siglo XX no han desaparecido; conservan su actualidad bajo ropajes diversos y propuestas que, con pretensión de modernidad, fuerzan a caminar a niños y jóvenes por el camino dictatorial del ‘pensamiento único’”.
En este discurso, el Santo Padre también reiteró el pedido de perdón por los abusos sexuales cometidos por algunos miembros del clero y sostuvo que “no vamos a dar un paso atrás en lo que se refiere al tratamiento de estos problemas y las sanciones que se deben poner”.

viernes, 11 de abril de 2014

Evangelio 11 de Abril de 2014

  • Primera Lectura: Jeremías 20,10-13
    "El Señor está conmigo, como fuerte soldado"
    Oía el cuchicheo de la gente: "Pavor en torno; delatadlo, vamos a delatarlo." Mis amigos acechaban mi traspié: "A ver si se deja seducir, y lo abatiremos, lo cogeremos y nos vengaremos de él."
    Pero el Señor está conmigo, como fuerte soldado; mis enemigos tropezarán y no podrán conmigo. Se avergonzarán de su fracaso con sonrojo eterno que no se olvidará. Señor de los ejércitos, que examinas al justo y sondeas lo íntimo del corazón, que yo vea la venganza que tomas de ellos, porque a ti encomendé mi causa. Cantad al Señor, alabad al Señor, que libró la vida del pobre de manos de los impíos.
  • Salmo Responsorial: 17
    "En el peligro invoqué al Señor, y me escuchó."
    Yo te amo, Señor; tú eres mi fortaleza; / Señor, mi roca, mi alcázar, mi libertador. R.
    Dios mío, peña mía, refugio mío, escudo mío, / mi fuerza salvadora, mi baluarte. / Invoco al Señor de mi alabanza / y quedo libre de mis enemigos. R.
    Me cercaban olas mortales, / torrentes destructores me aterraban, / me envolvían las redes del abismo, / me alcanzaban los lazos de la muerte. R.
    En el peligro invoqué al Señor, / grité a mi Dios: / desde su templo él escuchó mi voz, / y mi grito llegó a sus oídos. R.
  • Evangelio: Juan 10,31-42
    "Intentaron detenerlo, pero se les escabulló de las manos"
    En aquel tiempo, los judíos agarraron piedras para apedrear a Jesús. Él les replicó: "Os he hecho ver muchas obras buenas por encargo de mi Padre: ¿por cuál de ellas me apedreáis?" Los judíos le contestaron: "No te apedreamos por una obra buena, sino por una blasfemia: porque tú, siendo un hombre, te haces Dios." Jesús les replicó: "¿No está escrito en vuestra ley: "Yo os digo: Sois dioses"? Si la Escritura llama dioses a aquellos a quienes vino la palabra de Dios (y no puede fallar la Escritura), a quien el Padre consagró y envió al mundo, ¿decís vosotros que blasfema porque dice que es hijo de Dios? Si no hago las obras de mi Padre, no me creáis, pero si las hago, aunque no me creáis a mí, creed a las obras, para que comprendáis y sepáis que el Padre está en mí, y yo en el Padre."
    Intentaron de nuevo detenerlo, pero se les escabulló de las manos. Se marchó de nuevo al otro lado del Jordán, al lugar donde antes había bautizado Juan, y se quedó allí. Muchos acudieron a él y decían: "Juan no hizo ningún signo; pero todo lo que Juan dijo de éste era verdad." Y muchos creyeron en él allí.

Corte prohíbe servicios religiosos en escuelas públicas de Nueva York

Jordan Lorence. Foto: Alliance Defending Freedom
Jordan Lorence. Foto: Alliance Defending Freedom
NUEVA YORK, 11 Abr. 14 / 08:17 am (ACI/EWTN Noticias).- Un tribunal federal de apelaciones decidió prohibir que las escuelas públicas de Nueva York puedan ser usadas para servicios religiosos.
Jordan Lorence, abogado de Alliance Defending Freedom (Alianza en Defensa de la Libertad) rechazó la decisión y recordó que “la Primera Enmienda prohíbe a la ciudad de Nueva York tener un trato diferente hacia los servicios religiosos y excluirlos de las escuelas públicas”.
Con la decisión de la Corte, las pequeñas comunidades de distintas denominaciones cristianas ya no podrán celebrar sus servicios en los locales escolares que –en comparación con otros establecimientos- son ofrecidos en alquiler con tarifas económicas.
Asimismo, recordó que estos locales públicos están “generalmente disponibles para todas las personas y comunidades” que realicen actividades relacionadas con el bienestar de la comunidad y por esta razón, las agrupaciones religiosas no deberían ser excluidas.
Dos de los tres jueces del Segundo Circuito de Cortes de Apelaciones de Estados Unidos anularon la decisión de un tribunal menor que permitió el uso de las escuelas públicas para servicios religiosos.
El juez disidente indicó que de los 50 distritos escolares más grandes de Estados Unidos, Nueva York es ahora el único que excluye los servicios religiosos de los locales educativos.
Un informe de The New York Times señaló que las pequeñas iglesias evangélicas de los barrios más pobres de la ciudad son las más afectadas con la decisión.
Donna Lieberman, directora ejecutiva de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles de Nueva York, saludó la decisión judicial porque –según afirma- las congregaciones religiosas estaban “dominando” las escuelas públicas cada domingo.
Sin embargo, Lorence aclaró que “aquí no existen subsidios para iglesias. Las iglesias y comunidades religiosas pagan la misma tarifa que cualquiera que utilice las escuelas”.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, a diferencia de su predecesor Michael Bloomberg, se opsuo a esta prohibición. “Mantengo mi posición de que una organización religiosa merece tener los mismos dictámenes que cualquier comunidad sin fines de lucro, ya que, juegan un rol clave en términos de brindar importantes servicios sociales y comunitarios. Creo que se merecen ese derecho”, indicó.
Al menos una comunidad cristiana ha informado que apelará la decisión de la corte.

jueves, 10 de abril de 2014

Evangelio 10 de Abril de 2014

  • Primera Lectura: Génesis 17,3-9
    "Serás padre de muchedumbre de pueblos"
    En aquellos días, Abrán cayó de bruces, y Dios le dijo: "Mira, éste es mi pacto contigo: Serás padre de muchedumbre de pueblos. Ya no te llamarás Abrán, sino que te llamarás Abrahán, porque te hago padre de muchedumbre de pueblos. Te haré crecer sin medida, sacando pueblos de ti, y reyes nacerán de ti. Mantendré mi pacto contigo y con tu descendencia en futuras generaciones, como pacto perpetuo. Seré tu Dios y el de tus descendientes futuros. Os daré a ti y a tu descendencia futura la tierra en que peregrinas, la tierra de Canaán, como posesión perpetua, y seré su Dios."
    Dios añadió a Abrahán: "Tú guarda mi pacto, que hago contigo y tus descendientes por generaciones."
  • Salmo Responsorial: 104
    "El Señor se acuerda de su alianza eternamente."
    Recurrid al Señor y a su poder, / buscad continuamente su rostro. / Recordad las maravillas que hizo, / sus prodigios, las sentencias de su boca. R.
    ¡Estirpe de Abrahán, su siervo; / hijos de Jacob, su elegido! / El Señor es nuestro Dios, / él gobierna toda la tierra. R.
    Se acuerda de su alianza eternamente, / de la palabra dada, por mil generaciones; / de la alianza sellada con Abrahán, / del juramento hecho a Isaac. R.
  • Evangelio: Juan 8,51-59
    "Abrahán, vuestro padre, saltaba de gozo pensando ver mi día"
    En aquel tiempo, dijo Jesús a los judíos: "Os aseguro: quien guarda mi palabra no sabrá lo que es morir para siempre." Los judíos le dijeron: "Ahora vemos claro que estás endemoniado; Abrahán murió, los profetas también, ¿y tú dices: "Quien guarde mi palabra no conocerá lo que es morir para siempre"? ¿Eres tú más que nuestro padre Abrahán, que murió? También los profetas murieron, ¿por quién te tienes?"
    Jesús contestó: "Si yo me glorificara a mí mismo, mi gloria no valdría nada. El que me glorifica es mi Padre, de quien vosotros decís: "Es nuestro Dios", aunque no lo conocéis. Yo sí lo conozco, y si dijera: "No lo conozco" sería, como vosotros, un embustero; pero yo lo conozco y guardo su palabra. Abrahán, vuestro padre, saltaba de gozo pensando ver mi día; lo vio, y se llenó de alegría." Los judíos le dijeron: "No tienes todavía cincuenta años, ¿y has visto a Abrahán?" Jesús les dijo: "Os aseguro que antes que naciera Abrahán, existo yo." Entonces cogieron piedras para tirárselas, pero Jesús se escondió y salió del templo.

[VIDEO] ¡Tú también eres único!: La sorpresiva respuesta del Papa Francisco a un fiel en San Pedro

VATICANO, 09 Abr. 14 / 03:26 pm (ACI).- Con la frescura y la espontaneidad que lo caracterizan, el Papa Francisco sorprendió hoy con su respuesta a un peregrino en la Plaza de San Pedro durante la audiencia general de este miércoles.
En italiano, uno de los más de 80 mil fieles presentes en la audiencia general, le dice en dos ocasiones al Santo Padre mientras hacía su habitual recorrido antes de llegar al atrio de la Basílica de San Pedro: “Sei unico Francesco!” (¡Eres único Francisco!)
El Santo Padre, sonriente mientras saludaba a algunos niños y atento a lo que ocurre a su alrededor, le contesta “Anche te. Anche te sei unico! Non ci sono due come te” (También tú. ¡Tú también eres único! No hay dos como tú).
Este miércoles el Papa Francisco inició un nuevo ciclo de reflexiones dedicadas al Espíritu Santo. En la de hoy explicó que la sabiduría, uno de los siete dones del Espíritu Santo, es la gracia que le permite a la persona ver todo con los ojos de Dios.

miércoles, 9 de abril de 2014

Evangelio 9 de Abril de 2014

  • Primera Lectura: Daniel 3,14-20.91-92.95
    "Envió un ángel a salvar a sus siervos"
    En aquellos días, el rey Nabucodonosor dijo: "¿Es cierto, Sidrac, Misac y Abdénago, que no respetáis a mis dioses ni adoráis la estatua de oro que he erigido? Mirad: si al oír tocar la trompa, la flauta, la cítara, el laúd, el arpa, la vihuela y todos los demás instrumentos, estáis dispuestos a postraros adorando la estatua que he hecho, hacedlo; pero, si no la adoráis, seréis arrojados al punto al horno encendido, y ¿qué dios os librará de mis manos?" Sidrac, Misac y Abdénago contestaron: "Majestad, a eso no tenemos por qué responder. El Dios a quien veneramos puede librarnos del horno encendido y nos librará de tus manos. Y aunque no lo haga, conste, majestad, que no veneramos a tus dioses ni adoramos la estatua de oro que has erigido."
    Nabucodonosor, furioso contra Sidrac, Misac y Abdénago, y con el rostro desencajado por la rabia, mandó encender el horno siete veces más fuerte que de costumbre, y ordenó a sus soldados más robustos que atasen a Sidrac, Misac y Abdénago y los echasen en el horno encendido. El rey los oyó cantar himnos; extrañado, se levantó y, al verlos vivos, preguntó, estupefacto, a sus consejeros: "¿No eran tres los hombres que atamos y echamos al horno?" Le respondieron: "Así es, majestad." Preguntó: "¿Entonces, cómo es que veo cuatro hombres, sin atar, paseando por el horno sin sufrir nada? Y el cuarto parece un ser divino."
    Nabucodonosor entonces dijo: "Bendito sea el Dios de Sidrac, Misac y Abdénago, que envió un ángel a salvar a sus siervos que, confiando en él, desobedecieron el decreto real y prefirieron arrostrar el fuego antes que venerar y adorar otros dioses que el suyo."
  • Interleccional: A ti gloria y alabanza por los siglos. 
    Daniel 3

    Bendito eres, Señor, Dios de nuestros padres, / bendito tu nombre santo y glorioso. R.
    Bendito eres en el templo de tu santa gloria. R.
    Bendito eres sobre el trono de tu reino. R.
    Bendito eres tú, que sentado sobre querubines / sondeas los abismos. R.
    Bendito eres en la bóveda del cielo. R.
  • Evangelio: Juan 8,31-42
    "Si el Hijo os hace libres, seréis realmente libres"
    En aquel tiempo, dijo Jesús a los judíos que habían creído en él: "Si os mantenéis en mi palabra, seréis de verdad discípulos míos; conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres." Le replicaron: "Somos linaje de Abrahán y nunca hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: "Seréis libres"?" Jesús les contestó: "Os aseguro que quien comete pecado es esclavo. El esclavo no se queda en la casa para siempre, el hijo se queda para siempre. Y si el Hijo os hace libres, seréis realmente libres. Ya sé que sois linaje de Abrahán; sin embargo, tratáis de matarme, porque no dais cabida a mis palabras. Yo hablo de lo que he visto junto a mi Padre, pero vosotros hacéis lo que le habéis oído a vuestro padre."
    Ellos replicaron: "Nuestro padre es Abrahán." Jesús les dijo: "Si fuerais hijos de Abrahán, haríais lo que hizo Abrahán. Sin embargo, tratáis de matarme a mí, que os he hablado de la verdad que le escuché a Dios, y eso no lo hizo Abrahán. Vosotros hacéis lo que hace vuestro padre." Le replicaron: "Nosotros no somos hijos de prostitutas; tenemos un solo padre: Dios." Jesús les contestó: "Si Dios fuera vuestro padre, me amaríais, porque yo salí de Dios, y aquí estoy. Pues no he venido por mi cuenta, sino que él me envió."

Pintas blasfemas en un monasterio católico en Israel

Foto: Patriarcado Latino de Jerusalén
Foto: Patriarcado Latino de Jerusalén
JERUSALÉN, 08 Abr. 14 / 10:09 pm (ACI/EWTN Noticias).- El martes 1 de abril, dos vándalos desconocidos dejaron unas pintas blasfemas en las paredes del monasterio católico de Deir Rafat, cerca de la ciudad de Beit Shemesh, en el centro de Israel.
Las religiosas del monasterio, perteneciente a la familia monástica de Belén, de la Asunción de la Virgen María y San Bruno, confirmaron a la agencia vaticana Fides que entre las pintadas escritas en hebreo, algunas expresan “frases blasfemas contra Jesús y la Virgen María”. Otras piden “venganza” y acusan de “nazismo” a Alemania y los Estados Unidos. Incluso algunos coches estacionados en la zona fueron objeto del vandalismo y les reventaron los neumáticos.
El vandalismo sufrido por el monasterio de Deir Rafat es el último episodio de una serie de actos de intimidación cometidos contra los monasterios cristianos desde febrero de 2012. En varias ocasiones, firmando con las palabras “el precio a pagar”, grupos extremistas cercanos al movimiento de los colonos efectuaron ataques contra lugares de culto- iglesias y mezquitas- frecuentados por la población árabe.
Ya antes de estos últimos ataques, Mons. William Shomali, Vicario del Patriarcado de Jerusalén de los Latinos, había expresado la urgente necesidad de combatir estas formas de intimidación no sólo en términos de investigaciones y medidas policiales, sino también “con la promoción de una mejor educación en las escuelas”, afirmando su convicción de que “es un proceso a largo plazo” y que “hará falta mucha paciencia”.

martes, 8 de abril de 2014

Evangelio 8 de Abril de 2014

  • Primera Lectura: Números 21,4-9
    "Los mordidos de serpientes quedarán sanos al mirar a la serpiente de bronce"
    En aquellos días, desde el monte Hor se encaminaron los hebreos hacia el mar Rojo, rodeando el territorio de Edom. El pueblo estaba extenuado del camino, y habló contra Dios y contra Moisés: "¿Por qué nos has sacado de Egipto para morir en el desierto? No tenemos ni pan ni agua, y nos da náusea ese pan sin cuerpo." El Señor envió contra el pueblo serpientes venenosas, que los mordían, y murieron muchos israelitas. Entonces el pueblo acudió a Moisés, diciendo: "Hemos pecado hablando contra el Señor y contra ti; reza al Señor para que aparte de nosotros las serpientes." Moisés rezó al Señor por el pueblo, y el Señor le respondió: "Haz una serpiente venenosa y colócala en un estandarte: los mordidos de serpientes quedarán sanos al mirarla." Moisés hizo una serpiente de bronce y la colocó en un estandarte. Cuando una serpiente mordía a uno, él miraba a la serpiente de bronce y quedaba curado.
  • Salmo Responsorial: 101
    "Señor, escucha mi oración, que mi grito llegue hasta ti."
    Señor, escucha mi oración, / que mi grito llegue hasta ti; / no me escondas tu rostro / el día de la desgracia. / Inclina tu oído hacia mí; / cuando te invoco, escúchame en seguida. R.
    Los gentiles temerán tu nombre, / los reyes del mundo, tu gloria. / Cuando el Señor reconstruya Sión / y aparezca en su gloria, / y se vuelva a las súplicas de los indefensos, / y no desprecie sus peticiones. R.
    Quede esto escrito para la generación futura, / y el pueblo que será creado alabará al Señor. / Que el Señor ha mirado desde su excelso santuario, / desde el cielo se ha fijado en la tierra, / para escuchar los gemidos de los cautivos / y librar a los condenados a muerte. R.
  • Evangelio: Juan 8,21-30
    "Cuando levantéis al Hijo del hombre, sabréis que yo soy"
    En aquel tiempo, dijo Jesús a los fariseos: "Yo me voy y me buscaréis, y moriréis por vuestro pecado. Donde yo voy no podéis venir vosotros." Y los judíos comentaban: "¿Será que va a suicidarse, y por eso dice: "Donde yo voy no podéis venir vosotros"?" Y él continuaba: "Vosotros sois de aquí abajo, yo soy de allá arriba: vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo. Con razón os he dicho que moriréis por vuestros pecados: pues, si no creéis que yo soy, moriréis por vuestros pecados."
    Ellos le decían: "¿Quién eres tú?" Jesús les contestó: "Ante todo, eso mismo que os estoy diciendo. Podría decir y condenar muchas cosas en vosotros; pero el que me envió es veraz, y yo comunico al mundo lo que he aprendido de él." Ellos no comprendieron que les hablaba del Padre. Y entonces dijo Jesús: "Cuando levantéis al Hijo del hombre, sabréis que yo soy, y que no hago nada por mi cuenta, sino que hablo como el Padre me ha enseñado. El que me envió está conmigo, no me ha dejado solo; porque yo hago siempre lo que le agrada." Cuando les exponía esto, muchos creyeron en él.

[VIDEO] Buscan silenciar a la Iglesia sobre aborto y “matrimonio” gay, denuncia Cardenal Cipriani

LIMA, 07 Abr. 14 / 01:10 pm (ACI/EWTN Noticias).- El Arzobispo de Lima y Primado del Perú, Cardenal Juan Luis Cipriani, denunció el intento de quienes, argumentando una falsa tolerancia, buscan silenciar la voz de la Iglesia en el debate sobre la legalización del aborto y el mal llamado “matrimonio” gay.
En la edición del 5 de abril del programa radial Diálogo de Fe, el Cardenal Juan Luis Cipriani recordó que “se intentó en tantas épocas de la historia silenciar la voz de la Iglesia” y apuntó a que en la actualidad, con la tendencia del laicismo “en el fondo es decirle a la Iglesia: ‘Usted no intervenga en los asuntos relativos a la vida y al comportamiento de los ciudadanos’”.
El Cardenal criticó que los laicistas dicen “además ‘no quiero que hable usted, señor Cardenal, en nombre de la tolerancia cállese la boca’. Ni Cantinflas en una buena película hubiera hecho una afirmación igual”.
“Hoy me comparan con Hitler. Realmente hace falta mucha creatividad. Creo que desde algún lugar hay como una indicación: ‘Hay que silenciar a la Iglesia frente a una visión religiosa del ser humano’”.
El Arzobispo de Lima, que recientemente convocó a más de 250 mil personas en la capital de Perú para manifestar su apoyo a la defensa de la vida, lamentó que tras su llamado a que la ciudadanía peruana sea quien decida sobre la aprobación del aborto y el “matrimonio” gay, “lo que he escuchado ha sido un griterío para decir que la Iglesia no hable. Creo que es un error muy grande”.
“Todo ser humano tiene una dimensión religiosa: Ama a Dios, viene de Dios, ama al prójimo. En esta vida que se pretende imponer hay una selección y dicen ‘Dios a la sacristía, Dios a la oscuridad de tu conciencia, no hay lugar para Dios’”.
El Cardenal Cipriani señaló que “hay que reconocer que existe una libertad. Pero qué viene primero: ¿la libertad o la vida? Si no hay vida no hay libertad. Cuando hablamos del aborto estamos hablando del derecho a la vida, el primer derecho”.
“Hay que aprender, si queremos ser una sociedad plural, tolerante, democrática, entonces no tengamos tanto temor a escuchar que hay un plan de Dios. Como lo dice el comunicado de la Conferencia Episcopal del Perú en el caso de la unión civil entre personas del mismo sexo”.
El Arzobispo peruano remarcó que en el comunicado de la CEP, “claramente manifestamos que va en contra de esa ley natural, de ese orden natural, de esa verdadera identidad. Damos nuestra posición como Iglesia Católica, en un país donde hay una mayoría que sigue las enseñanzas de la Iglesia Católica”.
“No estamos impidiendo el libre juego de la política, pero también en el Congreso hay una gran mayoría de miembros cuyas vidas están organizadas alrededor de unos valores de la persona y de la sociedad. Han sido elegidos por el pueblo y tienen el derecho de expresar esos valores”.
“Por eso cuando se pretende descalificar la enseñanza de los obispos, la enseñanza de la Iglesia Católica sobre un tema muy claro: El matrimonio es de un hombre con una mujer. Se ha visto en el mundo entero que lo que se pretende es abrir la puerta para acabar fabricando el matrimonio dehomosexuales”, indicó.
Ante el rechazo de los promotores del aborto y del “matrimonio” gay a la posibilidad de que el pueblo peruano se exprese sobre estos temas a través de un referéndum, amparado por la Constitución, el Cardenal dijo que “no se entiende cómo a los demócratas les molesta mucho la expresión del pueblo. Democracia es la expresión del pueblo que con sus mayorías establece verdades legales".
El Arzobispo de Lima también advirtió sobre la crisis de la democracia, y señaló que sobre esta “debe haber unos valores comunes: respeto por la vida, respeto a la libertad de opinión, respeto a la libertad religiosa, aspectos comunes a una variedad de opiniones”.
“Qué hacemos cuando la democracia dice ‘Está permitido fumar marihuana, consumir droga’. Qué hacemos cuando la democracia dice en algún país ‘Se puede matar a los niños ya vivos’, la eutanasia de niños en Bélgica. Qué hacemos cuando se puede convalidar el poder democráticamente en Venezuela y tener un señor como Maduro masacrando a todos, qué hacemos ante esa crisis”, cuestionó.
El Cardenal Cipriani reiteró que “la Iglesia enseña que la institución del matrimonio es de un hombre con una mujer, que es una unión indisoluble con vistas a la procreación del género humano. Esos padres tienen la obligación de enseñar y transmitir la fe y los modales a sus hijos”.
A las personas homosexuales, indicó el Arzobispo, “la Iglesia irá a buscarlo, a enseñarle, a ayudarlo; simplemente no se le puede decir al ordenamiento jurídico que todo tipo de uniones tienen como esa característica del matrimonio”.
“El Papa dijo con claridad unas palabras. Tenemos que decirle a la gente que tiene esa opción homosexual que no es la opción correcta, no tenemos temor. No los despreciamos, no los sacamos de la sociedad, pero tenemos que conducirlos al camino de respetar el orden natural. Cuando se habla de que es un progreso de la modernidad esa opción libre, yo diría no es un progreso, es una señal de la situación de la sociedad contemporánea”.
Una sana laicidad del Estado, apuntó el Cardenal, “no quiere decir silencio, no quiere decir no tengo una opinión”.
“Quien se considera miembro de la Iglesia acepta un concepto orgánico que está en el Catecismo de la Iglesia Católica, quien no acepta esos planteamientos se considera fuera de la Iglesia Católica. Ser de la Iglesia no es como ser socio de un club deportivo, es ser responsable y respetable de unos principios que están contenidos en el Catecismo de la Iglesia Católica”.
“En un país que quiere progresar hay que saber discrepar en paz, hay que saber conversar sin insultar. Lo que he visto de gente que consideraba más o menos capaz alternar insultos. Uno puede discrepar pero no insulta a una persona con nombres y apellidos. En nombre de la libertad de expresión hay que saber tener más altura y profundidad”, señaló.

lunes, 7 de abril de 2014

Evangelio 7 de Abril de 2014

  • Primera Lectura: Daniel 13,1-9.15-17.19-30.33-62
    "Ahora tengo que morir, siendo inocente"
    En aquellos días, [vivía en Babilonia un hombre llamado Joaquín, casado con Susana, hija de Jelcías, mujer muy bella y religiosa. Sus padres eran honrados y habían educado a su hija según la ley de Moisés. Joaquín era muy rico y tenía un parque junto a su casa; como era el más respetado de todos, los judíos solían reunirse allí. Aquel año fueron designados jueces dos ancianos del pueblo, de esos que el Señor denuncia diciendo: "En Babilonia la maldad ha brotado de los viejos jueces, que pasan por guías del pueblo." Solían ir a casa de Joaquín, y los que tenían pleitos que resolver acudían a ellos. A mediodía, cuando la gente se marchaba, Susana salía a pasear por el parque de su marido. Los dos ancianos la veían a diario, cuando salía a pasear en el parque, y se enamoraron de ella. Pervirtieron su corazón y desviaron los ojos, para no mirar a Dios ni acordarse de sus justas leyes.
    Un día, mientras acechaban ellos el momento oportuno, salió ella como de ordinario, sola con dos criadas, y tuvo ganas de bañarse en el parque, porque hacía mucho calor. Y no había nadie allí, fuera de los dos ancianos escondidos y acechándola. Susana dijo a las criadas: "Traedme el perfume y las cremas y cerrad la puerta del parque mientras me baño." Apenas salieron las criadas, se levantaron los dos ancianos, corrieron hacia ella y le dijeron: "Las puertas del parque están cerradas, nadie nos ve, y nosotros estamos enamorados de ti; consiente y acuéstate con nosotros. Si no, daremos testimonio contra ti diciendo que un joven estaba contigo y que por eso habías despachado a las criadas." Susana lanzó un gemido y dijo: "No tengo salida: si hago eso, seré rea de muerte; si no lo hago, no escaparé de vuestras manos. Pero prefiero no hacerlo y caer en vuestras manos antes que pecar contra Dios." Susana se puso a gritar, y los ancianos, por su parte, se pusieron también a gritar. Uno de ellos fue corriendo y abrió la puerta del parque. Al oír los gritos en el parque, la servidumbre vino corriendo por la puerta lateral a ver qué le había pasado. Y cuando los ancianos contaron su historia, los criados quedaron abochornados, porque Susana nunca había dado que hablar.
    Al día siguiente, cuando la gente vino a casa de Joaquín, su marido, vinieron también los dos ancianos con el propósito criminal de hacer morir a Susana. En presencia del pueblo ordenaron: "Id a buscar a Susana, hija de Jelcías, mujer de Joaquín." Fueron a buscarla y vino ella con sus padres, hijos y parientes. Toda su familia y cuantos la veían lloraban. Entonces los dos ancianos se levantaron en medio de la asamblea y pusieron las manos sobre la cabeza de Susana. Ella, llorando, levantó la vista al cielo, porque su corazón confiaba en el Señor. Los ancianos declararon: "Mientras paseábamos nosotros solos por el parque, salió ésta con dos criadas, cerró la puerta del parque y despidió a las criadas. Entonces se le acercó un joven que estaba escondido y se acostó con ella. Nosotros estábamos en un rincón del parque y, al ver aquella maldad, corrimos hacia ellos. Los vimos abrazados, pero no pudimos sujetar al joven, porque era más fuerte que nosotros y, abriendo la puerta, salió corriendo. En cambio, a ésta le echamos mano y le preguntamos quién era el joven, pero no quiso decírnoslo. Damos testimonio de ello." Como eran ancianos del pueblo y jueces,] la asamblea [los creyó y] condenó a muerte a Susana. Ella dijo gritando: "Dios eterno, que ves lo escondido, que lo sabes todo antes de que suceda, tú sabes que han dado falso testimonio contra mí, y ahora tengo que morir, siendo inocente de lo que su maldad ha inventado contra mí."
    El Señor la escuchó. Mientras la llevaban para ejecutarla, Dios movió con su santa inspiración a un muchacho llamado Daniel; éste dio una gran voz: "¡No soy responsable de ese homicidio!" Toda la gente se volvió a mirarlo, y le preguntaron: "¿Qué pasa, qué estás diciendo?" Él, plantado en medio de ellos, les contestó: "Pero, ¿estáis locos, israelitas? ¿Conque, sin discutir la causa ni apurar los hechos condenáis a una hija de Israel? Volved al tribunal, porque ésos han dado falso testimonio contra ella."
    La gente volvió a toda prisa, y los ancianos le dijeron: "Ven, siéntate con nosotros y explícate, porque Dios mismo te ha nombrado anciano." Daniel les dijo: "Separadlos lejos uno del otro, que los voy a interrogar yo." Los apartaron, él llamó a uno y le dijo: "¡Envejecido en años y en crímenes! Ahora vuelven tus pecados pasados, cuando dabas sentencias injustas condenando inocentes y absolviendo culpables, contra el mandato del Señor: "No matarás al inocente ni al justo." Ahora, puesto que tú la viste, dime debajo de qué árbol los viste abrazados." El respondió: "Debajo de una acacia." Respondió Daniel: "Tu calumnia se vuelve contra ti. El ángel de Dios ha recibido la sentencia divina y te va a partir por medio." Lo apartó, mandó traer al otro y le dijo: "¡Hijo de Canaán, y no de Judá! La belleza te sedujo y la pasión pervirtió tu corazón. Lo mismo hacíais con las mujeres israelitas, y ellas por miedo se acostaban con vosotros; pero una mujer judía no ha tolerado vuestra maldad. Ahora dime: ¿bajo qué árbol los sorprendiste abrazados?" Él contestó: "Debajo de una encina." Replicó Daniel: "Tu calumnia se vuelve contra ti. El ángel de Dios aguarda con la espada para dividirte por medio. Y así acabará con vosotros."
    Entonces toda la asamblea se puso a gritar bendiciendo a Dios, que salva a los que esperan en él. Se alzaron contra los dos ancianos a quienes Daniel había dejado convictos de falso testimonio por su propia confesión. Según la ley de Moisés, les aplicaron la pena que ellos habían tramado contra su prójimo y los ajusticiaron. Aquel día se salvó una vida inocente.
  • Salmo Responsorial: 22
    "Aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque tú vas conmigo."
    El Señor es mi pastor, nada me falta: / en verdes praderas me hace recostar; / me conduce hacia fuentes tranquilas / y repara mis fuerzas. R.
    Me guía por el sendero justo, / por el honor de su nombre. / Aunque camine por cañadas oscuras, / nada temo, porque tú vas conmigo: / tu vara y tu cayado me sosiegan. R.
    Preparas una mesa ante mí, / enfrente de mis enemigos; / me unges la cabeza con perfume, / y mi copa rebosa. R.
    Tu bondad y tu misericordia me acompañan / todos los días de mi vida, / y habitaré en la casa del Señor / por años sin término. R.
  • Evangelio: Juan 8,1-11
    "El que esté sin pecado, que le tire la primera piedra"
    En aquel tiempo, Jesús se retiró al monte de los Olivos. Al amanecer se presentó de nuevo en el templo, y todo el pueblo acudía a él, y, sentándose, les enseñaba. Los escribas y los fariseos le traen una mujer sorprendida en adulterio y, colocándola en medio, le dijeron: "Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. La ley de Moisés nos manda apedrear a las adúlteras; tú, ¿qué dices?" Le preguntaban esto para comprometerlo y poder acusarlo. Pero Jesús, inclinándose, escribía con el dedo en el suelo. Como insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo: "El que esté sin pecado, que le tire la primera piedra." E inclinándose otra vez, siguió escribiendo. Ellos, al oírlo, se fueron escabullendo uno a uno, empezando por los más viejos. Y quedó solo Jesús, con la mujer, que seguía allí delante. Jesús se incorporó y le preguntó: "Mujer, ¿dónde están tus acusadores?; ¿ninguno te ha condenado?" Ella contestó: "Ninguno, Señor." Jesús dijo: "Tampoco yo te condeno. Anda, y en adelante no peques más."

Evangelio 6 de Abril de 2014

  • Primera Lectura: Ezequiel 37,12-14
    "Os infundiré, mi espíritu, y viviréis"
    Así dice el Señor: "Yo mismo abriré vuestros sepulcros, y os haré salir de vuestros sepulcros, pueblo mío, y os traeré a la tierra de Israel. Y, cuando abra vuestros sepulcros y os saque de vuestros sepulcros, pueblo mío, sabréis que soy el Señor. Os infundiré mi espíritu, y viviréis; os colocaré en vuestra tierra y sabréis que yo, el Señor, lo digo y lo hago." Oráculo del Señor.
  • Salmo Responsorial: 129
    "Del Señor viene la misericordia, la redención copiosa."
    Desde lo hondo a ti grito, Señor; / Señor, escucha mi voz; / estén tus oídos atentos / a la voz de mi súplica. R.
    Si llevas cuentas de los delitos, Señor, / ¿quién podrá resistir? / Pero de ti procede el perdón, / así infundes respeto. R.
    Mi alma espera en el Señor, / espera en su palabra; / mi alma guarda al Señor, / más que el centinela la aurora. / Aguarde Israel al Señor, / como el centinela la aurora. R.
    Porque del Señor viene la misericordia, / la redención copiosa; / y él redimirá a Israel / de todos sus delitos. R.
  • Segunda Lectura: Romanos 8,8-11
    "El espíritu del que resucitó a Jesús de entre los muertos habita en vosotros"
    Hermanos: Los que viven sujetos a la carne no pueden agradar a Dios.Pero vosotros no estáis sujetos a la carne, sino al espíritu, ya que el Espíritu de Dios habita en vosotros. El que no tiene el Espíritu de Cristo no es de Cristo. Pues bien, si Cristo está en vosotros, el cuerpo está muerto por el pecado, pero el espíritu vive por la justificación obtenida. Si el Espíritu del que resucitó a Jesús de entre los muertos habita en vosotros, el que resucitó de entre los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales, por el mismo Espíritu que habita en vosotros.
  • Evangelio: Juan 11,1-45
    "Yo soy la resurrección y la vida"
    En aquel tiempo, [un cierto Lázaro, de Betania, la aldea de María y de Marta, su hermana, había caído enfermo. María era la que ungió al Señor con perfume y le enjugó los pies con su cabellera; el enfermo era su hermano Lázaro.]
    Las hermanas mandaron recado a Jesús, diciendo: "Señor, tu amigo está enfermo." Jesús, al oírlo, dijo: "Esta enfermedad no acabará en la muerte, sino que servirá para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella." Jesús amaba a Marta, a su hermana y a Lázaro. Cuando se enteró de que estaba enfermo, se quedó todavía dos días en donde estaba. Sólo entonces dice a sus discípulos: "Vamos otra vez a Judea."
    [Los discípulos le replican: "Maestro, hace poco intentaban apedrearte los judíos, ¿y vas a volver allí?" Jesús contestó: "¿No tiene el día doce horas? Si uno camina de día, no tropieza, porque ve la luz de este mundo; pero si camina de noche, tropieza, porque le falta la luz. Dicho esto, añadió: "Lázaro, nuestro amigo, está dormido; voy a despertarlo." Entonces le dijeron sus discípulos: "Señor, si duerme, se salvará." Jesús se refería a su muerte; en cambio, ellos creyeron que hablaba del sueño natural. Entonces Jesús les replicó claramente: "Lázaro ha muerto, y me alegro por vosotros de que no hayamos estado allí, para que creáis. Y ahora vamos a su casa." Entonces Tomás, apodado el Mellizo, dijo a los demás discípulos: "Vamos también nosotros y muramos con él."]
    Cuando Jesús llegó, Lázaro llevaba ya cuatro días enterrado. [Betania distaba poco de Jerusalén: unos tres kilómetros; y muchos judíos habían ido a ver a Marta y a María, para darles el pésame por su hermano.] Cuando Marta se enteró de que llegaba Jesús, salió a su encuentro, mientras María se quedaba en casa. Y dijo Marta a Jesús: "Señor, si hubieras estado aquí no habría muerto mi hermano. Pero aún ahora sé que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo concederá." Jesús le dijo: "Tu hermano resucitará." Marta respondió: "Sé que resucitará en la resurrección del último día." Jesús le dice: "Yo soy la resurrección y la vida: el que cree en mí, aunque haya muerto, vivirá; y el que está vivo y cree en mí, no morirá para siempre. ¿Crees esto?" Ella le contestó: "Sí, Señor: yo creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que tenía que venir al mundo."
    [Y dicho esto, fue a llamar a su hermana María, diciéndole en voz baja: "El Maestro está ahí y te llama." Apenas lo oyó, se levantó y salió adonde estaba él; porque Jesús no había entrado todavía en la aldea, sino que estaba aún donde Marta lo había encontrado. Los judíos que estaban con ella en casa consolándola, al ver que María se levantaba y salía deprisa, la siguieron, pensando que iba al sepulcro a llorar allí. Cuando llegó María adonde estaba Jesús, al verlo se echó a sus pies diciéndole: "Señor, si hubieras estado aquí no habría muerto mi hermano."]
    Jesús, [viéndola llorar a ella y viendo llorar a los judíos que la acompañaban,] sollozó y, muy conmovido, preguntó: "¿Donde lo habéis enterrado?" Le contestaron: "Señor, ven a verlo." Jesús se echó a llorar. Los judíos comentaban: "¡Cómo lo quería!" Pero algunos dijeron: "Y uno que le ha abierto los ojos a un ciego, ¿no podía haber impedido que muriera éste?" Jesús, sollozando de nuevo, llega al sepulcro. Era una cavidad cubierta con una losa. Dice Jesús: "Quitad la losa." Marta, la hermana del muerto, le dice: "Señor, ya huele mal, porque lleva cuatro días." Jesús le dice: "¿No te he dicho que si crees verás la gloria de Dios?" Entonces quitaron la losa. Jesús, levantando los ojos a lo alto, dijo: "Padre, te doy gracias porque me has escuchado; yo sé que tú me escuchas siempre; pero lo digo por la gente que me rodea, para que crean que tú me has enviado." Y dicho esto, gritó con voz potente: "Lázaro, ven afuera." El muerto salió, los pies y las manos atados con vendas, y la cara envuelta en un sudario. Jesús les dijo: "Desatadlo y dejadlo andar."
    Y muchos judíos que habían venido a casa de María, al ver lo que había hecho Jesús, creyeron en él.

Papa Francisco: Jesús nos invita a salir de la tumba de nuestros pecados

Papa Francisco. Foto: ACI Prensa
Papa Francisco. Foto: ACI Prensa
VATICANO, 06 Abr. 14 / 09:48 am (ACI/EWTN Noticias).- Reflexionando sobre la resurrección de Lázaro, que presenta el Evangelio de hoy, en sus palabras previas al rezo del Ángelus en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco señaló que Jesús nos invita a a salir de la tumba en la que nuestros pecados nos han hundido, y aseguró que “no hay ningún límite a la misericordia divina ofrecida a todos”.
El Santo Padre indicó que el Señor “nos invita, casi nos ordena, que salgamos de la tumba en la cual nuestros pecados nos han hundido. Nos llama insistentemente a salir de la oscuridad de la prisión en la que estamos encerrados, conformándonos con una vida falsa, egoísta, mediocre.‘¡Salí afuera!’, nos dice. ‘¡Salí afuera!’”.
“El Evangelio de este quinto domingo de Cuaresma nos narra la resurrección de Lázaro. Es el culmen de los ‘signos’ prodigiosos realizados por Jesús: es un gesto demasiado grande, demasiado claramente divino para ser tolerado por los sumos sacerdotes, los cuales, cuando supieron del hecho, tomaron la decisión de matar a Jesús”.
Francisco recordó que “Lázaro había muerto desde hacía ya tres días cuando llegó Jesús, y a las hermanas Marta y María, Él les dijo las palabras que se imprimieron para siempre en la memoria de la comunidad cristiana, dice así Jesús: ‘Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque muera, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente’”.
“Sobre esta la Palabra del Señor nosotros creemos que la vida de quién cree en Jesús y sigue su mandamiento, después de la muerte será transformada en una vida nueva, plena e inmortal. Como Jesús ha resucitado con su propio cuerpo, pero no ha vuelto a la vida terrena, así nosotros resucitaremos con nuestros cuerpos que serán transfigurados en cuerpos gloriosos”.
El Papa señaló que Jesús “nos espera junto al Padre, y la fuerza del Espíritu Santo, que lo ha resucitado a Él, resucitará también a quién está unido a Él”.
“Frente a la tumba sellada del amigo Lázaro, Jesús ‘gritó con gran voz: ‘¡Lázaro, salí afuera! El muerto salió, los pies y las manos atados con vendas, y el rostro envuelto con un sudario’. Este grito perentorio está dirigido a cada hombre, porque todos estamos marcados por la muerte, todos nosotros; es la voz de Aquel que es el dueño de la vida y quiere que todos ‘la tengan en abundancia’”.
El Santo Padre remarcó que “Cristo no se resigna a los sepulcros que nos hemos construido con nuestras elecciones de mal y de muerte, con nuestros errores, con nuestros pecados. ¡Él no se resigna a esto! Él nos invita, casi nos ordena, que salgamos de la tumba en la cual nuestros pecados nos han hundido”.
“Dejémonos aferrar por estas palabras que Jesús hoy repite a cada uno de nosotros. Una invitación a dejarnos liberar de las ‘vendas’, de las ‘vendas del orgullo’. Porque el orgullo nos hace esclavos, esclavos de nosotros mismos, esclavos de tantos ídolos, de tantas cosas”.
“Nuestra resurrección -indicó el Papa- comienza desde aquí: cuando decidimos obedecer a esta orden de Jesús saliendo a la luz, a la vida; cuando de nuestro rostro caen las máscaras - tantas veces nosotros estamos enmascarados por el pecado, ¡las máscaras deben caer! - y nosotros encontramos el coraje de nuestro rostro original, creado a imagen y semejanza de Dios”.
Francisco señaló que “el gesto de Jesús que resucita a Lázaro muestra hasta dónde puede llegar la fuerza de la Gracia de Dios, y por lo tanto, donde puede llegar nuestra conversión, nuestro cambio”.
“Pero escuchen bien: ¡no hay ningún límite a la misericordia divina ofrecida a todos! ¡No hay ningún límite a la misericordia divina ofrecida a todos! Acuérdense bien esta frase. Y podemos decirla todos juntos: ¡No hay ningún límite a la misericordia divina ofrecida a todos! Digámosla juntos: ¡No hay ningún límite a la misericordia divina ofrecida a todos!”.
“El Señor está siempre listo para levantar la piedra tumbal de nuestros pecados, que nos separa de Él, luz de los vivientes”, concluyó.