sábado, 18 de marzo de 2023

Lecturas 19 de Marzo de 2023

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    I Samuel 16:1, 6-7, 10-13

    1Dijo Yahveh a Samuel: «¿Hasta cuándo vas a estar llorando por Saúl, después que yo le he rechazado para que no reine sobre Israel? Llena tu cuerno de aceite y vete. Voy a enviarte a Jesé, de Belén, porque he visto entre sus hijos un rey para mí.»6Cuando ellos se presentaron vio a Eliab y se dijo: «Sin duda está ante Yahveh su ungido.»7Pero Yahveh dijo a Samuel: «No mires su apariencia ni su gran estatura, pues yo le he descartado. La mirada de Dios no es como la mirada del hombre, pues el hombre mira las apariencias, pero Yahveh mira el corazón.»10Hizo pasar Jesé a sus siete hijos ante Samuel, pero Samuel dijo: «A ninguno de éstos ha elegido Yahveh.»11Preguntó, pues, Samuel a Jesé: «¿No quedan ya más muchachos?» El respondió: «Todavía falta el más pequeño, que está guardando el rebaño.» Dijo entonces Samuel a Jesé: «Manda que lo traigan, porque no comeremos hasta que haya venido.»12Mandó, pues, que lo trajeran; era rubio, de bellos ojos y hermosa presencia. Dijo Yahveh: «Levántate y úngelo, porque éste es.»13Tomó Samuel el cuerno de aceite y le ungió en medio de sus hermanos. Y a partir de entonces, vino sobre David el espíritu de Yahveh. Samuel se levantó y se fue a Ramá.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 23:1-6

    1Salmo. De David. Yahveh es mi pastor, nada me falta.2Por prados de fresca hierba me apacienta. Hacia las aguas de reposo me conduce,3y conforta mi alma; me guía por senderos de justicia, en gracia de su nombre.4Aunque pase por valle tenebroso, ningún mal temeré, porque tú vas conmigo; tu vara y tu cayado, ellos me sosiegan.5Tú preparas ante mí una mesa frente a mis adversarios; unges con óleo mi cabeza, rebosante está mi copa.6Sí, dicha y gracia me acompañarán todos los días de mi vida; mi morada será la casa de Yahveh a lo largo de los días.

  • Segunda Lectura

    Efesios 5:8-14

    8Porque en otro tiempo fuisteis tinieblas; mas ahora sois luz en el Señor. Vivid como hijos de la luz;9pues el fruto de la luz consiste en toda bondad, justicia y verdad.10Examinad qué es lo que agrada al Señor,11y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, antes bien, denunciadlas.12Cierto que ya sólo el mencionar las cosas que hacen ocultamente da vergüenza;13pero, al ser denunciadas, se manifiestan a la luz.14Pues todo lo que queda manifiesto es luz. Por eso se dice: Despierta tú que duermes, y levántate de entre los muertos, y te iluminará Cristo.

  • Evangelio

    Juan 9:1-41

    1Vio, al pasar, a un hombre ciego de nacimiento.2Y le preguntaron sus discípulos: «Rabbí, ¿quién pecó, él o sus padres, para que haya nacido ciego?»3Respondió Jesús: «Ni él pecó ni sus padres; es para que se manifiesten en él las obras de Dios.4Tenemos que trabajar en las obras del que me ha enviado mientras es de día; llega la noche, cuando nadie puede trabajar.5Mientras estoy en el mundo, soy luz del mundo.»6Dicho esto, escupió en tierra, hizo barro con la saliva, y untó con el barro los ojos del ciego7y le dijo: «Vete, lávate en la piscina de Siloé» (que quiere decir Enviado). El fue, se lavó y volvió ya viendo.8Los vecinos y los que solían verle antes, pues era mendigo, decían: «¿No es éste el que se sentaba para mendigar?»9Unos decían: «Es él». «No, decían otros, sino que es uno que se le parece.» Pero él decía: «Soy yo.»10Le dijeron entonces: «¿Cómo, pues, se te han abierto los ojos?»11El respondió: «Ese hombre que se llama Jesús, hizo barro, me untó los ojos y me dijo: "Vete a Siloé y lávate." Yo fui, me lavé y vi.»12Ellos le dijeron: «¿Dónde está ése?» El respondió: «No lo sé.»13Lo llevan donde los fariseos al que antes era ciego.14Pero era sábado el día en que Jesús hizo barro y le abrió los ojos.15Los fariseos a su vez le preguntaron cómo había recobrado la vista. El les dijo: «Me puso barro sobre los ojos, me lavé y veo.»16Algunos fariseos decían: «Este hombre no viene de Dios, porque no guarda el sábado.» Otros decían: «Pero, ¿cómo puede un pecador realizar semejantes señales?» Y había disensión entre ellos.17Entonces le dicen otra vez al ciego: «¿Y tú qué dices de él, ya que te ha abierto los ojos?» El respondió: «Que es un profeta.»18No creyeron los judíos que aquel hombre hubiera sido ciego, hasta que llamaron a los padres del que había recobrado la vista19y les preguntaron: «¿Es éste vuestro hijo, el que decís que nació ciego? ¿Cómo, pues, ve ahora?»20Sus padres respondieron: «Nosotros sabemos que este es nuestro hijo y que nació ciego.21Pero, cómo ve ahora, no lo sabemos; ni quién le ha abierto los ojos, eso nosotros no lo sabemos. Preguntadle; edad tiene; puede hablar de sí mismo.»22Sus padres decían esto por miedo por los judíos, pues los judíos se habían puesto ya de acuerdo en que, si alguno le reconocía como Cristo, quedara excluido de la sinagoga.23Por eso dijeron sus padres: «Edad tiene; preguntádselo a él.»24Le llamaron por segunda vez al hombre que había sido ciego y le dijeron: «Da gloria a Dios. Nosotros sabemos que ese hombre es un pecador.»25Les respondió: «Si es un pecador, no lo sé. Sólo sé una cosa: que era ciego y ahora veo.»26Le dijeron entonces: «¿Qué hizo contigo? ¿Cómo te abrió los ojos?»27El replicó: «Os lo he dicho ya, y no me habéis escuchado. ¿Por qué queréis oírlo otra vez? ¿Es qué queréis también vosotros haceros discípulos suyos?»28Ellos le llenaron de injurias y le dijeron: «Tú eres discípulo de ese hombre; nosotros somos discípulos de Moisés.29Nosotros sabemos que a Moisés le habló Dios; pero ése no sabemos de dónde es.»30El hombre les respondió: «Eso es lo extraño: que vosotros no sepáis de dónde es y que me haya abierto a mí los ojos.31Sabemos que Dios no escucha a los pecadores; mas, si uno es religioso y cumple su voluntad, a ése le escucha.32Jamás se ha oído decir que alguien haya abierto los ojos de un ciego de nacimiento.33Si éste no viniera de Dios, no podría hacer nada.»34Ellos le respondieron: «Has nacido todo entero en pecado ¿y nos da lecciones a nosotros?» Y le echaron fuera.35Jesús se enteró de que le habían echado fuera y, encontrándose con él, le dijo: «¿Tú crees en el Hijo del hombre?»36El respondió: «¿Y quién es, Señor, para que crea en él?»37Jesús le dijo: «Le has visto; el que está hablando contigo, ése es.»38El entonces dijo: «Creo, Señor.» Y se postró ante él.39Y dijo Jesús: «Para un juicio he venido a este mundo: para que los que no ven, vean; y los que ven, se vuelvan ciegos.»40Algunos fariseos que estaban con él oyeron esto y le dijeron: «Es que también nosotros somos ciegos?»41Jesús les respondió: Si fuerais ciegos, no tendríais pecado; pero, como decís: "Vemos" vuestro pecado permanece.»

    O también:

    Juan 9:1, 6-9, 13-17, 34-38

    1Vio, al pasar, a un hombre ciego de nacimiento.6Dicho esto, escupió en tierra, hizo barro con la saliva, y untó con el barro los ojos del ciego7y le dijo: «Vete, lávate en la piscina de Siloé» (que quiere decir Enviado). El fue, se lavó y volvió ya viendo.8Los vecinos y los que solían verle antes, pues era mendigo, decían: «¿No es éste el que se sentaba para mendigar?»9Unos decían: «Es él». «No, decían otros, sino que es uno que se le parece.» Pero él decía: «Soy yo.»13Lo llevan donde los fariseos al que antes era ciego.14Pero era sábado el día en que Jesús hizo barro y le abrió los ojos.15Los fariseos a su vez le preguntaron cómo había recobrado la vista. El les dijo: «Me puso barro sobre los ojos, me lavé y veo.»16Algunos fariseos decían: «Este hombre no viene de Dios, porque no guarda el sábado.» Otros decían: «Pero, ¿cómo puede un pecador realizar semejantes señales?» Y había disensión entre ellos.17Entonces le dicen otra vez al ciego: «¿Y tú qué dices de él, ya que te ha abierto los ojos?» El respondió: «Que es un profeta.»34Ellos le respondieron: «Has nacido todo entero en pecado ¿y nos da lecciones a nosotros?» Y le echaron fuera.35Jesús se enteró de que le habían echado fuera y, encontrándose con él, le dijo: «¿Tú crees en el Hijo del hombre?»36El respondió: «¿Y quién es, Señor, para que crea en él?»37Jesús le dijo: «Le has visto; el que está hablando contigo, ése es.»38El entonces dijo: «Creo, Señor.» Y se postró ante él.

Lecturas 18 de Marzo de 2023

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Oseas 6:1-6

    1«Venid, volvamos a Yahveh, pues él ha desgarrado y él nos curará, él ha herido y él nos vendará.2Dentro de dos días nos dará la vida, al tercer día nos hará resurgir y en su presencia viviremos.3Conozcamos, corramos al conocimiento de Yahveh: cierta como la aurora es su salida; vendrá a nosotros como la lluvia temprana, como la lluvia tardía que riega la tierra.»4¿Qué he de hacer contigo, Efraím? ¿Qué he de hacer contigo, Judá? ¡Vuestro amor es como nube mañanera, como rocío matinal, que pasa!5Por eso les he hecho trizas por los profetas, los he matado por las palabras de mi boca, y mi juicio surgirá como la luz.6Porque yo quiero amor, no sacrificio, conocimiento de Dios, más que holocaustos.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 51:3-4, 18-21

    3Tenme piedad, oh Dios, según tu amor, por tu inmensa ternura borra mi delito,4lávame a fondo de mi culpa, y de mi pecado purifícame.18Pues no te agrada el sacrificio, si ofrezco un holocausto no lo aceptas.19El sacrificio a Dios es un espíritu contrito; un corazón contrito y humillado, oh Dios, no lo desprecias.20¡Favorece a Sión en tu benevolencia, reconstruye las murallas de Jerusalén!21Entonces te agradarán los sacrificios justos, - holocausto y oblación entera - se ofrecerán entonces sobre tu altar novillos.

  • Evangelio

    Lucas 18:9-14

    9Dijo también a algunos que se tenían por justos y despreciaban a los demás, esta parábola:10«Dos hombres subieron al templo a orar; uno fariseo, otro publicano.11El fariseo, de pie, oraba en su interior de esta manera: "¡Oh Dios! Te doy gracias porque no soy como los demás hombres, rapaces, injustos, adúlteros, ni tampoco como este publicano.12Ayuno dos veces por semana, doy el diezmo de todas mis ganancias."13En cambio el publicano, manteniéndose a distancia, no se atrevía ni a alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: "¡Oh Dios! ¡Ten compasión de mí, que soy pecador!"14Os digo que éste bajó a su casa justificado y aquél no. Porque todo el que se ensalce, será humillado; y el que se humille, será ensalzado.»

viernes, 17 de marzo de 2023

Lecturas 17 de Marzo de 2023

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Oseas 14:2-10

    2Vuelve, Israel, a Yahveh tu Dios, pues has tropezado por tus culpas.3Tomad con vosotros palabras, y volved a Yahveh. Decidle: «Quita toda culpa; toma lo que es bueno; y en vez de novillos te ofreceremos nuestros labios.4Asiria no nos salvará, no montaremos ya a caballo, y no diremos más "Dios nuestro" a la obra de nuestros manos, oh tú, en quien halla compasión el huérfano.»5- Yo sanaré su infidelidad, los amaré graciosamente; pues mi cólera se ha apartado de él,6seré como rocío para Israel: él florecerá como el lirio, y hundirá sus raíces como el Líbano.7Sus ramas se desplegarán, como el del olivo será su esplendor, y su fragancia como la del Líbano.8Volverán a sentarse a mi sombra; harán crecer el trigo, florecerán como la vid, su renombre será como el del vino del Líbano.9Efraím... ¿qué tiene aún con los ídolos? Yo le atiendo y le miro. Yo soy como un ciprés siempre verde, y gracias a mí se te halla fruto.10¿Quién es sabio para entender estas cosas, inteligente para conocerlas?: Que rectos son los caminos de Yahveh, por ellos caminan los justos, mas los rebeldes en ellos tropiezan.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 81:6-11, 14, 17

    6un dictamen que él impuso en José, cuando salió contra el país de Egipto. Una lengua desconocida se oye:7«Yo liberé sus hombros de la carga, sus manos la espuerta abandonaron;8en la aflicción gritaste y te salvé. «Te respondí en el secreto del trueno, te probé junto a las aguas de Meribá.9Escucha, pueblo mío, yo te conjuro, ¡ah Israel, si quisieras escucharme!10«No haya en ti dios extranjero, no te postres ante dios extraño;11yo, Yahveh, soy tu Dios, que te hice subir del país de Egipto; abre toda tu boca, y yo la llenaré.14«¡Ah!, si mi pueblo me escuchara, si Israel mis caminos siguiera,17y a él lo sustentaría con la flor del trigo, lo saciaría con la miel de la peña.»

  • Evangelio

    Marcos 12:28-34

    28Acercóse uno de los escribas que les había oído y, viendo que les había respondido muy bien, le preguntó: «¿Cuál es el primero de todos los mandamientos?»29Jesús le contestó: «El primero es: Escucha, Israel: El Señor, nuestro Dios, es el único Señor,30y amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas.31El segundo es: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No existe otro mandamiento mayor que éstos.»32Le dijo el escriba: «Muy bien, Maestro; tienes razón al decir que El es único y que no hay otro fuera de El,33y amarle con todo el corazón, con toda la inteligencia y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a si mismo vale más que todos los holocaustos y sacrificios.»34Y Jesús, viendo que le había contestado con sensatez, le dijo: «No estás lejos del Reino de Dios.» Y nadie más se atrevía ya a hacerle preguntas.

jueves, 16 de marzo de 2023

Lecturas 16 de Marzo de 2023

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Jeremías 7:23-28

    23Lo que les mandé fue esto otro: «Escuchad mi voz y yo seré vuestro Dios y vosotros seréis mi pueblo, y seguiréis todo camino que yo os mandare, para que os vaya bien.»24Mas ellos no escucharon ni prestaron el oído, sino que procedieron en sus consejos según la pertinacia de su mal corazón, y se pusieron de espaldas, que no de cara;25desde la fecha en que salieron vuestros padres del país de Egipto hasta el día de hoy, os envié a todos mis siervos, los profetas, cada día puntualmente.26Pero no me escucharon ni aplicaron el oído, sino que atiesando la cerviz hicieron peor que sus padres.27Les dirás, pues, todas estas palabras, mas no te escucharán. Les llamarás y no te responderán.28Entonces les dirás: Esta es la nación que no ha escuchado la voz de Yahveh su Dios, ni ha querido aprender. Ha perecido la lealtad, ha desaparecido de su boca.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 95:1-2, 6-9

    1Venid, cantemos gozosos a Yahveh, aclamemos a la Roca de nuestra salvación;2con acciones de gracias vayamos ante él, aclamémosle con salmos.6Entrad, adoremos, prosternémonos, ¡de rodillas ante Yahveh que nos ha hecho!7Porque él es nuestro Dios, y nosotros el pueblo de su pasto, el rebaño de su mano. ¡Oh, si escucharais hoy su voz!:8«No endurezcáis vuestro corazón como en Meribá, como el día de Massá en el desierto,9donde me pusieron a prueba vuestros padres, me tentaron aunque habían visto mi obra.

  • Evangelio

    Lucas 11:14-23

    14Estaba expulsando un demonio que era mudo; sucedió que, cuando salió el demonio, rompió a hablar el mudo, y las gentes se admiraron.15Pero algunos de ellos dijeron: «Por Beelzebul, Príncipe de los demonios, expulsa los demonios.»16Otros, para ponerle a prueba, le pedían una señal del cielo.17Pero él, conociendo sus pensamientos, les dijo: «Todo reino dividido contra sí mismo queda asolado, y casa contra casa, cae.18Si, pues, también Satanás está dividido contra sí mismo, ¿cómo va a subsistir su reino?.. porque decís que yo expulso los demonios por Beelzebul.19Si yo expulso los demonios por Beelzebul, ¿por quién los expulsan vuestros hijos? Por eso, ellos serán vuestros jueces.20Pero si por el dedo de Dios expulso yo los demonios, es que ha llegado a vosotros el Reino de Dios.21Cuando uno fuerte y bien armado custodia su palacio, sus bienes están en seguro;22pero si llega uno más fuerte que él y le vence, le quita las armas en las que estaba confiado y reparte sus despojos.»23«El que no está conmigo, está contra mí, y el que no recoge conmigo, desparrama.

miércoles, 15 de marzo de 2023

Lecturas 15 de Marzo de 2023

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Deuteronomio 4:1, 5-9

    1Y ahora, Israel, escucha los preceptos y las normas que yo os enseño para que las pongáis en práctica, a fin de que viváis y entréis a tomar posesión de la tierra que os da Yahveh, Dios de vuestros padres.5Mira, como Yahveh mi Dios me ha mandado, yo os enseño preceptos y normas para que los pongáis en práctica en la tierra en la que vais a entrar para tomarla en posesión.6Guardadlos y practicadlos, porque ellos son vuestra sabiduría y vuestra inteligencia a los ojos de los pueblos que, cuando tengan noticia de todos estos preceptos, dirán: «Cierto que esta gran nación es un pueblo sabio e inteligente.»7Y, en efecto, ¿hay alguna nación tan grande que tenga los dioses tan cerca como lo está Yahveh nuestro Dios siempre que le invocamos?8Y ¿cuál es la gran nación cuyos preceptos y normas sean tan justos como toda esta Ley que yo os expongo hoy?9Pero ten cuidado y guárdate bien, no vayas o olvidarte de estas cosas que tus ojos han visto, ni dejes que se aparten de tu corazón en todos los días de tu vida; enséñaselas, por el contrario, a tus hijos y a los hijos de tus hijos.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 147:12-13, 15-16, 19-20

    12¡Celebra a Yahveh, Jerusalén, alaba a tu Dios, Sión!13Que él ha reforzado los cerrojos de tus puertas, ha bendecido en ti a tus hijos;15El envía a la tierra su mensaje, a toda prisa corre su palabra;16como lana distribuye la nieve, esparce la escarcha cual ceniza.19El revela a Jacob su palabra, sus preceptos y sus juicios a Israel:20no hizo tal con ninguna nación, ni una sola sus juicios conoció.

  • Evangelio

    Mateo 5:17-19

    17«No penséis que he venido a abolir la Ley y los Profetas. No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento.18Sí, os lo aseguro: el cielo y la tierra pasarán antes que pase una i o una tilde de la Ley sin que todo suceda.19Por tanto, el que traspase uno de estos mandamientos más pequeños y así lo enseñe a los hombres, será el más pequeño en el Reino de los Cielos; en cambio, el que los observe y los enseñe, ése será grande en el Reino de los Cielos.

martes, 14 de marzo de 2023

Lecturas 14 de Marzo de 2023

 

Lecturas del día:

  • Primera Lectura

    Daniel 3:25, 34-43

    25Y Azarías, de pie en medio del fuego, tomó la palabra y oró así:34¡Oh, no nos abandones para siempre, - por amor de tu nombre - no repudies tu alianza,35no nos retires tu misericordia, por Abraham tu amado, por Isaac tu siervo, por Israel tu santo,36a quienes tú prometiste multiplicar su linaje como las estrellas del cielo y como la arena de la orilla del mar!37Señor, que somos más pequeños que todas las naciones, que hoy estamos humillados en toda la tierra, por causa de nuestros pecados;38ya no hay, en esta hora, príncipe, profeta ni caudillo, holocausto, sacrificio, oblación ni incienso ni lugar donde ofrecerte las primicias,39y hallar gracia a tus ojos. Mas con alma contrita y espíritu humillado te seamos aceptos, como con holocaustos de carneros y toros, y con millares de corderos pingües;40tal sea hoy nuestro sacrificio ante ti, y te agrade que plenamente te sigamos, porque no hay confusión para los que en ti confian.41Y ahora te seguimos de todo corazón, te tememos y buscamos tu rostro. No nos dejes en la confusión,42trátanos conforme a tu bondad y según la abundancia de tu misericordia.43Líbranos según tus maravillas, y da, Señor, gloria a tu nombre.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 25:4-9

    4Muéstrame tus caminos, Yahveh, enséñame tus sendas.5Guíame en tu verdad, enséñame, que tú eres el Dios de mi salvación. En ti estoy esperando todo el día,6Acuérdate, Yahveh, de tu ternura, y de tu amor, que son de siempre.7De los pecados de mi juventud no te acuerdes, pero según tu amor, acuérdate de mí. por tu bondad, Yahveh.8Bueno y recto es Yahveh; por eso muestra a los pecadores el camino;9conduce en la justicia a los humildes, y a los pobres enseña su sendero.

  • Evangelio

    Mateo 18:21-35

    21Pedro se acercó entonces y le dijo: «Señor, ¿cuántas veces tengo que perdonar las ofensas que me haga mi hermano? ¿Hasta siete veces?»22Dícele Jesús: «No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete.»23«Por eso el Reino de los Cielos es semejante a un rey que quiso ajustar cuentas con sus siervos.24Al empezar a ajustarlas, le fue presentado uno que le debía 10.000 talentos.25Como no tenía con qué pagar, ordenó el señor que fuese vendido él, su mujer y sus hijos y todo cuanto tenía, y que se le pagase.26Entonces el siervo se echó a sus pies, y postrado le decía: "Ten paciencia conmigo, que todo te lo pagaré."27Movido a compasión el señor de aquel siervo, le dejó en libertad y le perdonó la deuda.28Al salir de allí aquel siervo se encontró con uno de sus compañeros, que le debía cien denarios; le agarró y, ahogándole, le decía: "Paga lo que debes."29Su compañero, cayendo a sus pies, le suplicaba: "Ten paciencia conmigo, que ya te pagaré."30Pero él no quiso, sino que fue y le echó en la cárcel, hasta que pagase lo que debía.31Al ver sus compañeros lo ocurrido, se entristecieron mucho, y fueron a contar a su señor todo lo sucedido.32Su señor entonces le mandó llamar y le dijo: "Siervo malvado, yo te perdoné a ti toda aquella deuda porque me lo suplicaste.33¿No debías tú también compadecerte de tu compañero, del mismo modo que yo me compadecí de ti?"34Y encolerizado su señor, le entregó a los verdugos hasta que pagase todo lo que le debía.35Esto mismo hará con vosotros mi Padre celestial, si no perdonáis de corazón cada uno a vuestro hermano.»