sábado, 12 de septiembre de 2020

Lecturas 12 de Agosto de 2020

 

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    Gálatas 4:4-7
    4 Pero, al llegar la plenitud de los tiempos, envió Dios a su Hijo, nacido de mujer, nacido bajo la ley,
    5 para rescatar a los que se hallaban bajo la ley, y para que recibiéramos la filiación adoptiva.
    6 La prueba de que sois hijos es que Dios ha enviado a nuestros corazones el Espíritu de su Hijo que clama: ¡Abbá, Padre!
    7 De modo que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero por voluntad de Dios.

    O también:

    Efesios 1:3-6, 11-12
    3 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido con toda clase de bendiciones espirituales, en los cielos, en Cristo;
    4 por cuanto nos ha elegido en él antes de la fundación del mundo, para ser santos e inmaculados en su presencia, en el amor;
    5 eligiéndonos de antemano para ser sus hijos adoptivos por medio de Jesucristo, según el beneplácito de su voluntad,
    6 para alabanza de la gloria de su gracia con la que nos agració en el Amado.
    11 A él, por quien entramos en herencia, elegidos de antemano según el previo designio del que realiza todo conforme a la decisión de su voluntad,
    12 para ser nosotros alabanza de su gloria, los que ya antes esperábamos en Cristo.

  • Salmo responsorial

    Lucas 1:46-55
    46 Y dijo María: «Engrandece mi alma al Señor
    47 y mi espíritu se alegra en Dios mi salvador
    48 porque ha puesto los ojos en la humildad de su esclava, por eso desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada,
    49 porque ha hecho en mi favor maravillas el Poderoso, Santo es su nombre
    50 y su misericordia alcanza de generación en generación a los que le temen.
    51 Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los que son soberbios en su propio corazón.
    52 Derribó a los potentados de sus tronos y exaltó a los humildes.
    53 A los hambrientos colmó de bienes y despidió a los ricos sin nada.
    54 Acogió a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia
    55 - como había anunciado a nuestros padres - en favor de Abraham y de su linaje por los siglos.»

  • Evangelio

    Lucas 1:39-57
    39 En aquellos días, se levantó María y se fue con prontitud a la región montañosa, a una ciudad de Judá;
    40 entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel.
    41 Y sucedió que, en cuanto oyó Isabel el saludo de María, saltó de gozo el niño en su seno, e Isabel quedó llena de Espíritu Santo;
    42 y exclamando con gran voz, dijo: «Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu seno;
    43 y ¿de dónde a mí que la madre de mi Señor venga a mí?
    44 Porque, apenas llegó a mis oídos la voz de tu saludo, saltó de gozo el niño en mi seno.
    45 ¡Feliz la que ha creído que se cumplirían las cosas que le fueron dichas de parte del Señor!»
    46 Y dijo María: «Engrandece mi alma al Señor
    47 y mi espíritu se alegra en Dios mi salvador
    48 porque ha puesto los ojos en la humildad de su esclava, por eso desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada,
    49 porque ha hecho en mi favor maravillas el Poderoso, Santo es su nombre
    50 y su misericordia alcanza de generación en generación a los que le temen.
    51 Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los que son soberbios en su propio corazón.
    52 Derribó a los potentados de sus tronos y exaltó a los humildes.
    53 A los hambrientos colmó de bienes y despidió a los ricos sin nada.
    54 Acogió a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia
    55 - como había anunciado a nuestros padres - en favor de Abraham y de su linaje por los siglos.»
    56 María permanceció con ella unos tres meses, y se volvió a su casa.
    57 Se le cumplió a Isabel el tiempo de dar a luz, y tuvo un hijo.

viernes, 11 de septiembre de 2020

Lecturas 11 de Septiembre de 2020

 

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    I Corintios 9:16-19, 22-27
    16 Predicar el Evangelio no es para mí ningún motivo de gloria; es más bien un deber que me incumbe. Y ¡ay de mí si no predicara el Evangelio!
    17 Si lo hiciera por propia iniciativa, ciertamente tendría derecho a una recompensa. Mas si lo hago forzado, es una misión que se me ha confiado.
    18 Ahora bien, ¿cuál es mi recompensa? Predicar el Evangelio entregándolo gratuitamente, renunciando al derecho que me confiere el Evangelio.
    19 Efectivamente, siendo libre de todos, me he hecho esclavo de todos para ganar a los más que pueda.
    22 Me he hecho débil con los débiles para ganar a los débiles. Me he hecho todo a todos para salvar a toda costa a algunos.
    23 Y todo esto lo hago por el Evangelio para ser partícipe del mismo.
    24 ¿No sabéis que en las carreras del estadio todos corren, mas uno solo recibe el premio? ¡Corred de manera que lo consigáis!
    25 Los atletas se privan de todo; y eso ¡por una corona corruptible!; nosotros, en cambio, por una incorruptible.
    26 Así pues, yo corro, no como a la ventura; y ejerzo el pugilato, no como dando golpes en el vacío,
    27 sino que golpeo mi cuerpo y lo esclavizo; no sea que, habiendo proclamado a los demás, resulte yo mismo descalificado.

  • Salmo responsorial

    Salmo 84:3-6, 12
    3 Anhela mi alma y languidece tras de los atrios de Yahveh, mi corazón y mi carne gritan de alegría hacia el Dios vivo.
    4 Hasta el pajarillo ha encontrado una casa, y para sí la golondrina un nido donde poner a sus polluelos: ¡Tus altares, oh Yahveh Sebaot, rey mío y Dios mío!
    5 Dichosos los que moran en tu casa, te alaban por siempre.
    6 Dichosos los hombres cuya fuerza está en ti, y las subidas en su corazón.
    12 Porque Yahveh Dios es almena y escudo, él da gracia y gloria; Yahveh no niega la ventura a los que caminan en la perfección.

  • Evangelio

    Lucas 6:39-42
    39 Les añadió una parábola: «¿Podrá un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en el hoyo?
    40 No está el discípulo por encima del maestro. Todo el que esté bien formado, será como su maestro.
    41 ¿Cómo es que miras la brizna que hay en el ojo de tu hermano, y no reparas en la viga que hay en tu propio ojo?
    42 ¿Cómo puedes decir a tu hermano: "Hermano, deja que saque la brizna que hay en tu ojo", no viendo tú mismo la viga que hay en el tuyo? Hipócrita, saca primero la viga de tu ojo, y entonces podrás ver para sacar la brizna que hay en el ojo de tu hermano.

jueves, 10 de septiembre de 2020

Lecturas 10 de Septiembre de 2020

 

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    I Corintios 8:1-7, 11-13
    1 Respecto a lo inmolado a los ídolos, es cosa sabida, pues todos tenemos ciencia. Pero la ciencia hincha, el amor en cambio edifica.
    2 Si alguien cree conocer algo, aún no lo conoce como se debe conocer.
    3 Mas si uno ama a Dios, ése es conocido por él.
    4 Ahora bien, respecto del comer lo sacrificado a los ídolos, sabemos que el ídolo no es nada en el mundo y no hay más que un único Dios.
    5 Pues aun cuando se les dé el nombre de dioses, bien en el el cielo bien en la tierra, de forma que hay multitud de dioses y de señores,
    6 para nosotros no hay más que un solo Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas y para el cual somos; y un solo Señor, Jesucristo, por quien son todas las cosas y por el cual somos nosotros.
    7 Mas no todos tienen este conocimiento. Pues algunos, acostumbrados hasta ahora al ídolo, comen la carne como sacrificada a los ídolos, y su conciencia, que es débil, se mancha.
    11 Y por tu conocimiento se pierde el débil: ¡el hermano por quien murió Cristo!
    12 Y pecando así contra vuestros hermanos, hiriendo su conciencia, que es débil, pecáis contra Cristo.
    13 Por tanto, si un alimento causa escándalo a mi hermano, nunca comeré carne para no dar escándalo a mi hermano.

  • Salmo responsorial

    Salmo 139:1-3, 13-14, 23-24
    1 Del maestro de coro. De David. Salmo. Yahveh, tú me escrutas y conoces;
    2 sabes cuándo me siento y cuándo me levanto, mi pensamiento calas desde lejos;
    3 esté yo en camino o acostado, tú lo adviertes, familiares te son todas mis sendas.
    13 Porque tú mis riñones has formado, me has tejido en el vientre de mi madre;
    14 yo te doy gracias por tantas maravillas: prodigio soy, prodigios son tus obras. Mi alma conocías cabalmente,
    23 Sóndame, oh Dios, mi corazón conoce, pruébame, conoce mis desvelos;
    24 mira no haya en mí camino de dolor, y llévame por el camino eterno.

  • Evangelio

    Lucas 6:27-38
    27 «Pero yo os digo a los que me escucháis: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os odien,
    28 bendecid a los que os maldigan, rogad por los que os difamen.
    29 Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite el manto, no le niegues la túnica.
    30 A todo el que te pida, da, y al que tome lo tuyo, no se lo reclames.
    31 Y lo que queráis que os hagan los hombres, hacédselo vosotros igualmente.
    32 Si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Pues también los pecadores aman a los que les aman.
    33 Si hacéis bien a los que os lo hacen a vosotros, ¿qué mérito tenéis? ¡También los pecadores hacen otro tanto!
    34 Si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores prestan a los pecadores para recibir lo correspondiente.
    35 Más bien, amad a vuestros enemigos; haced el bien, y prestad sin esperar nada a cambio; y vuestra recompensa será grande, y seréis hijos del Altísimo, porque él es bueno con los ingratos y los perversos.
    36 «Sed compasivos, como vuestro Padre es compasivo.
    37 No juzguéis y no seréis juzgados, no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados.
    38 Dad y se os dará; una medida buena, apretada, remecida, rebosante pondrán en el halda de vuestros vestidos. Porque con la medida con que midáis se os medirá.»

miércoles, 9 de septiembre de 2020

Lecturas 9 de Septiembre de 2020

 

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    I Corintios 7:25-31
    25 Acerca de la virginidad no tengo precepto del Señor. Doy, no obstante, un consejo, como quien, por la misericordia de Dios, es digno de credito.
    26 Por tanto, pienso que es cosa buena, a causa de la necesidad presente, quedarse el hombre así.
    27 ¿Estás unido a una mujer? No busques la separación. ¿No estás unido a mujer? No la busques.
    28 Mas, si te casas, no pecas. Y, si la joven se casa, no peca. Pero todos ellos trendrán su tribulación en la carne, que yo quisiera evitaros.
    29 Os digo, pues, hermanos: El tiempo es corto. Por tanto, los que tienen mujer, vivan como si no la tuviesen.
    30 Los que lloran, como si no llorasen. Los que están alegres, como si no lo estuviesen. Los que compran, como si no poseyesen.
    31 Los que disfrutan del mundo, como si no disfrutasen. Porque la apariencia de este mundo pasa.

  • Salmo responsorial

    Salmo 45:11-17
    11 Escucha, hija, mira y pon atento oído, olvida tu pueblo y la casa de tu padre,
    12 y el rey se prendará de tu belleza. El es tu Señor, ¡póstrate ante él!
    13 La hija de Tiro con presentes, y los más ricos pueblos recrearán tu semblante.
    14 Toda espléndida, la hija del rey, va adentro, con vestidos en oro recamados;
    15 con sus brocados el llevada ante el rey. Vírgenes tras ella, compañeras suyas, donde él son introducidas;
    16 entre alborozo y regocijo avanzan, al entrar en el palacio del rey.
    17 En lugar de tus padres, tendrás hijos; príncipes los harás sobre toda la tierra.

  • Evangelio

    Lucas 6:20-26
    20 Y él, alzando los ojos hacia sus discípulos, decía: «Bienaventurados los pobres, porque vuestro es el Reino de Dios.
    21 Bienaventurados los que tenéis hambre ahora, porque seréis saciados. Bienaventurados los que lloráis ahora, porque reiréis.
    22 Bienaventurados seréis cuando los hombres os odien, cuando os expulsen, os injurien y proscriban vuestro nombre como malo, por causa del Hijo del hombre.
    23 Alegraos ese día y saltad de gozo, que vuestra recompensa será grande en el cielo. Pues de ese modo trataban sus padres a los profetas.
    24 «Pero ¡ay de vosotros, los ricos!, porque habéis recibido vuestro consuelo.
    25 ¡Ay de vosotros, los que ahora estáis hartos!, porque tendréis hambre. ¡Ay de los que reís ahora!, porque tendréis aflicción y llanto.
    26 ¡Ay cuando todos los hombres hablen bien de vosotros!, pues de ese modo trataban sus padres a los falsos profetas.

martes, 8 de septiembre de 2020

Lecturas 8 de Septiembre de 2020

 

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    Miqueas 5:1-4
    1 Mas tú, Belén Efratá, aunque eres la menor entre las familias de Judá, de ti me ha de salir aquel que ha de dominar en Israel, y cuyos orígenes son de antigüedad, desde los días de antaño.
    2 Por eso él los abandonará hasta el tiempo en que dé a luz la que ha de dar a luz. Entonces el resto de sus hermanos volverá a los hijos de Israel.
    3 El se alzará y pastoreará con el poder de Yahveh, con la majestad del nombre de Yahveh su Dios. Se asentarán bien, porque entonces se hará él grande hasta los confines de la tierra.
    4 El será la Paz. Si Asur invade nuestra tierra, y huella nuestro suelo, suscitaremos contra él siete pastores, y ocho príncipes de hombres.

    O también:

    Romanos 8:28-30
    28 Por lo demas, sabemos que en todas las cosas interviene Dios para bien de los que le aman; de aquellos que han sido llamados según su designio.
    29 Pues a los que de antemano conoció, también los predestinó a reproducir la imagen de su Hijo, para que fuera él el primogenito entre muchos hermanos;
    30 y a los que predestinó, a ésos también los justificó; a los que justificó, a ésos también los glorificó.

  • Salmo responsorial

    Salmo 13:6
    6 Que yo en tu amor confío; en tu salvación mi corazón exulte. ¡A Yahveh cantaré por el bien que me ha hecho Samodiaré al nombre de Yahveh, el Altísimo!

  • Evangelio

    Mateo 1:1-16, 18-23
    1 Libro de la generación de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham:
    2 Abraham engendró a Isaac, Isaac engendró a Jacob, Jacob engendró a Judá y a sus hermanos,
    3 Judá engrendró, de Tamar, a Fares y a Zara, Fares engendró a Esrom, Esrom engendró a Aram,
    4 Aram engendró a Aminadab, Aminadab engrendró a Naassón, Naassón engendró a Salmón,
    5 Salmón engendró, de Rajab, a Booz, Booz engendró, de Rut, a Obed, Obed engendró a Jesé,
    6 Jesé engendró al rey David. David engendró, de la que fue mujer de Urías, a Salomón,
    7 Salomón engendró a Roboam, Roboam engendró a Abiá, Abiá engendró a Asaf,
    8 Asaf engendró a Josafat, Josafat engendró a Joram, Joram engendró a Ozías,
    9 Ozías engendró a Joatam, Joatam engendró a Acaz, Acaz engendró a Ezequías,
    10 Ezequías engendró a Manasés, Manasés engendró a Amón, Amón engendró a Josías,
    11 Josías engendró a Jeconías y a sus hermanos, cuando la deportación a Babilonia.
    12 Después de la deportación a Babilonia, Jeconías engendró a Salatiel, Salatiel engendró a Zorobabel,
    13 Zorobabel engendró a Abiud, Abiud engendró a Eliakim, Eliakim engendró a Azor,
    14 Azor engendró a Sadoq, Sadoq engendró a Aquim, Aquim engendró a Eliud,
    15 Eliud engendró a Eleazar, Eleazar engendró a Mattán, Mattán engendró a Jacob,
    16 y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la que nació Jesús, llamado Cristo.
    18 La generación de Jesucristo fue de esta manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de empezar a estar juntos ellos, se encontró encinta por obra del Espíritu Santo.
    19 Su marido José, como era justo y no quería ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto.
    20 Así lo tenía planeado, cuando el Angel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo.
    21 Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.»
    22 Todo esto sucedió para que se cumpliese el oráculo del Señor por medio del profeta:
    23 Ved que la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrán por nombre Emmanuel, que traducido significa: «Dios con nosotros.»

    O también:

    Mateo 1:18-23
    18 La generación de Jesucristo fue de esta manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de empezar a estar juntos ellos, se encontró encinta por obra del Espíritu Santo.
    19 Su marido José, como era justo y no quería ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto.
    20 Así lo tenía planeado, cuando el Angel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo.
    21 Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.»
    22 Todo esto sucedió para que se cumpliese el oráculo del Señor por medio del profeta:
    23 Ved que la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrán por nombre Emmanuel, que traducido significa: «Dios con nosotros.»

lunes, 7 de septiembre de 2020

Lecturas 7 de Septiembre de 2020

 

Lecturas del día:

    Primera opción

  • Primera lectura

    Génesis 2:4-9, 15
    4 Esos fueron los orígenes de los cielos y la tierra, cuando fueron creados. El día en que hizo Yahveh Dios la tierra y los cielos,
    5 no había aún en la tierra arbusto alguno del campo, y ninguna hierba del campo había germinado todavía, pues Yahveh Dios no había hecho llover sobre la tierra, ni había hombre que labrara el suelo.
    6 Pero un manantial brotaba de la tierra, y regaba toda la superficie del suelo.
    7 Entonces Yahveh Dios formó al hombre con polvo del suelo, e insufló en sus narices aliento de vida, y resultó el hombre un ser viviente.
    8 Luego plantó Yahveh Dios un jardín en Edén, al oriente, donde colocó al hombre que había formado.
    9 Yahveh Dios hizo brotar del suelo toda clase de árboles deleitosos a la vista y buenos para comer, y en medio del jardín, el árbol de la vida y el árbol de la ciencia del bien y del mal.
    15 Tomó, pues, Yahveh Dios al hombre y le dejó en al jardín de Edén, para que lo labrase y cuidase.

  • Salmo responsorial

    Salmo 90:2-5, 12-14, 16
    2 Antes que los montes fuesen engendrados, antes que naciesen tierra y orbe, desde siempre hasta siempre tú eres Dios.
    3 Tú al polvo reduces a los hombres, diciendo: «¡Tornad, hijos de Adán!»
    4 Porque mil años a tus ojos son como el ayer, que ya pasó, como una vigilia de la noche.
    5 Tú los sumerges en un sueño, a la mañana serán como hierba que brota;
    12 ¡Enseñanos a contar nuestros días, para que entre la sabiduría en nuestro corazón!
    13 ¡Vuelve, Yahveh! ¿Hasta cuándo? Ten piedad de tus siervos.
    14 Sácianos de tu amor a la mañana, que exultemos y cantemos toda nuestra vida.
    16 ¡Que se vea tu obra con tus siervos, y tu esplendor sobre sus hijos!

  • Evangelio

    Mateo 6:31-34
    31 No andéis, pues, preocupados diciendo: ¿Qué vamos a comer?, ¿qué vamos a beber?, ¿con qué vamos a vestirnos?
    32 Que por todas esas cosas se afanan los gentiles; pues ya sabe vuestro Padre celestial que tenéis necesidad de todo eso.
    33 Buscad primero su Reino y su justicia, y todas esas cosas se os darán por añadidura.
    34 Así que no os preocupéis del mañana: el mañana se preocupará de sí mismo. Cada día tiene bastante con su propio mal.

  • Segunda opción

  • Primera lectura

    I Corintios 5:1-8
    1 Sólo se oye hablar de inmoralidad entre vosotros, y una inmoralidad tal, que no se da ni entre los gentiles, hasta el punto de que uno de vosotros vive con la mujer de su padre.
    2 Y ¡vosotros andáis tan hinchados! Y no habéis hecho más bien duelo para que fuera expulsado de entre vosotros el autor de semejante acción.
    3 Pues bien, yo por mi parte corporalmente ausente, pero presente en espíritu, he juzgado ya, como si me hallara presente, al que así obró:
    4 que en nombre del Señor Jesús, reunidos vosotros y mi espíritu, con el poder de Jesús Señor nuestro,
    5 sea entregado ese individuo a Satanás para destrucción de la carne, a fin de que el espíritu se salve en el Día del Señor.
    6 ¡No es como para gloriaros! ¿No sabéis que un poco de levadura fermenta toda la masa?
    7 Puruficaos de la levadura vieja, para ser masa nueva; pues sois ázimos. Porque nuestro cordero pascual, Cristo, ha sido inmolado.
    8 Así que, celebremos la fiesta, no con vieja levadura, ni con levadura de malicia e inmoralidad, sino con ázimos de pureza y verdad.

  • Salmo responsorial

    Salmo 5:5-7, 12
    5 Pues no eres tú un Dios que se complace en la impiedad, no es huésped tuyo el malo.
    6 No, los arrogantes no resisten delante de tus ojos. Detestas a todos los agentes de mal,
    7 pierdes a los mentirosos; al hombre sanguinario y fraudulento le abomina Yahveh.
    12 Y se alegren los que a ti se acogen, se alborocen por siempre; tú los proteges, en ti exultan los que aman tu nombre.

  • Evangelio

    Lucas 6:6-11
    6 Sucedió que entró Jesús otro sábado en la sinagoga y se puso a enseñar. Había allí un hombre que tenía la mano derecha seca.
    7 Estaban al acecho los escribas y fariseos por si curaba en sábado, para encontrar de qué acusarle.
    8 Pero él, conociendo sus pensamientos, dijo al hombre que tenía la mano seca: «Levántate y ponte ahí en medio.» El, levantándose, se puso allí.
    9 Entonces Jesús les dijo: «Yo os pregunto si en sábado es lícito hacer el bien en vez de hacer el mal, salvar una vida en vez de destruirla.»
    10 Y mirando a todos ellos, le dijo: «Extiende tu mano.» El lo hizo, y quedó restablecida su mano.
    11 Ellos se ofuscaron, y deliberaban entre sí qué harían a Jesús.

Lecturas 6 de Septiembre de 2020

 

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    Ezequiel 33:7-9
    7 A ti, también, hijo de hombre, te he hecho yo centinela de la casa de Israel. Cuando oigas una palabra de mi boca, les advertirás de mi parte.
    8 Si yo digo al malvado: «Malvado, vas a morir sin remedio», y tú no le hablas para advertir al malvado que deje su conducta, él, el malvado, morirá por su culpa, pero de su sangre yo te pediré cuentas a ti.
    9 Si por el contrario adviertes al malvado que se convierta de su conducta, y él no se convierte, morirá él debido a su culpa, mientras que tú habrás salvado tu vida.

  • Salmo responsorial

    Salmo 95:1-2, 6-9
    1 Venid, cantemos gozosos a Yahveh, aclamemos a la Roca de nuestra salvación;
    2 con acciones de gracias vayamos ante él, aclamémosle con salmos.
    6 Entrad, adoremos, prosternémonos, ¡de rodillas ante Yahveh que nos ha hecho!
    7 Porque él es nuestro Dios, y nosotros el pueblo de su pasto, el rebaño de su mano. ¡Oh, si escucharais hoy su voz!:
    8 «No endurezcáis vuestro corazón como en Meribá, como el día de Massá en el desierto,
    9 donde me pusieron a prueba vuestros padres, me tentaron aunque habían visto mi obra.

  • Segunda lectura

    Romanos 13:8-10
    8 Con nadie tengáis otra deuda que la del mutuo amor. Pues el que ama al prójimo, ha cumplido la ley.
    9 En efecto, lo de: No adulterarás, no matarás, no robarás, no codiciarás y todos los demás preceptos, se resumen en esta fórmula: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
    10 La caridad no hace mal al prójimo. La caridad es, por tanto, la ley en su plenitud.

  • Evangelio

    Mateo 18:15-20
    15 «Si tu hermano llega a pecar, vete y repréndele, a solas tú con él. Si te escucha, habrás ganado a tu hermano.
    16 Si no te escucha, toma todavía contigo uno o dos, para que todo asunto quede zanjado por la palabra de dos o tres testigos.
    17 Si les desoye a ellos, díselo a la comunidad. Y si hasta a la comunidad desoye, sea para ti como el gentil y el publicano.
    18 «Yo os aseguro: todo lo que atéis en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desatéis en la tierra quedará desatado en el cielo.
    19 «Os aseguro también que si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, sea lo que fuere, lo conseguirán de mi Padre que está en los cielos.
    20 Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.»