sábado, 17 de noviembre de 2018

Lecturas 17 de Noviembre de 2018

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    Eclesiástico 26:1-3, 15-18, 24
    1 Feliz el marido de mujer buena, el número de sus días se duplicará.
    2 Mujer varonil da contento a su marido, que acaba en paz la suma de sus años.
    3 Mujer buena es buena herencia, asignada a los que temen al Señor:
    15 Gracia de gracias la mujer pudorosa, no hay medida para pesar a la dueña de sí misma.
    16 Sol que sale por las alturas del Señor es la belleza de la mujer buena en una casa en orden.
    17 Lámpara que brilla en sagrado candelero es la hermosura de un rostro sobre un cuerpo esbelto.
    18 Columnas de oro sobre basas de plata, las bellas pierras sobre talones firmes.
    Salmo responsorial
  • Salmo 31:4-5, 8-9, 20, 24-25
    4 pues mi roca eres tú, mi fortaleza, y, por tu nombre, me guías y diriges.
    5 Sácame de la red que me han tendido, que tú eres mi refugio;
    8 ¡exulte yo y en tu amor me regocije! Tú que has visto mi miseria, y has conocido las angustias de mi alma,
    9 no me has entregado en manos del enemigo, y has puesto mis pies en campo abierto.
    20 ¡Qué grande es tu bondad, Yahveh! Tú la reservas para los que te temen, se la brindas a los que a ti se acogen, ante los hijos de Adán.
    24 Amad a Yahveh, todos sus amigos; a los fieles protege Yahveh, pero devuelve muy sobrado al que obra por orgullo.
    25 ¡Valor, que vuestro corazón se afirme, vosotros todos que esperáis en Yahveh!
  • Evangelio

    Mateo 25:31-40
    31 «Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria acompañado de todos sus ángeles, entonces se sentará en su trono de gloria.
    32 Serán congregadas delante de él todas las naciones, y él separará a los unos de los otros, como el pastor separa las ovejas de los cabritos.
    33 Pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda.
    34 Entonces dirá el Rey a los de su derecha: "Venid, benditos de mi Padre, recibid la herencia del Reino preparado para vosotros desde la creación del mundo.
    35 Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; era forastero, y me acogisteis;
    36 estaba desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a verme."
    37 Entonces los justos le responderán: "Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te dimos de comer; o sediento, y te dimos de beber?
    38 ¿Cuándo te vimos forastero, y te acogimos; o desnudo, y te vestimos?
    39 ¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel, y fuimos a verte?"
    40 Y el Rey les dirá: "En verdad os digo que cuanto hicisteis a unos de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis."

viernes, 16 de noviembre de 2018

Lecturas 16 de Noviembre de 2018

  • Primera lectura

    II Juan 4-9
    4 Me alegré mucho al encontrar entre tus hijos quienes viven según la verdad, conforme al mandamiento que recibimos del Padre.
    5 Y ahora te ruego, Señora - y no es que te escriba un mandamiento nuevo, sino el que tenemos desde el comienzo - que nos amemos unos a otros.
    6 Y en esto consiste el amor: en que vivamos conforme a sus mandamientos. Este es el mandamiento, como lo habéis oído desde el comienzo: que viváis en el amor.
    7 Muchos seductores han salido al mundo, que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Ese es el Seductor y el Anticristo.
    8 Cuidad de vosotros, para que no perdáis el fruto de nuestro trabajo, sino que recibáis abundante recompensa.
    9 Todo el que se excede y no permanece en la doctrina de Cristo, no posee a Dios. El que permanece en la doctrina, ése posee al Padre y al Hijo.
  • Salmo responsorial

    Salmo 119:1-2, 10-11, 17-18
    1 Dichosos los que van por camino perfecto, los que proceden en la ley de Yahveh.
    2 Dichosos los que guardan sus dictámenes, los que le buscan de todo corazón,
    10 De todo corazón ando buscándote, no me desvíes de tus mandamientos.
    11 Dentro del corazón he guardado tu promesa, para no pecar contra ti.
    17 Haz merced a tu siervo y viviré. y guardaré tu palabra.
    18 Abre mis ojos para que contemple las maravillas de tu ley.
  • Evangelio

    Lucas 17:26-37
    26 «Como sucedió en los días de Noé, así será también en los días del Hijo del hombre.
    27 Comían, bebían, tomaban mujer o marido, hasta el día en que entró Noé en el arca; vino el diluvio y los hizo perecer a todos.
    28 Lo mismo, como sucedió en los días de Lot: comían, bebían, compraban, vendían, plantaban, construían;
    29 pero el día que salió Lot de Sodoma, Dios hizo llover fuego y azufre del cielo y los hizo perecer a todos.
    30 Lo mismo sucederá el Día en que el Hijo del hombre se manifieste.
    31 «Aquel Día, el que esté en el terrado y tenga sus enseres en casa, no baje a recogerlos; y de igual modo, el que esté en el campo, no se vuelva atrás.
    32 Acordaos de la mujer de Lot.
    33 Quien intente guardar su vida, la perderá; y quien la pierda, la conservará.
    34 Yo os lo digo: aquella noche estarán dos en un mismo lecho: uno será tomado y el otro dejado;
    35 habrá dos mujeres moliendo juntas: una será tomada y la otra dejada.»
    36 Y le dijeron: «¿Dónde, Señor?» El les respondió: «Donde esté el cuerpo, allí también se reunirán los buitres.»

jueves, 15 de noviembre de 2018

Lecturas 15 de Noviembre de 2018

  • Primera lectura

    Philemon 7-20
    7 Pues tuve gran alegría y consuelo a causa de tu caridad, por el alivio que los corazones de los santos han recibido de ti, hermano.
    8 Por lo cual, aunque tengo en Cristo bastante libertad para mandarte lo que conviene,
    9 prefiero más bien rogarte en nombre de la caridad, yo, este Pablo ya anciano, y además ahora preso de Cristo Jesús.
    10 Te ruego en favor de mi hijo, a quien engendré entre cadenas, Onésimo,
    11 que en otro tiempo te fue inútil, pero ahora muy útil para ti y para mí.
    12 Te lo devuelvo, a éste, mi propio corazón.
    13 Yo querría retenerle conmigo, para que me sirviera en tu lugar, en estas cadenas por el Evangelio;
    14 mas, sin consultarte, no he querido hacer nada, para que esta buena acción tuya no fuera forzada sino voluntaria.
    15 Pues tal vez fue alejado de ti por algún tiempo, precisamente para que lo recuperaras para siempre,
    16 y no como esclavo, sino como algo mejor que un esclavo, como un hermano querido, que, siéndolo mucho para mí, ¡cuánto más lo será para ti, no sólo como amo, sino también en el Señor!.
    17 Por tanto, si me tienes como algo unido a ti, acógele como a mí mismo.
    18 Y si en algo te perjudicó, o algo te debe, ponlo a mi cuenta.
    19 Yo mismo, Pablo, lo firmo con mi puño; yo te lo pagaré... Por no recordarte deudas para conmigo, pues tú mismo te me debes.
    20 Sí, hermano, hazme este favor en el Señor. ¡Alivia mi corazón en Cristo!
  • Salmo responsorial

    Salmo 146:7-10
    7 hace justicia a los oprimidos, da el pan a los hambrientos, Yahveh suelta a los encadenados.
    8 Yahveh abre los ojos a los ciegos, Yahveh a los encorvados endereza, Ama Yahveh a los justos,
    9 Yahveh protege al forastero, a la viuda y al huérfano sostiene. mas el camino de los impíos tuerce;
    10 Yahveh reina para siempre, tu Dios, Sión, de edad en edad.
  • Evangelio

    Lucas 17:20-25
    20 Habiéndole preguntado los fariseos cuándo llegaría el Reino de Dios, les respondió: «El Reino de Dios viene sin dejarse sentir.
    21 Y no dirán: "Vedlo aquí o allá", porque el Reino de Dios ya está entre vosotros.»
    22 Dijo a sus discípulos: «Días vendrán en que desearéis ver uno solo de los días del Hijo del hombre, y no lo veréis.
    23 Y os dirán: "Vedlo aquí, vedlo allá." No vayáis, ni corráis detrás.
    24 Porque, como relámpago fulgurante que brilla de un extremo a otro del cielo, así será el Hijo del hombre en su Día.
    25 Pero, antes, le es preciso padecer mucho y ser reprobado por esta generación.

miércoles, 14 de noviembre de 2018

Lecturas 14 de Noviembre de 2018

  • Primera lectura

    Tito 3:1-7
    1 Amonéstales que vivan sumisos a los magistrados y a las autoridades, que les obedezcan y estén prontos para toda obra buena;
    2 que no injurien a nadie, que no sean pendencieros sino apacibles, mostrando una perfecta mansedumbre con todos los hombres.
    3 Pues también nosotros fuimos en algún tiempo insensatos, desobedientes, descarriados, esclavos de toda suerte de pasiones y placeres, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles y aborreciéndonos unos a otros.
    4 Mas cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador y su amor a los hombres,
    5 él nos salvó, no por obras de justicia que hubiésemos hecho nosotros, sino según su misericordia, por medio del baño de regeneración y de renovación del Espíritu Santo,
    6 que derramó sobre nosotros con largueza por medio de Jesucristo nuestro Salvador,
    7 para que, justificados por su gracia, fuésemos constituidos herederos, en esperanza, de vida eterna.
  • Salmo responsorial

    Salmo 23:1-6
    1 Salmo. De David. Yahveh es mi pastor, nada me falta.
    2 Por prados de fresca hierba me apacienta. Hacia las aguas de reposo me conduce,
    3 y conforta mi alma; me guía por senderos de justicia, en gracia de su nombre.
    4 Aunque pase por valle tenebroso, ningún mal temeré, porque tú vas conmigo; tu vara y tu cayado, ellos me sosiegan.
    5 Tú preparas ante mí una mesa frente a mis adversarios; unges con óleo mi cabeza, rebosante está mi copa.
    6 Sí, dicha y gracia me acompañarán todos los días de mi vida; mi morada será la casa de Yahveh a lo largo de los días.
  • Evangelio

    Lucas 17:11-19
    11 Y sucedió que, de camino a Jerusalén, pasaba por los confines entre Samaría y Galilea,
    12 y, al entrar en un pueblo, salieron a su encuentro diez hombres leprosos, que se pararon a distancia
    13 y, levantando la voz, dijeron: «¡Jesús, Maestro, ten compasión de nosotros!»
    14 Al verlos, les dijo: «Id y presentaos a los sacerdotes.» Y sucedió que, mientras iban, quedaron limpios.
    15 Uno de ellos, viéndose curado, se volvió glorificando a Dios en alta voz;
    16 y postrándose rostro en tierra a los pies de Jesús, le daba gracias; y éste era un samaritano.
    17 Tomó la palabra Jesús y dijo: «¿No quedaron limpios los diez? Los otros nueve, ¿dónde están?
    18 ¿No ha habido quien volviera a dar gloria a Dios sino este extranjero?»
    19 Y le dijo: «Levántate y vete; tu fe te ha salvado.»

martes, 13 de noviembre de 2018

Lecturas 13 de Noviembre de 2018

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    Tito 2:1-8, 11-14
    1 Mas tú enseña lo que es conforme a la sana doctrina;
    2 que los ancianos sean sobrios, dignos, sensatos, sanos en la fe, en la caridad, en la paciencia, en el sufrimiento;
    3 que las ancianas asimismo sean en su porte cual conviene a los santos: no calumniadoras ni esclavas de mucho vino, maestras del bien,
    4 para que enseñen a las jóvenes a ser amantes de sus maridos y de sus hijos,
    5 a ser sensatas, castas, hacendosas, bondadosas, sumisas a sus maridos, para que no sea injuriada la Palabra de Dios.
    6 Exhorta igualmente a los jóvenes para que sean sensatos en todo.
    7 Muéstrate dechado de buenas obras: pureza de doctrina, dignidad,
    8 palabra sana, intachable, para que el adversario se avergüence, no teniendo nada malo que decir de nosotros.
    11 Porque se ha manifestado la gracia salvadora de Dios a todos los hombres,
    12 que nos enseña a que, renunciando a la impiedad y a las pasiones mundanas, vivamos con sensatez, justicia y piedad en el siglo presente,
    13 aguardando la feliz esperanza y la Manifestación de la gloria del gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo;
    14 el cual se entregó por nosotros a fin de rescatarnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo que fuese suyo, fervoroso en buenas obras.
  • Salmo responsorial

    Salmo 37:3-4, 18, 23, 27, 29
    3 Ten confianza en Yahveh y obra el bien, vive en la tierra y crece en paz,
    4 ten tus delicias en Yahveh, y te dará lo que pida tu corazón.
    18 Yahveh conoce los días de los íntegros, su herencia será eterna;
    23 De Yahveh penden los pasos del hombre, firmes son y su camino le complace;
    27 Apártate del mal y obra el bien, tendrás para siempre una morada;
    29 los justos poseerán la tierra, y habitarán en alla para siempre.
  • Evangelio

    Lucas 17:7-10
    7 «¿Quién de vosotros tiene un siervo arando o pastoreando y, cuando regresa del campo, le dice: "Pasa al momento y ponte a la mesa?"
    8 ¿No le dirá más bien: "Prepárame algo para cenar, y cíñete para servirme hasta que haya comido y bebido, y después comerás y beberás tú?"
    9 ¿Acaso tiene que agradecer al siervo porque hizo lo que le fue mandado?
    10 De igual modo vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os fue mandado, decid: Somos siervos inútiles; hemos hecho lo que debíamos hacer.»

lunes, 12 de noviembre de 2018

Lecturas 12 de Noviembre de 2018

  • Primera lectura

    Efesios 4:1-7, 11-13
    1 Os exhorto, pues, yo, preso por el Señor, a que viváis de una manera digna de la vocación con que habéis sido llamados,
    2 con toda humildad, mansedumbre y paciencia, soportándoos unos a otros por amor,
    3 poniendo empeño en conservar la unidad del Espíritu con el vínculo de la paz.
    4 Un solo Cuerpo y un solo Espíritu, como una es la esperanza a que habéis sido llamados.
    5 Un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo,
    6 un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos, por todos y en todos.
    7 A cada uno de nosotros le ha sido concedido el favor divino a la medida de los dones de Cristo.
    11 El mismo «dio» a unos el ser apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelizadores; a otros, pastores y maestros,
    12 para el recto ordenamiento de los santos en orden a las funciones del ministerio, para edificación del Cuerpo de Cristo,
    13 hasta que llegemos todos a la unidad de la fe y del conocimiento pleno del Hijo de Dios, al estado de hombre perfecto, a la madurez de la plenitud de Cristo.
  • Salmo responsorial

    Salmo 1:1-4, 6
    1 ¡Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los impíos, ni en la senda de los pecadores se detiene, ni en el banco de los burlones se sienta,
    2 mas se complace en la ley de Yahveh, su ley susurra día y noche!
    3 Es como un árbol plantado junto a corrientes de agua, que da a su tiempo el fruto, y jamás se amustia su follaje; todo lo que hace sale bien.
    4 ¡No así los impíos, no así! Que ellos son como paja que se lleva el viento.
    6 Porque Yahveh conoce el camino de los justos, pero el camino de los impíos se pierde.
  • Evangelio

    Juan 17:20-26
    20 No ruego sólo por éstos, sino también por aquellos que, por medio de su palabra, creerán en mí,
    21 para que todos sean uno. Como tú, Padre, en mí y yo en ti, que ellos también sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado.
    22 Yo les he dado la gloria que tú me diste, para que sean uno como nosotros somos uno:
    23 yo en ellos y tú en mí, para que sean perfectamente uno, y el mundo conozca que tú me has enviado y que los has amado a ellos como me has amado a mí.
    24 Padre, los que tú me has dado, quiero que donde yo esté estén también conmigo, para que contemplan mi gloria, la que ma has dado, porque me has amado antes de la creación del mundo.
    25 Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero yo te he conocido y éstos han conocido que tú me has enviado.
    26 Yo les he dado a conocer tu Nombre y se lo seguiré dando a conocer, para que el amor con que tú me has amado esté en ellos y yo en ellos.»

Lecturas 11 de noviembre de 2018

Lecturas del día:

  • Primera lectura

    I Reyes 17:10-16
    10 Se levantó y se fue a Sarepta. Cuando entraba por la puerta de la ciudad había allí una mujer viuda que recogía leña. La llamó Elías y dijo: «Tráeme, por favor, un poco de agua para mí en tu jarro para que pueda beber.»
    11 Cuando ella iba a traérsela, le gritó: «Tráeme, por favor, un bocado de pan en tu mano.»
    12 Ella dijo: «Vive Yahveh tu Dios, no tengo nada de pan cocido: sólo tengo un puñado de harina en la tinaja y un poco de aceite en la orza. Estoy recogiendo dos palos, entraré y lo prepararé para mí y para mi hijo, lo comeremos y moriremos.»
    13 Pero Elías le dijo: «No temas. Entra y haz como has dicho, pero primero haz una torta pequeña para mí y tráemela, y luego la harás para ti y para tu hijo.
    14 Porque así habla Yahveh, Dios de Israel: No se acabará la harina en la tinaja, no se agotará el aceite en la orza hasta el día en que Yahveh conceda la lluvia sobre la haz de la tierra.
    15 Ella se fue e hizo según la palabra de Elías, y comieron ella, él y su hijo.
    16 No se acabó la harina en la tinaja ni se agotó el aceite en la orza, según la palabra que Yahveh había dicho por boca de Elías.
  • Salmo responsorial

    Salmo 146:7-10
    7 hace justicia a los oprimidos, da el pan a los hambrientos, Yahveh suelta a los encadenados.
    8 Yahveh abre los ojos a los ciegos, Yahveh a los encorvados endereza, Ama Yahveh a los justos,
    9 Yahveh protege al forastero, a la viuda y al huérfano sostiene. mas el camino de los impíos tuerce;
    10 Yahveh reina para siempre, tu Dios, Sión, de edad en edad.
  • Segunda lectura

    Hebreos 9:24-28
    24 Pues no penetró Cristo en un santuario hecho por mano de hombre, en una reproducción del verdadero, sino en el mismo cielo, para presentarse ahora ante el acatamiento de Dios en favor nuestro,
    25 y no para ofrecerse a sí mismo repetidas veces al modo como el Sumo Sacerdote entra cada año en el santuario con sangre ajena.
    26 Para ello habría tenido que sufrir muchas veces desde la creación del mundo. Sino que se ha manifestado ahora una sola vez, en la plenitud de los tiempos, para la destrucción del pecado mediante su sacrificio.
    27 Y del mismo modo que está establecido que los hombres mueran una sola vez, y luego el juicio,
    28 así también Cristo, después de haberse ofrecido una sola vez para quitar los pecados de la multitud, se aparecerá por segunda vez sin relación ya con el pecado a los que le esperan para su salvación.
  • Evangelio

    Marcos 12:38-44
    38 Decía también en su instrucción: «Guardaos de los escribas, que gustan pasear con amplio ropaje, ser saludados en las plazas,
    39 ocupar los primeros asientos en las sinagogas y los primeros puestos en los banquetes;
    40 y que devoran la hacienda de las viudas so capa de largas oraciones. Esos tendrán una sentencia más rigurosa.
    41 Jesús se sentó frente al arca del Tesoro y miraba cómo echaba la gente monedas en el arca del Tesoro: muchos ricos echaban mucho.
    42 Llegó también una viuda pobre y echó dos moneditas, o sea, una cuarta parte del as.
    43 Entonces, llamando a sus discípulos, les dijo: «Os digo de verdad que esta viuda pobre ha echado más que todos los que echan en el arca del Tesoro.
    44 Pues todos han echado de los que les sobraba, ésta, en cambio, ha echado de lo que necesitaba todo cuanto poseía, todo lo que tenía para vivir.