jueves, 1 de octubre de 2009

Evangelio 2 de Octubre de 2009

Primera Lectura:
Baruc 1,15-22"Pecamos contra el Señor no haciéndole caso"
Confesemos que el Señor, nuestro Dios, es justo, y a nosotros nos abruma hoy la vergüenza: a los judíos y vecinos de Jerusalén, a nuestros reyes y gobernantes, a nuestros sacerdotes y profetas y a nuestros padres; porque pecamos contra el Señor no haciéndole caso, desobedecimos al Señor, nuestro Dios, no siguiendo los mandatos que el Señor nos había dado. Desde el día en que el Señor sacó a nuestros padres de Egipto hasta hoy, no hemos hecho caso al Señor, nuestro Dios, hemos rehusado obedecerle. Por eso, nos persiguen ahora las desgracias y la maldición con que el Señor conminó a Moisés, su siervo, cuando sacó a nuestros padres de Egipto para darnos una tierra que mana leche y miel. No obedecimos al Señor, nuestro Dios, que nos hablaba por medio de sus enviados, los profetas; todos seguimos nuestros malos deseos, sirviendo a dioses ajenos y haciendo lo que el Señor, nuestro, Dios reprueba.
Salmo Responsorial:
78"Líbranos, Señor, por el honor de tu nombre"
Dios mío, los gentiles han entrado en tu heredad, / han profanado tu santo templo, / han reducido Jerusalén a ruinas. / Echaron los cadáveres de tus siervos / en pasto a las aves del cielo, / y la carne de tus fieles / a las fieras de la tierra. R.
Derramaron su sangre como agua / en torno a Jerusalén, / y nadie la enterraba. / Fuimos el escarnio de nuestros vecinos, / la irrisión y la burla de los que nos rodean. / ¿Hasta cuándo, Señor? / ¿Vas a estar siempre enojado? / ¿Arderá como fuego tu cólera? R.
No recuerdes contra nosotros / las culpas de nuestros padres; / que tu compasión nos alcance pronto, / pues estamos agotados. R.
Socórrenos, Dios, Salvador nuestro, / por el honor de tu nombre; / líbranos y perdona nuestros pecados / a causa de tu nombre. R.
Evangelio:
Mateo 18,1-5,10"Quien se hiciere pequeño como este niñito, ese es el mayor en el reino de los cielos"
En aquel tiempo, los discípulos se llegaron a Jesús y le preguntaron: "En conclusión, ¿quién es el mayor en el reino de los cielos?". Entonces, Él llamó a sí a un niño, lo puso en medio de ellos, y dijo: "En verdad, os digo, si no volviereis a ser como los niños, no entraréis en el reino de los cielos. Quien se hiciere pequeño como este niñito, ese es el mayor en el reino de los cielos. Y quien recibe en mi nombre a un niño como éste, a Mí me recibe". Guardaos de despreciar a uno solo de estos pequeños, porque os digo que sus ángeles, en los cielos, ven continuamente la faz de mi Padre celestial.

No hay comentarios: