miércoles, 11 de abril de 2012

Evangelio 12 de Abril de 2012


Lecturas de la liturgia
  • Primera Lectura: Hechos 3,11-26
    "Matasteis al autor de la vida; pero Dios lo resucitó de entre los muertos"
    En aquel entonces dijo Isaías: «El Señor me ha dado una lengua de discípulo para que sepa sostener con mi palabra al cansado. Cada mañana me despierta el oído, para que escuche como los discípulos. El Señor me ha abierto el oído, y yo no me he resistido ni me he echado atrás.Ofrecí la espalda a los que me golpeaban, mis mejillas a los que tiraban mi barba; no oculté la cara ante los insultos y salivazos. El Señor me ayuda, por eso soportaba las ofensas, por eso endurecí mi cara como unapiedra, sabiendo que no quedaría defraudado. Mi defensor está cerca, ¿quién me denunciará? ¡Comparezcamos juntos! ¿Quién me va a acusar? ¡Que venga a decírmelo! Sepan que el Señor me ayuda: ¿Quién me condenará?»
  • Salmo Responsorial: 8
    "Señor, dueño nuestro, ¡qué admirable es tu nombre en toda la tierra!"
    ¡Señor, dueño nuestro, / ¿qué es el hombre, para que te acuerdes de él, / el ser humano, para darle poder? R.

    Lo hiciste poco inferior a los ángeles, / lo coronaste de gloria y dignidad, / le diste el mando sobre las obras de tus manos, / todo lo sometiste bajo sus pies. R.

    Rebaños de ovejas y toros, / y hasta las bestias del campo, / las aves del cielo, los peces del mar, / que trazan sendas por el mar. R.
  • Evangelio: Lucas 24,35-48
    "Así estaba escrito: el Mesías padecerá y resucitará de entre los muertos al tercer día"
    En aquel tiempo, contaban los discípulos lo que les había pasado por el camino y cómo habían reconocido a Jesús al partir el pan. Estaban hablando de estas cosas, cuando se presenta Jesús en medio de ellos y les dice: "Paz a vosotros." Llenos de miedo por la sorpresa, creían ver un fantasma. Él les dijo: "¿Por qué os alarmáis?, ¿por qué surgen dudas en vuestro interior? Mirad mis manos y mis pies: soy yo en persona. Palpadme y daos cuenta de que un fantasma no tiene carne y huesos, como veis que yo tengo."

    Dicho esto, les mostró las manos y los pies. Y como no acababan de creer por la alegría, y seguían atónitos, les dijo: "¿Tenéis ahí algo de comer?" Ellos le ofrecieron un trozo de pez asado. Él lo tomó y comió delante de ellos. Y les dijo: "Esto es lo que os decía mientras estaba con vosotros: que todo lo escrito en la ley de Moisés y en los profetas y salmos acerca de mí tenía que cumplirse." Entonces les abrió el entendimiento para comprender las Escrituras. Y añadió: "Así estaba escrito: el Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos al tercer día y en su nombre se predicará la conversión y el perdón de los pecados a todos los pueblos, comenzando por Jerusalén. Vosotros sois testigos de esto."

No hay comentarios: