El Papa Benedicto XVI recibió esta mañana a un grupo de astronautas de la Estación Espacial Internacional (EEI) con quienes dialogó el pasado 21 de mayo, en la histórica conexión que unió por primera vez a un Pontífice con miembros de una misión de este tipo desde el espacio.
El encuentro se realizó en la residencia pontificia de Castel Gandolfo, en donde el Santo Padre pasa unos días de reposo.
Entre los presentes estuvieron los italianos Roberto Vittori y Paolo Nespoli quienes le devolvieron la medalla de plata que tiene el fresco de la Creación de Miguel Ángel que adorna el techo de la Capilla Sixtina en el Vaticano y que los acompañó en la Estación Espacial.
El Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, P. Federico Lombardi, explicó que entre los regalos que hicieron los astronautas al Papa estaba un atlas del universo y un cuadro con una foto de la estación espacial, de la bandera vaticana y la bandera de la NASA.
El presidente de la Agencia Espacial Italiana, Enrico Saggese, y el director general de la Agencia Espacial Europea, Jean-Jacques Dordain, declararon sentirse muy emocionados y honrados porque el Papa los ha recibido, mostrando que los vuelos espaciales "son el símbolo de paz y cooperación internacional que preparan el futuro de la humanidad".
El 21 de mayo de este año, el Papa Benedicto XVI conversó sobre diversos temas con los astronautas de la EEI.
En aquella oportunidad el Papa comentó a Vittori que estar en la EEI, además de servir para la investigación científica, es "una aventura del espíritu humano, un poderoso estímulo para reflexionar sobre el origen y el futuro de universo y la humanidad. A menudo los creyentes miran el cielo ilimitado y meditan sobre el creador de todo, pensando en el misterio de su grandeza".
No hay comentarios:
Publicar un comentario